El secretario general de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (Atsa) y delegado regional de la Confederación General del Trabajo (CGT) en el Chaco, Adrián Bellomi, mostró su preocupación por las cifras alarmantes del empleo informal en la Argentina, que alcanzan niveles históricos según datos del Indec.
En diálogo con LA VOZ DEL CHACO, advirtió sobre el impacto de las políticas del actual gobierno, encabezado por Javier Milei, tanto en el sector laboral como en los derechos de los jubilados y el sistema de salud.
Bellomi comenzó su intervención refiriéndose al informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el cual revela que el empleo en negro ha crecido de manera preocupante.
Según el informe, el trabajo informal en la Argentina aumentó un 56% en los últimos meses, lo que implica que por cada trabajador formal, se generan 1,5 empleos en negro. Ante este escenario, el dirigente sindical señaló:
«Esto es lo que advertíamos desde un principio. Cuando Milei llegó al gobierno, sabíamos que se iban a implementar políticas que ya hemos visto en gobiernos anteriores, aunque ahora con mayor agresividad.
Estas políticas no favorecen a los trabajadores; al contrario, están destinadas a precarizar aún más el empleo. El crecimiento del trabajo en negro es un reflejo claro de lo que sucede cuando se eliminan herramientas que protegen a los empleados, como las multas por falta de registración laboral.
El resultado es que, al no haber consecuencias para quienes no registran a sus empleados, se promueve la informalidad», explicó Bellomi.
El líder sindical también destacó que la falta de medidas efectivas para regular el empleo formal, junto con la eliminación de sanciones para empleadores que no registran a sus trabajadores, ha facilitado este incremento en la precarización laboral.
Asimismo, para Bellomi la situación no solo empeorará si el gobierno actual continúa impulsando reformas, sino que tendrá un impacto aún mayor en sectores vulnerables, como los jóvenes y las mujeres, quienes ya enfrentan dificultades para acceder a empleos de calidad.
El aumento de la jornada laboral: un retroceso
Otro de los temas que preocupa a Bellomi es el proyecto de ley impulsado por el Gobierno de aumentar la jornada laboral a 12 horas.
El dirigente se mostró alarmado por lo que considera un retroceso en los derechos laborales: «Hace un año estábamos discutiendo la reducción de la jornada laboral para equipararla con los países más avanzados, donde se trabaja menos horas que en la Argentina.
Ahora, con este gobierno, se busca lo contrario: ampliar la jornada laboral a 12 horas diarias. Es un retroceso que no favorece a los trabajadores, sino que solo beneficia a los empresarios».
La situación de
los jubilados: una variable de ajuste
Bellomi también fue contundente al referirse a las recientes decisiones del Gobierno en torno a los jubilados, especialmente en relación al veto presidencial a la Ley de Movilidad Jubilatoria. Según el dirigente, este veto es una muestra más de cómo los jubilados se han convertido en una «variable de ajuste» para alcanzar el equilibrio fiscal:
«Desde el inicio de este gobierno, los jubilados han sido los más perjudicados. Para lograr el déficit cero, les metieron la mano en el bolsillo. Con este veto, las cosas empeoran aún más: les están quitando la posibilidad de una recomposición salarial y hasta les han retirado beneficios esenciales como la medicación gratuita», afirmó.
El dirigente aseguró que, sin los ingresos necesarios ni acceso a la medicación, los jubilados no tienen futuro. «Un jubilado que no puede cubrir sus necesidades básicas está destinado a una muerte prematura. Esta política parece estar diseñada para eliminar a los jubilados del sistema. Les quitan todo lo que necesitan para vivir dignamente», denunció.
El sistema de
salud en riesgo
Por otra parte, el secretario general de Atsa también alertó sobre los peligros que enfrenta el sistema de salud privado en la Argentina, financiado en gran parte por las obras sociales, que dependen de los aportes de los asalariados.
Además explicó que con salarios bajos, los aportes son insuficientes para sostener el sistema de salud, el cual está fuertemente dolarizado: «Las obras sociales financian el sistema de salud privado, pero con salarios tan bajos, los aportes no alcanzan para cubrir los costos que están en dólares.
La situación es insostenible. Además, muchos médicos quieren cobrar honorarios a valor dólar o euro, mientras que los ingresos de las obras sociales son en pesos.
Esto, sumado a la desregulación que impulsa el gobierno, pone en riesgo la continuidad del sistema de salud privado».
Limitación a la información: un gobierno opaco
Finalmente, Bellomi criticó duramente el decreto de Javier Milei que limita el acceso a la información pública, una medida que, según el sindicalista, va en contra de las promesas de transparencia que había hecho el Gobierno:
«Prometieron ser un gobierno transparente, de cuentas claras, pero lo primero que hacen es limitar el acceso a la información. ¿Qué están escondiendo? Hace unas semanas se llevaron millones de dólares en oro del país y nadie dijo nada. Mientras tanto, los medios se enfocaban en distracciones menores.
Esta estrategia de esconder la información tiene un objetivo claro: saquear los recursos del país sin que la gente lo note», concluyó Bellomi.