Sigue la causa para cerrar el terrible asesinato de Johana González. Más allá que el único sospechoso, Mario Barrientos, está detenido, a medida que pasan los días se van conociendo más detalles del espeluznante episodio ocurrido hace pocos días en el norte de Resistencia.
La querella, en la persona del abogado Pablo Vianello, pretende establecer que fue un femicidio.
En ese sentido, el viernes se realizó una audiencia donde se escucharon las primeras declaraciones testimoniales del caso. Hablaron la madre de la víctima, una amiga y vecina del imputado.
Vianello destacó que la «amiga y vecina de quien hoy está como acusado del crimen aportó datos muy importantes y reveladores para empezar a armar el rompecabezas de la investigación que va a, seguramente, desembocar en un juicio por jurados».
Asimismo, habló con los medios y valoró el esfuerzo que hizo Delia, madre de Johana, para contar algo que por dentro le provocaba un tremendo dolor, que es nada menos que la muerte de su hija.
«Cuando habló de la interacción que hubo con Barrientos posterior a la fatídica noche del 21 de mayo, hoy ya tenemos por acreditado que fue el momento en el que se le dio muerte a Johana».
«En esos días posteriores hubo una interacción importante por parte de Barrientos no solo con la madre de Johana, sino también con su padre. Las declaraciones de Delia hicieron entrever claramente un perfil psicológico nefasto por parte de este señor, que estaba controlando qué hacía la familia y se estaba asegurando de que su crimen salga impune», sostuvo Vianello en declaraciones a Ciudad TV.
En cuanto a los dichos de la amiga del acusado, esta «se refirió a una importante fogata que llamó la atención a varios de los vecinos, de hecho, algunos atinaron a llamar al cuerpo de bomberos» y recordó a Barrientos «con una recolección de maderas y leños que pidió a los vecinos con la excusa de hacer una comida».
«Hoy, nos damos cuenta que era una fogata necesaria para ocultar los diferentes rastros que había dejado el deceso de Johana», planteó el letrado.
«A partir de la declaración de esta chica, que vive enfrente de la casa de Barrientos, se van a citar a diferentes vecinos para corroborar estos dichos y sobre todo para corroborar el ánimo de Barrientos de ocultar su crimen», adelantó y señaló la existencia de «varios audios, que ya están aportados a la causa, donde esta persona reconoce el vínculo que tenía con Johana pero también se desvinculada del hecho».
El abogado aseguró, además, que los testimonios que falta escuchar servirán «no solo para acreditar el vínculo sino el contexto de violencia en el que se encontraba inmersa Johana por su vulnerabilidad y básicamente por el ensañamiento de esta persona», dijo.
«En los dichos de esta última testigo quedó acreditado que quería que ella esté con él, que cambie su vida y, también por los dichos de la madre, quedó acreditado que se ponía muy nervioso», agregó.
«La investigación hoy tiene un rumbo que nos esperanza en que posiblemente antes de fin de año tengamos un juicio por jurado y esta persona pueda ser condenada por un homicidio doblemente agravado, con una pena de reclusión perpetua que es lo que quiere la familia», concluyó Vianello.
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