En medio de una crisis económica que afecta a múltiples sectores, Rolando Kramer, representante de la Asociación Civil de Quiosqueros Unidos del Chaco, detalló el panorama actual: «Hay una incertidumbre que es la parte más fea de la cuestión, no sabemos si el modelo de quiosco que nosotros hoy trabajamos va a ser viable en el futuro, eso genera mucha incertidumbre», describió.
Consultado por Radio Facundo Quiroga sobre el alerta emitido a nivel nacional por cierres en este sector, el referente sostuvo que no conoce «un solo caso que tiró los guantes digamos, motivado probablemente por otras expectativas, por hacer otra cosa, porque hay distintos modelos también, el quiosco que apuesta a crecer y a tomar personal y a formar una pequeña pyme, y esa estuvo hasta ahora funcionando bien, o relativamente bien», indicó y reconoció que «también están los quioscos que digamos sacan de la caja y ponen en el bolsillo y se mezcla con la familia todo y entonces eso es más complicado de analizar», describió.
Ante esto señaló que desde la asociación se realizan capacitaciones en este sentido: «Se hace un poco de docencia dentro de la asociación para justamente armar pequeñas pymes, pequeñas empresas, donde no debe faltar el análisis básico de cualquier empresa, un pequeño estado de resultado para ver cuál es la rentabilidad que estamos teniendo mes a mes, eso lo hacemos, eso lo explicamos, y eso te da un panorama de cómo están las cosas», indicó.
En esta línea, Kramer explicó: «Nuestro consejo siempre para todos mis colegas es que la caja es sagrada, la caja tiene que ser exacta al final del día y tienen que los ingresos y los egresos coincidir para que yo pueda mirar al final de mi semana o al final del mes qué pasó con mi actividad, esto es lo que ocurre, lo que debería ocurrir está en cualquier empresa y esta es una pequeña empresa».
Paliar la crisis
En cuanto a las medidas adoptadas para enfrentar la crisis, Kramer señala: «Si hay una escasez de recursos nos ajustamos, tratamos de generar algún nuevo recurso para poder nivelar la cuestión».
Con respecto a las expectativas a futuro sostuvo que calcula que «en los seis meses que se vienen ojalá que se produzca el efecto B, el rebote para que la economía crezca».
Al mismo tiempo aportó: «Entiendo que si los números macroeconómicos funcionan bien los créditos tienden a bajar la base del crecimiento de cualquier empresa, es el crédito en todo el mundo», dimensionó y ejemplificó: «Si, yo voy a comprar una máquina nueva, voy al banco, y saco un crédito razonable, y con eso produjo más, mejor, más eficiente, etcétera, hoy eso es imposible, no sé cómo va a ser y cuándo va a llegar, pero vos te vas a cualquier lugar del mundo, a cualquier lugar de tu economía relativamente sana y creces en función de esto, nosotros no lo podemos hacer, si yo tengo que tecnificarse hoy, para mejorar mi eficiencia en un autodespacho cuesta un montón de plata y crédito, entonces no es posible», reconoció.
En cuanto a las medidas adoptadas para enfrentar la crisis, el referente señaló: «Si hay algún problemita médico, vamos al médico, si hay una escasez de recursos nos ajustamos, tratamos de generar algún nuevo recurso para poder nivelar la cuestión».
Finalmente entendió: «Tengo que ser lo más eficiente posible en el gasto, tengo que tratar de ser racional con que todos nuestros colaboradores entiendan que la situación es difícil y tratar de mejorar la operatoria». A modo de conclusión sostuvo que «hay que aguantar, aunque es horrible lo que digo, pero hay que aguantar, ajustar, analizar para dónde vamos».