Hoy es una de las festividades populares más arraigadas en la región: San Juan Bautista. Es por esto que, en Resistencia, en el homónimo barrio Villa San Juan, se podrá vivir una jornada que combina fe, religión y expresiones populares como música, gastronomía y ritos ancestrales.
La Octava Edición del Festival de San Juan, organizado por Canta Hermano Producciónes, con el acompañamiento de la Municipalidad, tendrá lugar en Ángel Busto (calle 9) N° 155, con una variada grilla artística y comunitaria para mantener vivas las tradiciones ancestrales.
feria artesanal
y música
Las actividades iniciarán a las 16, con la apertura del paseo de emprendedores y artesanos locales, que brindarán al predio colorido, sabor y creatividad a través de productos únicos, representando el trabajo del sector independiente de la ciudad.
A las 20 se realizará la bendición del evento y de los troncos de la fogata, dando inicio oficial al festival musical, que incluirá presentaciones de la Banda de Música de la Policía del Chaco, el Servicio Penitenciario, la Orquesta Municipal de Música Popular, y la participación especial de las escuelas municipales de danza “Huellas Argentinas” (folclore) y Danzas Clásicas e Internacionales.
También dirán presente artistas del canto como Marcelo Córdoba, Custodio Bustamante, Nicolás Gómez y sus Chaques del Chamamé, Las Mellis Trangoni, y el humorista Freddy Sánchez, entre otros destacados talentos locales.
Durante el acto, además, se realizará un reconocimiento al Vecino Destacado 2025, que este año será para el periodista y conductor del noticiero central de Canal 9 Resistencia, Marcos Mecina.
Ritual de
fe y fuego
A las 23:45 horas comenzarán los preparativos para el tradicional cruce descalzo por las brasas, un ritual cargado de simbolismo en honor a San Juan Bautista, donde los asistentes que así lo deseen podrán demostrar su fe, fortaleza y devoción.
El cruce de brasas se iniciará puntualmente a las 00:00 horas del martes 24, seguido por uno de los momentos más esperados: la Quema del Muñeco, prevista para las 00:40 . Esta práctica representa la incineración simbólica de los siete pecados capitales, como un acto de purificación espiritual que invita a la renovación interior.
comunidad
y tradición
Durante toda la jornada se ofrecerá servicio gastronómico con atención esmerada y precios accesibles, para disfrutar de sabores regionales en un ambiente de encuentro familiar.
Desde la organización agradecieron especialmente el respaldo de la Municipalidad de Resistencia, que hace posible la realización de esta fiesta popular.
Para más información, se puede contactar al teléfono 362 4207404 o al correo electrónico [email protected].
Sobre la festividad
de San Juan
La festividad de San Juan Bautista se vive en la Argentina con una mezcla de fervor religioso, identidad popular y costumbres ancestrales que confluyen cada 23 y 24 de junio.
A través del país, se honra al santo precursor de Jesús en una jornada que rememora su nacimiento, pero que al mismo tiempo celebra el solsticio de invierno con rituales vinculados a la purificación y la renovación.
Los pueblos del Nordeste argentino, especialmente en Formosa, Corrientes, Misiones y Chaco, han preservado tradiciones que mezclan lo religioso y lo comunitario. Al caer la noche, se suelen encender grandes fogatas en plazas, veredas y campos, donde las familias se reúnen para compartir comidas preparadas al fuego, música y juegos.
Los rituales del fuego adquieren múltiples significados. Las fogatas, llamadas “fogaratas” en algunos parajes, se encienden para ahuyentar la oscuridad y limpiar las cargas acumuladas del alma. En ese marco, el cruce de brasas —o “tatá yehasá”—en guaraní, es una muestra de fe que ha perdurado pese al paso del tiempo
A menudo, se suman prácticas como la quema de papeles con deseos, la destrucción de muñecos que representan lo negativo, o el salto sobre el fuego, tres o más veces, como gesto de protección.
En la región del NEA, sobreviven juegos como la “pelota tata” (una pelota encendida que se lanza entre los asistentes), el “toro candil” (personaje con cuernos de fuego que persigue a la gente), o el “kambuchí jejoká” (romper cántaros con los ojos vendados).
El agua también tiene su protagonismo. Bañarse en ríos o simplemente mojarse el rostro a medianoche se interpreta como gesto de sanación y buena fortuna. En contextos urbanos, muchos optan por dejar un recipiente con agua al sereno para lavarse la cara al día siguiente o preparar un baño con sal gruesa y hierbas como romero, laurel o ruda.
Además del desprendimiento de lo viejo, la Noche de San Juan es ideal para sembrar nuevas intenciones. Escribir deseos, encender una vela blanca, guardar hojas de laurel bajo la almohada o colocar un saquito de arroz y canela en la cartera son pequeños rituales de manifestación que alimentan la esperanza.
De esta forma se unen rituales religiosos y paganos; las parroquias combinan procesiones, caravana con antorchas y kermés comunitarias-
A esto se suman expresiones culturales como peñas folklóricas, músicas regionales —chamamé o danzas criollas— y competencias gauchescas.
La festividad de San Juan Bautista en Argentina se adapta a cada rincón del país, preservando sus raíces y renovando los lazos sociales cada invierno.
En definitiva, San Juan invita a reconectar con lo esencial: con la comunidad, con los ciclos de la naturaleza y con uno mismo. La luz del fuego, la música compartida y los gestos simbólicos hacen de esta fecha un momento único para renovar el espíritu y abrazar lo nuevo con conciencia y propósito.