Con una marcha y manifestación frente a Casa de Gobierno y el Superior Tribunal de Justicia, familiares del joven qom Josué Lago, asesinado por la Policía en San Martín, demandaron justicia, acompañados por organizaciones y movimientos sociales.

El hermano de la víctima, Heraldo Lago, ofició de vocero y dialogó con los medios de comunicación explicando el motivo de la numerosa protesta: «Ahora estamos aquí con un dolor para que esto no quede impune, nos levantamos para exigir que se cumpla la Justicia, creo en la justicia y por eso estoy aquí, quiero que se esclarezca bien, que aquel que mató reciba su castigo, porque después esto va a seguir, sino sale a la luz la verdad esto va a seguir, nosotros no queremos que siga, que se agrande más el problema», expresó.
Por este hecho el gobernador Jorge Capitanich dispuso la separación inmediata del director de Zona y supervisores de la Dirección Regional de la localidad, la detención de cinco agentes dispuesta por la Fiscalía de Derechos Humanos de Sáenz Peña; la designación de un interventor de la Dirección Regional y la constitución del Estado como querellante particular de la causa.
El dolor en primera persona
Heraldo describió a los medios cómo le tocó transitar el duro momento: «En ese momento estaba en el trabajo, que gracias a Dios tengo, y cerca de las 11 me comunicaron algunos familiares, tías, hermanos, me dijeron así nomás, de una, ‘A tu hermano lo mataron’, y se me cayeron todas las ganas de seguir caminando y de vivir», recordó. «En ese momento no creía hasta que lo vi, me enviaron fotos, videos, todo, por eso es que cuando llegué a ese lugar no lo podía creer, me encontré con una tragedia que no le deseo a nadie», describió. «Mi hermano estuvo tirado desde las 9 hasta las 18, ha recibido un impacto de bala en el pecho y no tuvo ni siquiera la oportunidad de decir algo, unas últimas palabras», dimensionó, no solo la inmediatez de su muerte, sino además el largo proceso que se inició en ese momento por parte de los familiares y amigos para asegurar una investigación imparcial de los hechos, por lo cual tomó intervención la Fiscalía Especial de DDHH con jurisdicción en Sáenz Peña.
Al momento de comentar las respuestas obtenidas por parte del Estado, Lago señaló que «el gobernador se comunicó por teléfono con mi padre y le prometió que esto no va a quedar impune, que aquel que mata reciba su castigo, entonces mi papá lo único que le dijo, y dándole un consejo también, fue que si tiene una bolsa de papas y hay una que está podrida a esa se la saca, eso fue lo que dijo al gobernador, porque si no se la saca se van pudriendo todas las demás», contó detalles de la comunicación. Haciendo referencia a esta alegoría, el hermano de la víctima reflexionó: «Quiero que se esclarezca bien, que aquel que mató reciba su castigo, porque si no sale a la luz la verdad esto va a seguir, nosotros no queremos que siga esto, que se agrande más el problema».
Que no se agrave
Ante esto reiteró: «Nosotros pedimos justicia, que la Justicia empiece a cumplir todas las palabras que promete, que siempre van a estar con vos y acompañarte, solo pido que se haga justicia por mi hermano, me lo quitaron y no me lo devuelven más», sostuvo.
Lago también intentó describir las circunstancias en las que ocurrió el hecho: «Mi hermano fue a visitarlo a mi papá que tiene su casita ahí, mi papá es una persona de edad, tiene más de 80 años y no puede hacer más trabajo, y él changueaba y lo poco que ganaba siempre compartía con su papá, ahora no está más y no sé qué va a pasar ahora con mi papá. Josué estaba tranquilo, no estaba robando, no estaba tomando, pero vino alguien, parece que no le tembló el pulso y empezó a disparar», resumió.
Según el testimonio de vecinos que fue compartido por el diputado provincial Rodolfo Schwartz, «un patrullero de la Policía de San Martín paró frente a dos jóvenes que se encontraban sentados cerca de la escuela del barrio Los Silos. Un policía se bajó y agrediendo con palabras sacó la 9 milímetros y realizó dos disparos, dándole en el pecho al joven Josué Lago, de 23 años, matándolo a sangre fría en el acto e hiriendo al otro chico».
Lago, por su parte, explicó que los policías «salieron a detener lo que estaban provocando, que no era grande, era una provocación pequeña, y salieron todos y empezaron a disparar, en toda esa pelea me quitaron a mi hermano, estaba tranquilo y no estaba molestando a nadie, entonces lo único que pido es que se haga justicia, porque otros hermanos sufrieron la misma consecuencia y quedaron impunes, y no quiero quede esto impune, quiero se aclare todo y el que mató reciba su castigo», reiteró. Al mismo tiempo destacó: «Y no era cualquier persona la que mató, era un policía, que le está pagando el Gobierno», resaló.
En este sentido, tanto desde las organizaciones sociales como del mismo Comité Provincial contra la Tortura recordaron que este no es el primer hecho de este tipo. «La violencia institucional hacia los pueblos indígenas no resultan hechos aislados en nuestra provincia, por lo que reiteradamente este Comité viene bregando por una discusión seria en el tema para prevenir y evitar que se reiteren estas situaciones», señalaron desde el organismo provincial. «No es la primera vez que la Policía actúa así, esto no es un caso aislado como quieren hacer ver los funcionarios politiqueros y la Policía. Es un lento genocidio y disciplinamiento de la juventud qom; ser originario, joven y pobre parece ser un delito», indicaron desde el movimiento qom Lashepi Originarias del Chaco en la FOB La Libertaria.
Por último, el joven manifestó su preocupación: «Mi hermano era el único que estaba con mi padre, era soltero y le quitaron la posibilidad de tener familia, de ser padre, y ahora mi padre quedó ahí solito», indicó. «Lo que le pasó a él no le deseo a nadie, y ahora quedó con un gran vacío en su corazón y su vida», aportó. «Estamos pidiendo justicia, que se esclarezca todo, que salga a la luz», finalizó.
Diez años sin Mártires López
Ayer, además, se cumplieron diez años de la muerte de Mártires López, principal dirigente originario campesino de los últimos 20 años, fundador de la Unión Campesina del Chaco, de la Federación Nacional Campesina de la República Argentina, del Movimiento de Naciones y Pueblos Originarios en Lucha. Por esto desde el PPR recordaron su legado y las dudosas circunstancias que pusieron fin a su vida.
«Hace diez años veníamos del gran triunfo de la Marcha de El Impenetrable. A seis días de firmar un importante acuerdo tuvo un supuesto accidente de tránsito en San Martín. La causa fue inicialmente caratulada como accidente de tránsito. Nuestra investigación aporta elementos para entender que la falta absoluta de raspones en la moto y en su rostro, con el cráneo hundido del lado izquierdo, junto a la fractura de la pierna derecha y a la sangre que había sobre el tanque de la moto, indican que tuvo un golpe previo en la cabeza, cerca del lugar donde cayera con la moto lentamente sobre su pierna, tratando de llegar al hospital de San Martín».
Al mismo tiempo recordaron que «cuatro veces cerraron la causa y con grandes movilizaciones logramos reabrirla, para conocer la verdad sobre su muerte. Últimamente también se cerró la cuarta, con una resolución que no compartimos».
En palabras de su madre, Mártires «se transformó en dirigente al ponerse al frente de las necesidades de su pueblo». Según el recuerdo de sus compañeros de lucha: «Mártires era un campesino originario sin tierra. Le obsesionaba hacer producir la misma con sus hermanos. Quería ser maestro bilingüe intercultural y para eso estudiaba. Pero la hambruna de 2000-2001, que se llevaba la vida de niños y ancianos, lo empujó a ponerse al frente de su pueblo para salir a buscar respuestas», recordaron.
«Se inició ahí, un camino conjunto de organización y lucha. En cada marcha se extendía la organización, se sumaban necesidades profundas. La tierra, la defensa de los territorios, la producción, el agua, la electricidad, la construcción de viviendas. Ponerse de pie con dignidad, iniciando una nueva etapa en la larga historia de lucha de los pueblos originarios del Chaco».
«La muerte de Mártires debe ser una causa nacional de los que luchan por justicia, soberanía, democracia y los derechos ancestrales de los pueblos originarios, por los que puso en juego su vida», instaron.