Fortalecido por la histórica remontada electoral del último domingo que lo devolvió al escenario político nacional, el gobernador Jorge Capitanich ya delinea un plan de «relanzamiento» de su gestión y apunta todos sus cañones a la consolidación de la reactivación económica.
Ágil de reflejos, Coqui capitalizó el triunfo que le dieron los casi 65 mil votos recuperados respecto de las Paso y movió el mismo lunes hilos en Buenos Aires, donde se reunió ni más ni menos que con el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
De regreso en Resistencia, convocó desde ayer a algunos de sus funcionarios clave y les encargó una serie de políticas públicas prioritarias que él mismo seguirá de cerca, prácticamente que con monitoreos diarios de avances y evolución de resultados.
Los ejes de esta nueva etapa de la gestión serán varios, pero la generación de empleo privado formal y el control de precios de alimentos serán claves y estratégicos.
Capitanich pretende un shock de creación de puestos de trabajo a través de dos vías: reconversión de planes sociales y una batería de incentivos a las empresas que tomen personal.
En los próximos días será presentada una campaña de promoción de las distintas herramientas vigentes en la provincia (el programa Chaco + Empleo, especialmente) y comenzará una ronda de reuniones con las distintas cámaras empresariales y gremiales mercantiles a fin de dar a conocer las ventajas de estos esquemas de facilidades laborales.
El objetivo es incrementar la cantidad de trabajadores formales en toda la provincia, particularmente en los sectores que son los más beneficiados por la recuperación de la actividad en la salida de la pandemia.
Para el gobernador este es «el momento» de potenciar a las pymes y que el crecimiento venga acompañado de creación de empleo.
A esto se le sumarán una serie de anuncios de concreción de nuevas radicaciones industriales y la cristalización de inversiones privadas productivas.
Capitanich trazó un escenario favorable sobre todo en la primera parte de 2020 que buscará exprimir al máximo y que, espera, tenga su consecuente efecto positivo tanto en el resto de la economía como en la opinión pública.
Hay dos inversiones que personalmente son seguidas de cerca por el mandatario y que estos días tendrían novedades positivas: el desembarco de una firma brasileña que se dedica a la fabricación de pelotas y otros implementos para la práctica deportiva; y la puesta en marcha de un frigorífico en Margarita Belén, en las instalaciones que construyó una empresa rusa pero que nunca inició actividades.
Respecto del primer caso, el ministro de Producción, Industria y Empleo, Sebastián Lifton, concretará la semana que viene un viaje al municipio brasileño de Vicentina (en el estado de Mato Grosso do Sul) para cerrar detalles de la llegada de la empresa Kagiva.
Lo del frigorífico es un tanto más complejo, ya que la salida de los capitales rusos involucra operaciones en dólares, en un momento de complejidad para el acceso a divisas en todo el país.
PRECIOS CONTROLADOS
Otra de las prioridades de gestión planteadas por el gobernador tiene que ver con el programa de monitoreo y congelamiento de precios que rige a nivel provincial y que es clave para el resguardo del poder adquisitivo de las familias chaqueñas.
El mandatario indicó avanzar tanto con una canasta propia de alimentos y artículos de primera necesidad a precios bajos; y, al mismo tiempo, potenciar a las pymes industriales provinciales que fabrican esos productos.
En este esquema entraría un nuevo acuerdo que fije costos finales para las y los consumidores de cara a las fiestas de fin de año y con miras a tener «un fin de año sin sobresaltos».