La gestión de Roy Nikisch como intendente está bajo la lupa. Concejal propone derogar artículo de la Emergencia Económica para transparentar las compras del municipio. Licitaciones no publicadas y con pliegos a medida de ciertas empresas, como fue el caso de los camiones recolectores y también la compra directa de maquinaria, es lo que se objeta.
Ante la llamativa política de contratación y compras que viene implementando el intendente Roy Nikisch, el concejal del Frente Chaqueño Fabricio Bolatti, propone derogar un artículo de la ordenanza que dispone el estado de Emergencia Económica de la Municipalidad, para que la gestión actual no siga obviando los procesos de licitación que requieren las compras que superan los 60 millones de pesos.
“En lo que va de la gestión de Nikisch, hemos observado y denunciado oportunamente procesos irregulares de compra a través de licitaciones no publicadas y con pliegos a medida de ciertas empresas, como fue el caso de los camiones recolectores y también la compra directa de maquinaria, seguramente amparada en la autorización que el Concejo otorgó para uso excepcional en el marco de la Emergencia Pública sancionada en el año 2019, la que se viene prorrogando y hoy está vigente a pedido del propio Intendente, que además, está facultado a suspender aspectos de la emergencia a medida que se vayan superando”, remarcó el edil e hizo hincapié en que “un municipio que subejecuta su presupuesto y guarda cinco meses de masa salarial, no está en emergencia económica”.
FUNDAMENTOS DE LA INICIATIVA
Bolatti dio a conocer algunos de los fundamentos de la iniciativa presentada en el Concejo, que busca aportar a la transparencia en los procesos de compras del Municipio que, acogido por la Emergencia Económica sancionada en diciembre de 2019 en el marco de una fuerte caída de la recaudación y recepción de fondos participables, actualmente es utilizada para ladear los procesos de compra establecidos.
Señaló también, que «la emergencia fue sancionada ante situaciones de aspecto económico y financiero que resultaron de la caída de ingresos provenientes de la distribución nacional y provincial, que repercutieron y comprometieron el pago mensual de salarios de las y los trabajadores municipales; y tuvo como objetivo principal resolver esta demanda. Situación que se profundizó luego con el inicio de la pandemia, teniendo que atender los pagos esenciales con aportes de la Provincia, que a su vez recibía de Nación».
Asimismo, indicó que «finalizada la pandemia, si bien a nivel nacional se generó un escenario de promoción de la actividad económica, el contexto estaba acompañado por una creciente inflación causada por la restricción externa generada por el pago de servicios de la Deuda Externa; y los ingresos se incrementaron en términos nominales, permitiendo que en términos reales se mantengan medianamente en una etapa y que la distorsión no sea significativa en otra».
Así, Billatti marca que «durante la gestión 2019 – 2023, el crecimiento de ingresos dado por la inflación y la actividad económica reflejó un aceleramiento en los últimos 15 meses del mandato, generando un excedente que se acumulaba mes a mes, y que conceptualmente se podía ver porque el gasto principal del municipio, su partida personal, se había estancado en los últimos años, principalmente por no ser actualizado en relación a la inflación, quedando los mismos muy por debajo de la misma».
Bolatti detalló que a octubre del 2023, «el municipio contaba con una partida de más de 10 mil millones de pesos acumulados y sin destino establecido previamente; un monto equivalente al pago de cinco meses de sueldos de la estructura del personal y autoridades. Posteriormente, en diciembre, ya asumidas las nuevas autoridades de la Municipalidad y con un escenario favorable, aún cuando partieron de un saldo de Disponibilidades cercano a cero, la estructura de gastos ubicaba a la partida Personal por debajo del 50% de los ingresos, cuando cuatro años antes estaba en el 90%, lo que junto a la subejecución presupuestaria por inactividad, permitieron que a la fecha la gestión de Nikisch tenga disponible en caja e inversiones financieras alrededor de 15 mil millones de pesos, lo que equivale a cinco meses de salarios municipales».
En esa línea, marcó que «esta holgada situación convive con una importante cantidad de reclamos por pago de deudas de todo tipo, desde proveedores hasta judiciales – lo que se comenzó a regularizar – pero el proceso demandará tiempo y trabajo por su complejidad y cantidad, y que requiere la continuidad de la cobertura que significa la declaración de emergencia para la gestión».
Bolatti advirtió que «la actual gestión llevó adelante procesos irregulares de compras y contrataciones mediante licitaciones que fueron ‘observadas’ por falta de publicación y condiciones, y que sin justificación alguna, se acudió a la excepción que otorga el artículo 16 de la Ordenanza de Emergencia para la adquisición de maquinarias por altos montos, a través de compra directa obviando el proceso de licitación correspondiente».
Por lo expuesto, y ante la «inexistencia de un estado de emergencia económica y financiera en las arcas municipales, y porque es importante y necesario hacer de la transparencia en el manejo de recursos públicos, una realidad y no sólo un slogan de campaña», es que desde la concejalía de Fabricio Bolatti, promueven la derogación o suspensión del artículo 16 de la norma de «emergencia», con el objetivo de «recuperar la aplicación de la normativas que regulan la contratación y/o adquisición de bienes para el municipio y por el municipio».