Las ventas en supermercados del Chaco mostraron en abril de 2025 un rebote importante, con un crecimiento del 14,6% interanual a precios constantes.
Sin embargo, este incremento se da sobre una base estadística históricamente baja: abril de 2024 fue el peor mes registrado en la serie para la provincia, según un informe de Politikon Chaco en base a los datos del Indec.
Así, a pesar del crecimiento porcentual, el desempeño de este año sigue siendo el segundo más bajo de los últimos nueve abriles, solo superando al del año pasado.
A nivel nacional, el panorama fue similar: las ventas en grandes cadenas de supermercados alcanzaron $1.98 billones, con una suba real del 8,9% interanual, el mayor incremento desde marzo de 2020. Sin embargo, al igual que en el Chaco, esta mejora se sustenta más en la baja base comparativa que en una recuperación genuina del consumo.
empujaron las ventas
Durante abril, diez de los once rubros relevados por la Encuesta de Supermercados del Indec registraron aumentos en la provincia. El mayor salto se observó en Alimentos preparados y rotisería, que trepó un 73,4% respecto al mismo mes del año anterior.
Le siguieron Indumentaria (67,0%) y Carnes (33,9%), junto a Panadería (22,8%) y Bebidas (17,3%).
No obstante, estos cinco segmentos representan apenas el 30% de la facturación total mensual.
Por su parte, otros rubros con peso significativo en el consumo chaqueño también mostraron subas, aunque más moderadas: Verduras y Frutas (+14,2%), Lácteos (+11,1%), Otros productos (+10,7%) y Almacén (+10,4%).
En conjunto, estos cuatro rubros explican más de la mitad de las ventas.
El único segmento con una caída fue el de Electrónicos y artículos del hogar, con un retroceso del 8,8%, aunque su participación en la facturación total es marginal (3%).
Otro dato a destacar es el bajo desempeño de Artículos de limpieza y perfumería, que apenas subió un 7,7% y representa el 16% del total.
¿Reactivación
real o estadístico?
El informe de la consultora Politikon Chaco advierte que el crecimiento interanual debe leerse con cautela, dado que se compara con un abril 2024 extremadamente deprimido. En ese mes, las ventas en supermercados habían registrado la mayor caída histórica, producto del contexto de crisis económica y pérdida de poder adquisitivo.
En este sentido, al comparar los datos de abril 2025 con los de abril 2023, se observan caídas reales en todos los rubros y en el total provincial, lo que refuerza la idea de que la recuperación actual no se apoya en una mejora del consumo sostenida ni en un incremento real del poder adquisitivo.
cuatrimestre con
señales mixtas
En el acumulado de los primeros cuatro meses del año, el Chaco muestra un crecimiento real del 3,3% en las ventas de supermercados. Sin embargo, el análisis desagregado por rubros revela una recuperación poco sólida.
El rubro Almacén, el más importante en términos de participación (28% del total), exhibe una caída del 5,3%. También baja el segundo rubro en importancia, Artículos de limpieza y perfumería, con un retroceso del 4,5%.
En contraste, los rubros que traccionaron el crecimiento acumulado fueron Alimentos preparados y rotisería (+67,0%) e Indumentaria (+40,5%), considerados no esenciales.
Esto sugiere que el consumo durante este período estuvo más asociado a compras puntuales, promocionales o vinculadas a eventos específicos, más que a una mejora estructural en el poder de compra de los hogares chaqueños.
Una demanda
todavía debilitada
En suma, el informe concluye que, si bien el aumento interanual de abril puede parecer alentador a primera vista, la comparación con un piso tan bajo como el de 2024 no permite hablar de una reactivación sólida del consumo.
La mejora en algunos rubros específicos no alcanza a compensar el retroceso en los sectores más sensibles, como el de alimentos de primera necesidad y productos de limpieza.
En consecuencia, el mercado interno chaqueño continúa mostrando señales de debilidad estructural, y la recuperación del volumen de ventas sigue dependiendo de factores externos, promociones u ofertas puntuales, más que de un crecimiento sostenido en el ingreso disponible de las familias.