Por Gustavo Adolfo Ríos
Del 13 al 21 próximos, Resistencia se convertirá en el epicentro del arte contemporáneo con la Bienal Internacional de Escultura del Chaco 2024. Diez escultores de la Argentina, Chile, España, Estados Unidos, Kosovo, Letonia, Nueva Zelanda, Perú, Rumanía y Turquía, trabajarán el metal para dar vida a obras que enriquecerán el patrimonio artístico de la ciudad.
Más allá de la competencia, la Bienal ofrece un abanico de actividades para el público: un simposio sobre nuevas tecnologías en el arte, talleres de escultura, espectáculos de danza, teatro y música, una exposición de artesanos indígenas .
Los artistas que competirán este año, esculpiendo sus obras en el predio a la vista del público e interactuando con los visitantes durante los 8 días que dura la Bienal, han sido seleccionados entre 150 postulantes y son: Luis Bernardi (Argentina), Alejandro Mardones Guillén (Chile), Carlos Iglesias (España), Billy Lee (Estados Unidos), Butrint Morina (Kosovo), Solveiga Vasiljeva (Letonia), Anna Korver (Nueva Zelanda), Percy Raúl Zorrilla Soto (Perú), Bogdam Adrian Lefter (Rumanía) y Emrah Önal (Turquía).
Asimismo, Josese Eidman, presidente de la Fundación Urunday, entrevistado por LA VOZ DEL CHACO brindó detalles de esta nueva edición que como en otras ediciones convocará a millones de visitantes.
-Estamos a días del inicio de la XIII Edición de la Bienal de Esculturas 2024.
-Así es. A una semana, exactamente de empezar. Lo vivimos con mucha emoción y mucha ansiedad porque cada Bienal, a pesar de que ya pasaron 36 años, desde aquel primer concurso de escultura en la plaza a 25 de Mayo, es una nueva experiencia para todos nosotros.
-¿Qué va a tener de nuevo esta Bienal?
-Las bienales siempre traen alguna novedad porque es, ni más ni menos que un acontecimiento que se construye alrededor del arte contemporáneo, pero conserva en la esencia la escultura, que es como el fuego sagrado de esta Bienal.
Esto nace como un concurso nacional, con el tiempo va evolucionando. Es considerada en la actualidad en el circuito mundial de escultura cielo abierto como la más importante del mundo.
Es si tuviéramos que decirlo de manera coloquial es como el mundial de las esculturas.
Estos grandes artistas contemporáneos, consagrados en diferentes países del mundo, llegan a Resistencia y durante una semana trabajan con esta modalidad tan singular, a cielo abierto, en un espacio público, creando obras que finalmente pasan a enriquecer un patrimonio que hoy ya cuenta con casi 700 obras de los grandes maestros de la escultura argentina y de grandes maestros de la escultura contemporánea de las últimas tres décadas que quedan a través de cada Bienal.
Alrededor de la escultura, que como te decía recién, es como la actividad central de la Bienal del Chaco, se han ido agregando otras disciplinas, otros lenguajes artísticos, cada vez más enriquecidos.
Tenemos danza, teatro, música, artesanía, actividades académicas muy relevantes como el Congreso Internacional de Artes y otros eventos, otras actividades, un ciclo de actividades formativas con conferencias magistrales, talleres, mesas redondas, muy nutritivos no solo para la gente del mundo de las artes, sino para la comunidad en general.
Uno sea o no del palo, en este acontecimiento que está pensado para todos y construido por todos, tienen la posibilidad de acceder a cajas de conocimiento, a activos intelectuales y a experiencias artísticas que realmente son de vanguardia y suceden en los países más desarrollados del mundo y sin escala llegan a Resistencia a través de esta Bienal, que es una de las bienales más conocidas y más respetadas a nivel mundial.
-Son un total de 10 escultores invitados los que participan en esta edición?
-Son 10 escultores, siempre son 10 escultores en concurso, son seleccionados entre cientos de postulantes.
En esta edición en particular fueron 150 las postulaciones que recibimos de 55 países para trabajar en el metal y complementariamente vienen otros 8 artistas que fuera de concurso trabajan con diferentes materiales y diversas técnicas y enriquecen esta especie de taller a cielo abierto en el que el predio se vuelve no solo en una ciudad dentro de la ciudad, porque son 10 hectáreas llenas de actividades artísticas, culturales, sino que se transforma en un gran taller a cielo abierto de escultura y también de otras disciplinas.
-¿Por qué se va a trabajar en metal en esta oportunidad?
-Bueno, el metal es una elección que el comité organizador realizó para poder ir variando las materialidades. Se trabajan generalmente diferentes tipos de mármoles, piedras y diferentes tipos de metales. Buscamos que la escultura que se realice luego pueda ser emplazada en el espacio público.
De hecho, eso es una regla. Cada escultura hecha en la Bienal tiene que ir sí o sí a parar en el espacio público para que forme parte del patrimonio de todos. Pero el material tiene que ser necesariamente lo más resistente posible a la intemperie.
Esa es la definición, esa es en realidad el motivo por el que se elige un material que sea fácil de mantener y que sea duradero. En esta ocasión el metal para generar alguna variación en relación al anterior que fue mármol.
-Además va a haber encuentros de escultores, esculturas efímeras puede ser, ¿verdad?
-En el marco de los artistas invitados estos que están fuera de concurso tenemos, esto que te decía artistas consagrados en diferentes partes del mundo, la mayoría argentinos, latinoamericanos, porque también queremos poner en valor la producción de nuestros artistas nacionales, donde van a estar trabajando diferentes propuestas, una es la arena, que es el clásico de Alejandro Arce que viene siempre y hace su escultura que tanto le gusta a los niños y a la familia.
Como una extensión de eso, esta vez Alejandro va a estar dando un taller de escultura en arena para los niños y para las personas que quieran aprender un poco con esta generosidad de transferir la técnica y de conectarlos con la escultura fundamentalmente a las nuevas generaciones. Y también tenemos a Milagro Tejerina, quien es una jujeña ganadora del Gran Premio de Honor que va a estar haciendo una obra textil habitable.
Alejandro Pérez que es un escultor chaqueño que va a traer una propuesta muy interesante porque es una escultura que va a estar levitando. Encontró un mecanismo que articulado con la Facultad de Ingeniería lograron hacer que con un compresor la escultura que va a realizar quede flotando.
Otro gran artista es Juan Pesani que va a trabajar en acero inoxidable una obra de 6 metros de altura y entre esos Camilo Guinot, último ganador del Premio Trabucco trabajando con fósforos y otros tantos más que nos traen de alguna manera esta posibilidad de enriquecernos cada vez más con el lenguaje escultórico que ya en Resistencia forma parte de esa identidad contemporánea.
Esta Bienal nos atraviesa a en no solo los 36 años de concurso, sino con esta gesta que inició el Fogón de los Arrieros a principios de los 60 cuando empezó a emplazar obras de grandes artistas argentinos en el espacio público como una locura, pero con la intención de embellecer esta ciudad que en ese momento era un atado de calles polvorientas y estos dos locos rosarinos tuvieron esta iniciativa que fue ni más ni menos que la semilla de esta ciudad de las esculturas.
-La ciudad se va a ver enaltecida nuevamente porque estas obras se van a repartir de en la ciudad.
-Una vez más esta Bienal deja como saldo un patrimonio y un activo artístico muy valioso y fundamentalmente en un contexto complejo desde el punto de vista económico.
La Bienal se ha transformado ya hace varias ediciones en un destino turístico del turismo cultural que se posiciona entre los primeros 15 del país, así que para nosotros los resistencianos y los que vivimos cerca la afluencia turística de otros puntos del país, del interior de la provincia también de otros países durante esta semana genera una actividad económica muy significativa.
Sin duda esto que Fabri decía estamos haciendo del arte un bien de todos tenía también esta otra dimensión de poder pensar que el arte en Resistencia por lo menos es mucho más que un conjunto de expresiones creativas, sino que es una enorme industria cultural, la mayor industria cultural que tiene hoy la provincia, pero también un motor económico que genera transformación social y educativa, pero fundamentalmente de impacto económico positivo en la comunidad.
-En este marco, en el Cuarto Congreso Internacional de Artes. ¿Qué va a haber allí? ¿Cómo se va a desarrollar?
-Sí, es la cuarta edición de lo que nosotros consideramos que es la actividad científica y académica más importante que tiene la Bienal dentro de una enorme propuesta de contenidos que se viene ensanchando en cada edición.
Este Congreso Internacional ha crecido de una manera impresionante, solo en cuatro ediciones ya hoy tiene el volumen y la relevancia de congresos que se desarrollan en otras partes del mundo con altísima cantidad de concurrentes.
Nosotros tenemos hoy la suerte de poder contar con académicos de altísimo nivel, de referentes del arte contemporáneo que vienen a Resistencia en un ciclo de actividades que es muy destacada y que vamos a tener la posibilidad de discutir en ese ámbito y de debatir acerca de los límites y las fronteras del arte contemporáneo.
Un espacio de discusión que no está restringido al mundo académico, no está restringido al cuerpo docente y a los alumnos de las carreras de arte, sino que cualquiera de nosotros que quisiera ir a escuchar por ejemplo a María del Carmen Magá a Oscar de Bueno o a Juan Carlos Visconti, quienes son próceres del pensamiento, alrededor de las diferentes disciplinas artísticas que van a estar presentes compartiendo esos saberes con todos nosotros que vamos a poder tener la chance de sentarnos y escucharlos sin tener que pagar un peso porque todas las actividades de esta bienal son absolutamente libres y gratuitas.
Esa fue la intención inicial de Fabri, de democratizar el arte, de generar acceso irrestricto al arte y a la cultura porque a eso se refería también cuando decía que el arte era para la gente, que no era de un elite que no era de un grupo selecto, sino que todos teníamos derecho a disfrutar de las diferentes disciplinas artísticas y expresiones culturales que se desarrollan durante un acontecimiento tan relevante como el que se ha convertido esta Bienal del Chaco.
-¿Y luego se viene la Bienal de El Impenetrable?
-Terminan de trabajar esa semana acá y viajan a Juan José Castelli que es un proyecto que también está impulsado por Fabriciano y que en aquel momento él ya estaba viendo de qué forma se aprovechaba el hecho de que los escultores ya estaban en territorio.
Estos escultores que de alguna manera van recorriendo diferentes simposios y concursos a lo largo del mundo siempre viajan, sobre todo aquellos que vienen de tan lejos. Tenemos escultores de China, no ahora en esta edición, pero sí tenemos escultores que han venido de países muy lejanos. En esta edición si, vienen de Kosovo de Letonia de Nueva Zelanda de países de Europa, de países de América.
Esto de venir necesariamente representa una oportunidad para poder trasladarlos a un acontecimiento similar y Fabri veía en eso la oportunidad de conectar la capital del Chaco con El Impenetrable, es decir, esto de poner en valor también el circuito turístico, artístico y cultural que implicaba, desde Resistencia, hacia el Impenetrable chaqueño.
Con este gesto se termina siendo una fiesta folclórica que celebra lo universal, porque alrededor de esos escultores del mundo, bueno aparece, el pan castelense las danzas clásicas. Se genera un intercambio muy interesante y que al final, también permite esa celebración de lo nuestro y como saldo, estas esculturas contemporáneas que tienen altísimo valor artístico, económico patrimonial, que quedan para Juan José Castelli, como sucede aquí en Resistencia cada vez que hay una Bienal.
-¿El arte y la cultura atraviesan un buen momento en este clima de crisis?
-El arte y la cultura atraviesan un momento durísimo como en toda la Argentina. Creo que nadie está ajeno a la realidad que nos toca a todos sí creo que el arte es un lugar de resistencia y fundamentalmente me refiero a resistir y a poder volvernos más resilientes y salir adelante.
Así como el pan alimenta el cuerpo, el arte alimenta el alma pero fundamentalmente el arte en esta Bienal también transforma los aspectos económicos y los aspectos sociales. Pensar que esta Bienal tiene una plataforma virtuosa.
Es una Bienal que no se resuelve de manera individual, sino que es una suma de voluntades y de esfuerzos en la que está involucrada nuestra enorme y poderosa Ley de Mecenazgo Provincial, que es una ley modelo. Eso permite que cualquier empresa ya sea chaqueña, argentina o internacional que tribute en el Chaco, tenga la posibilidad de derivar parte de sus impuestos provinciales a un proyecto que sea de interés cultural como la Bienal del Chaco, declarado de interés cultural y de esa manera se articula lo público y lo privado.
En este contexto por ley, la empresa privada tiene la posibilidad de derivar parte de sus aportes para que esta actividad se lleve adelante con otras fuentes complementarias. Son proyectos específicos como solicitantes del CFI para llevar adelante el Festival Filarmónico Juvenil, el encuentro de maestros artesanos argentinos y artesanos de pueblos originarios.
También otras actividades relacionadas con el simposio de la canción argentina que va por primera vez a tener su edición en la Bienal del Chaco. Son proyectos que nos permiten conseguir recursos para complementar esto de la Ley de Mecenazgo y por primera vez con muchísima presencia de lo que podríamos definir el financiamiento internacional, porque cada escultor que viene de diferentes países del mundo, en esta ocasión ha conseguido que sus países los promocionen los patrocinen para que puedan estar en Resistencia con todos los gastos pagos y representar a sus naciones en esta Bienal Internacional.
«‘El David’ es el símbolo
universal de la escultura»
-Esta edición va a ser particular porque es la primera vez que está emplazado «El David» en el predio de la Bienal. ¿No?
-Esta es una edición muy particular un poco respondiendo también a lo que me habías preguntado antes respecto a las novedades que nos trae la Bienal. Esta es una de las novedades junto al rol protagónico que va a tener en este espacio el diálogo y el debate acerca de cuál es el rol de las nuevas tecnologías y de la inteligencia artificial aplicada al arte.
En ese contexto los escultores del mundo y los visitantes del mundo que vengan a Resistencia se van a encontrar con un calco del David de Miguel Ángel. «El David» de Miguel Ángel que es ni más ni menos que el símbolo universal de la escultura.
Es decir, si uno tuviese que pensar en la escultura más famosa del mundo o en la escultura más importante de la historia del arte claramente estamos hablando de «El David» de Miguel Ángel por un montón de motivos. La particularidad de nuestro David de este David del Chaco es que es un calco realizado a partir de un gemelo digital tridimensional. Y es el primer calco realizado de esta manera y el único emplazado en el mundo.
Resistencia capital nacional de las esculturas cuenta con un patrimonio artístico valiosísimo, como te contaba hace un rato, ahora le suma y dándole cumplimiento a un deseo de Fabri.
El soñaba con que esta obra emblemática de la historia venga a formar parte de este patrimonio para enriquecer para dialogar con el arte contemporáneo que hay en este espacio. Bueno, se hizo realidad y se hizo realidad de una manera muy particular frente a un impedimento que no se nos permitía utilizar la técnica de calco tradicional porque había que sacar moldes sobre la escultura física.
Recurrimos a una tecnología innovadora que nos permitió hacer un escaneo de altísima resolución llevar al mundo de lo digital un David y en el mundo de la tridimensionalidad, tomar los moldes que después fueron impresos de ciento sesenta y pico de partes que armadas alrededor de un alma de acero nos dieron el molde para poder colar una alineación de materiales en el que predominan algunas resinas navales, el carbonato de calcio que entran te diría que líquidas pero endurecen tanto como la piedra misma y da una materialidad que es altamente resistente y que se va a quedar con nosotros seguramente por muchísimos, pero muchísimos años.
«Fabriciano nos sigue guiando»
-¿Qué cree que pensaría Fabriciano al ver esta nueva edición de la Bienal?
-Es una pregunta que siempre nos hacemos y llegamos a la conclusión de que desde donde esté seguramente nos sigue guiando y estaría muy feliz de ver como esta semilla, este árbol que sembró hace treinta y seis años se ha transformado en un bosque que nos contiene a todos.
Fabri siempre que le preguntaba cuál había sido la mejor Bienal, él te contestaba la próxima y de esa manera con esa sabiduría, porque Fabri era una persona muy simple pero muy sabia. Entonces en una frase a lo mejor sintetizaba lo que a cualquiera de nosotros nos lleva un montón de palabras esto que te decía antes, hacer del arte un bien de todos, estar pensando en que el arte es un agente transformador de la realidad y que no es para una elite sino que es para todos nosotros.
El arte tiene la capacidad de transformar la realidad de una comunidad que es lo que nos sucede y también decía Fabri siempre hay que buscar la excelencia. Esto de decir: la mejor Bienal es la próxima era una manera de marcarnos a nosotros su equipo que estábamos incondicionalmente encolumnados detrás de sus visiones esto de que siempre se puede mejorar.
Nos marcaba una forma de hacer, una forma de gestionar. En 2012 impulsado un poco la inquietud y la incertidumbre que tenía de cómo iba a seguir esto después de que ya no esté, nos incentivó para poder armar, desarrollar un sistema de gestión, un sistema de gestión de calidad para garantizar que los procesos de la Bienal se puedan seguir llevando adelante.
Independientemente de las personas y con la enorme satisfacción de que dos años después, en 2014, ese mismo sistema fue certificado con las normas Iram ISO 9001, normas de calidad internacional, siendo la Fundación Urunday y la Bienal del Chaco la única institución de América latina con certificación ISO para el desarrollo de sus procesos.
Fíjense la visión de Fabriciano y la generosidad de poder pensar en un proyecto que vaya mucho más allá de este mundo. Entonces hoy, respondiendo a lo que me preguntabas, yo creo que el negro sonríe feliz de donde esté, viendo que esta Bienal se ha transformado en una referencia en el mundo del arte, en el mundo de la cultura y que hoy hace que Resistencia sea una ciudad conocida y respetada en el mundo del arte internacional.