El Ministerio de Seguridad y Justicia destacó ayer el trabajo conjunto de la Justicia y de la Policía del Chaco en la investigación del crimen de Fernando Francovich que permitió atrapar a los cinco implicados en el hecho.
Desde la cartera de Seguridad se confirmó que fue detenido el único hombre que estaba prófugo por el caso de Francovich, el camionero asesinado en Avia Terai en marzo pasado.
Se trata de Carlos Banegas, alias Cuchina, quien fue capturado por la Policía del Chaco el miércoles 18 en un campo de 650 hectáreas ubicado en el departamento Almirante Brown, detrás del paraje El Rebusque, entre Pampa del Infierno y Fuerte Esperanza.
Previo a la detención, el Ministerio de Seguridad y Justicia había ofrecido una recompensa de $3 millones para quien aportara datos de su paradero.
«TRABAJO EXHAUSTIVO»
«Con mucha seriedad desde la Fiscalía y la Policía del Chaco como auxiliar de la Justicia han trabajado exhaustivamente con las pistas y evidencias para esclarecer este lamentable crimen. También durante todo el proceso hemos mantenido conversaciones con la familia de la víctima a los fines de informarles los avances de la investigación. Hoy podemos decir que todos los implicados están detenidos y a disposición de la Justicia», subrayó ayer la ministra Gloria Zalazar.
Benegas era último prófugo que quedaba en la causa, en la que también están detenidos Celestino y Carlos Alfredo Cárdenas, Mario Andrés Giménez, alias Chony; y Walter Javier Díaz.
Todos se encuentran detenidos en Presidencia Roque Sáenz Peña y Machagai en el marco de la causa «Supuesto homicidio».
Esta semana, el fiscal a cargo de la causa, Gustavo Valero, ordenó que tanto Benegas como el resto de los detenidos, sean requisados a fin de determinar si poseían celulares y de retirar los aparatos de sus celdas.
EL CASO
Francovich tenía 33 años, vivía en Villa Ocampo, Santa Fe y era camionero. El 21 de marzo, luego de hacer tres entregas en el marco de un viaje al Chaco, fue interceptado por una banda de asaltantes que se movía en tres camionetas, a la altura de Avia Terai, sobre la ruta 16.
Fernando, herido y ensangrentado, puso en marcha su Scania G-360 con acoplado. Condujo ocho kilómetros y frenó en una estación de servicio. Intentó pedir ayuda, pero se desvaneció ante los playeros.