Un grupo de gobernadores se reunió ayer en la Casa Rosada con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, para expresar su preocupación por la caída de la coparticipación federal y la paralización de la obra pública.
El encuentro, postergado previamente, se centró en reclamos por fondos vinculados al impuesto a los combustibles y en propuestas para recomponer el flujo de recursos hacia las provincias.
La comitiva provincial estuvo integrada por mandatarios de distintos signos políticos: Ignacio Torres (Chubut, PRO), Claudio Vidal (Santa Cruz, PJ), Raúl Jalil (Catamarca, PJ dialoguista), Sergio Ziliotto (La Pampa, PJ) y la vicegobernadora de Córdoba, Myrian Prunotto (UCR). Por parte del gobierno nacional, además de Francos, participaron Lisandro Catalán y el secretario de Hacienda, Carlos Guberman.
Uno de los puntos salientes del encuentro fue el reclamo por la subejecución de los fondos provenientes del impuesto a los combustibles.
Según denunciaron, el gobierno nacional ejecutó menos del 50% del 28,5% del tributo destinado al fideicomiso de infraestructura vial. «Exigimos al gobierno nacional que esos fondos vuelvan a las provincias en forma de obras concretas», sostuvo Claudio Vidal.
El planteo fue compartido por todos los representantes provinciales. «Los recursos coparticipables son esenciales para el funcionamiento de nuestras provincias. Reclamamos alternativas urgentes para revertir esta situación, entre ellas, una distribución equitativa de los ATN», expresó Vidal, aludiendo a los Aportes del Tesoro Nacional.
EL PEDIDO POR UNA DISTRIBUCIÓN MÁS JUSTA DE LOS RECURSOS
Sergio Ziliotto explicó que la situación financiera provincial se ha agravado no solo por la caída de la coparticipación, sino también por la creciente responsabilidad en áreas como salud, seguridad, justicia y contención social. «Presentamos una propuesta para recuperar recursos sin afectar las finanzas nacionales», explicó.
El gobernador pampeano agregó: «Se trata de recursos con afectación específica que son administrados por el gobierno nacional, pero que pertenecen a las provincias o financian funciones que han quedado bajo su responsabilidad».
En tono similar, Raúl Jalil y Myrian Prunotto remarcaron que la situación crítica amerita respuestas rápidas y consensuadas. En voz baja, algunos representantes expresaron su escepticismo respecto de la respuesta nacional.
«Ojalá que nos den algo, para que no sean más de lo mismo», deslizó un funcionario provincial. «Ya llevamos gastado más en pasajes de lo que recibimos en todo el año», ironizó.
A pesar del tono respetuoso de la reunión, el malestar fue evidente. En un contexto de ajuste fiscal, los gobernadores dejaron en claro que no están dispuestos a absorber sin compensaciones nuevas funciones estatales ni recortes presupuestarios.
EL ROL DE GUILLERMO FRANCOS Y LA POSTURA DE NACIÓN
Guillermo Francos, principal interlocutor del Gobierno con las provincias, escuchó los planteos y se comprometió a analizarlos. Pidió tiempo para revisar internamente las demandas, lo que sugiere que podría haber una contraoferta en los próximos días.
La Casa Rosada consideró razonables algunos de los pedidos, aunque dejó en suspenso definiciones concretas. Está previsto que los gobernadores se reúnan nuevamente en diez días, esta vez en el Consejo Federal de Inversiones (CFI), para evaluar los avances o posibles respuestas.
Asimismo, Francos también introdujo en la reunión un tema de fuerte contenido político: la situación derivada del reciente fallo contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Según fuentes oficiales, planteó que esta coyuntura podría generar inestabilidad institucional y social.
El gobierno nacional intentó postergar la reunión por la ausencia del secretario de Hacienda, Carlos Guberman, quien regresó esta semana al país.
Finalmente, el encuentro se concretó tras días de negociación y en medio de un contexto nacional marcado por tensiones judiciales y económicas.
Fondos del Impuesto
a los Combustibles
La discusión sobre el impuesto a los combustibles no es nueva. Ya en 2024 varios mandatarios habían reclamado la correcta asignación de ese tributo.
Rogelio Frigerio (Entre Ríos) había señalado que «el impuesto a los combustibles tiene una asignación específica, que es ir a financiar el subsidio al transporte público de pasajeros». Y cuestionó: «El Gobierno decidió que ese beneficio tenía que ser una responsabilidad de las provincias. Bienvenido sea, pero no te quedés con el impuesto entonces».
En línea similar, el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, había reclamado que «tan solo el 10,4% viene a las provincias. El resto va a Nación. Si no se van a pagar las cajas jubilatorias y el 35% del Impuesto al Combustible va para Nación, pedimos que se convierta en masa coparticipable, como pasa con el impuesto al cheque».
Estas quejas se reactivaron con fuerza en la última reunión, donde los gobernadores pidieron transparencia en el uso de esos fondos y exigieron que se reinviertan en infraestructura vial y transporte en sus territorios.
La falta de ejecución del fideicomiso vial se traduce, según los mandatarios, en rutas sin mantenimiento, obras frenadas y pérdida de empleo en sectores vinculados a la construcción pública.
Baja de ingresos y ajuste fiscal
Durante el encuentro, circuló un informe de la Comisión Federal de Impuestos que alerta sobre una caída proyectada del 4,2% en las transferencias automáticas durante 2025, lo que representa \$2.5 billones menos que el año anterior. En comparación con 2023, la merma asciende al 12%, equivalente a casi \$7.4 billones.
Este descenso representa una pérdida cercana al 1% del Producto Bruto Interno y afecta de manera directa a los presupuestos provinciales, que en 2024 recibieron por esta vía el 45% de sus ingresos totales, llegando a superar el 60% en algunas jurisdicciones.
Un estudio reciente de la consultora Analytica confirmó que la coparticipación federal disminuyó un 23,4% interanual en mayo, atribuida principalmente a una base de comparación alta generada por el incremento en Ganancias tras la devaluación de diciembre de 2023.
A pesar de esta caída, entre abril y mayo se observó un incremento del 25% mensual en la coparticipación, por el vencimiento del Impuesto a las Ganancias para empresas con cierre en diciembre.
Sin embargo, el panorama sigue siendo de contracción en términos reales.
Los tributos que más aportaron a la masa coparticipable fueron Ganancias (53,2%) e IVA (43,3%).
No obstante, ambos sufrieron reducciones reales: el IVA cayó 1,1% interanual y Ganancias se desplomó 39,9%, debido al efecto estadístico mencionado.
Transferencias no automáticas
En paralelo, las transferencias no automáticas subieron un 203,7% interanual entre enero y mayo, medidas en pesos constantes. Sin embargo, su distribución fue desigual, beneficiando más a algunas provincias.
Santa Cruz y Neuquén fueron las jurisdicciones con mayor recepción per cápita de fondos no automáticos: \$47.473 y \$36.589 respectivamente.
En términos absolutos, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba) concentró el 63,1% de estas transferencias, seguida por la provincia de Buenos Aires con el 18,3%.
Este esquema de distribución fue cuestionado por varios mandatarios, que pidieron criterios más equitativos y previsibles.
La falta de reglas claras, sostienen, acentúa las desigualdades y expone a las provincias a la discrecionalidad del gobierno nacional.