La presidenta del Colegio de Odontólogos del Chaco, doctora Karina Poliovka, manifestó su preocupación por el impacto que podría tener en la provincia el proyecto de ley nacional que propone la desregulación de profesiones universitarias y no universitarias.
El texto, presentado en la Cámara Baja del Congreso, busca eliminar la obligatoriedad de colegiación y propone una matrícula nacional para ejercer en todo el país, lo que, según Poliovka, amenaza con romper el control profesional que garantiza la calidad de atención y la legalidad del ejercicio.
“Lo que se está planteando a nivel nacional es que la colegiación no sea obligatoria y que la matrícula sea una sola, a nivel nacional», explicó en contacto con Radio Natagalá . Sin embargo, advirtió que «acá no tenemos hospitales nacionales; todos son provinciales, y para ejercer en la provincia es obligatorio matricularse en el Colegio de Odontólogos del Chaco, como lo indica la ley».
La dirigente formó parte de la conferencia organizada por la Federación de Profesionales Universitarios del Chaco que alertó sobre las implicancias del proyecto. «Esto afecta directamente la legalidad del ejercicio profesional y la protección de los pacientes», afirmó.
Poliovka, como presidenta del Colegio de Odontólogos del Chaco, dejó en claro que la colegiación obligatoria no es un mero trámite burocrático, sino una herramienta fundamental para proteger a los pacientes, garantizar estándares éticos y asegurar que quien ejerce la odontología esté debidamente formado y habilitado.“La propuesta de eliminar la colegiación es peligrosa. Puede abrir la puerta a la desprotección de los pacientes y al ejercicio ilegal. Nosotros, como colegio, estamos para cuidar la salud pública”, advirtió.
Una garantía sanitaria
Poliovka remarcó que el sistema actual de matriculación provincial, regulado por ley, permite que el Colegio controle la habilitación profesional, garantice condiciones éticas y técnicas de atención y actúe ante denuncias o irregularidades.
«El odontólogo que quiere trabajar en cualquier localidad del Chaco debe dirigirse a nuestra sede en Resistencia, presentar la documentación requerida y abonar la matrícula, cuyo valor está regulado por ley», señaló. Agregó que además se paga una cuota societaria mensual equivalente a una consulta de INSSSEP, actualmente cercana a los 8.600 pesos.
Además, subrayó que todo profesional debe contar con un seguro de mala praxis para poder ejercer. «No se puede trabajar sin cobertura», enfatizó.
El rol del colegio
Una de las tareas clave del Colegio de Odontólogos es intervenir ante el ejercicio ilegal de la profesión, una problemática que persiste, sobre todo en el interior de la provincia. Poliovka denunció que existen técnicos dentales que ofrecen servicios odontológicos sin estar habilitados para hacerlo.
«Hay varias denuncias judicializadas. El paciente muchas veces desconoce que los mecánicos dentales no están habilitados para tomar moldes ni trabajar directamente en la boca. Solo pueden elaborar prótesis sobre modelos enviados por un odontólogo», explicó.
Este tipo de prácticas configuran un delito penado por ley. «Necesitamos que los pacientes denuncien para que podamos actuar. Todo se canaliza a través de Fiscalización Sanitaria y, si corresponde, se eleva a la justicia», afirmó.
Impacto económico
El Colegio también enfrenta dificultades con la principal obra social de la provincia, INSSSEP. «Representa el 80% de la facturación de los odontólogos del Chaco», detalló Poliovka. Sin embargo, los pagos se vienen realizando con demoras y en cuotas, lo que complica la sostenibilidad de la atención. «Aunque tenemos un convenio que establece el pago el día 10 de cada mes, últimamente se ha pagado en partes y con demoras de hasta 48 horas. Y los aranceles están desactualizados», denunció. «Tuvimos aumentos del 3,2% en abril y mayo, pero veníamos desde septiembre del año pasado sin actualizaciones, mientras los costos aumentaban constantemente».
Los aranceles se negocian a partir de estudios realizados junto a la Facultad de Ciencias Económicas, que determinan los honorarios mínimos éticos. «Nuestros insumos están dolarizados, como los guantes o los materiales de ortodoncia. La odontología es una profesión costosa y muchas veces se desconoce eso», explicó.
el control colegiado
El Colegio cuenta con una Comisión de Ética y un Tribunal de Disciplina que actúan ante conflictos entre profesionales o entre pacientes y odontólogos. «Se pueden aplicar sanciones, pero siempre garantizando el derecho a defensa y con pruebas», aseguró.
También forma parte de la Federación Argentina de Colegios de Odontólogos (FACO), cuyo objetivo es unificar criterios éticos y arancelarios a nivel nacional. La chaqueña Alicia Solís preside actualmente la entidad. «FACO es clave en esta discusión. No podemos permitir que se desregule la matrícula porque perderíamos capacidad de control. El ejercicio ilegal no es un problema exclusivo del Chaco, lo padecen otras provincias también», afirmó.
Una profesión expuesta
Poliovka también se refirió a otros desafíos que enfrenta la profesión, como la violencia hacia el personal de salud. «Tuvimos un caso en salud pública en el que una odontóloga fue agredida por una paciente en una sala de espera», relató. El hecho fue denunciado gracias a que las cámaras de seguridad captaron la agresión.
Por otra parte, la crisis económica impacta directamente en los consultorios privados. «Los incrementos de tarifas como la luz comercial nos golpearon fuerte. Muchos colegas deben cubrir gastos crecientes con ingresos cada vez más bajos», explicó.
prevención y salud pública
Poliovka aprovechó para remarcar la importancia del cuidado bucal. «Cepillarse los dientes después de cada comida es fundamental. La prevención siempre es más barata que un tratamiento. A los chicos hay que enseñarles desde temprano», expresó.
También destacó los avances en ortodoncia y tratamientos menos invasivos como las placas de relajación para tratar el bruxismo, un problema cada vez más común debido al estrés.