El Museo de Arte Contemporáneo de Corrientes (Macc) se emplaza en la emblemática esquina de las calles 9 de Julio y La Rioja, en el corazón histórico de la ciudad. Ocupa un edificio que hacia 1900 albergó al Banco de la Provincia de Corrientes y cuya arquitectura original responde a líneas italianas, con una estructura mixta de mampostería e hierro.
«Con alegría fui testigo del desarme de la grúa pluma, que ayudó a construir el contenedor de la colección del Ñande MAC, anunciando la terminación parcial del mismo. El gobernador Gustavo Valdés dio a conocer que el museo se inaugurará parcialmente en julio de 2025, y la gran inauguración será en 2026. Cada vez más cerca. ¡Felicitaciones a todos!», expresó el artista visual Luis Niveiro.
La remodelación, que en sus primeras etapas preveía una demolición parcial, viró hacia la conservación patrimonial tras descubrirse techos abovedados de ladrillo y una perfilería metálica centenaria de alto valor histórico.
La decisión de preservar estas estructuras motivó un rediseño integral. Se desarrolló una nueva estrategia de intervención que incorporó una estructura independiente en los niveles superiores y dejó expuestas las huellas del pasado, generando un lenguaje visual donde conviven lo antiguo y lo contemporáneo.
Esta resolución estética derivó en un edificio de estilo industrial, donde las paredes originales sin revoque adquieren el carácter de una obra en sí mismas.
La perfilería recuperada fue reutilizada en otras obras de la ciudad, como bancos urbanos en la Plaza Libertad y la barra del restaurante del museo. Estas decisiones responden a criterios de sustentabilidad y reutilización de materiales, bajo una mirada que prioriza la memoria constructiva.
A esta base histórica se le agregó un curtain wall sobresaliente que actúa como signo de modernidad y vinculación con el presente.
DISEÑO FUNCIONAL
Y PROYECCIÓN CULTURAL
El Macc cuenta con 4.200 metros cuadrados distribuidos en cinco niveles, tres de ellos de nueva construcción sobre las losas originales. Unos 1.300 metros cuadrados fueron destinados a salas de exhibición, con alturas de hasta cinco metros, lo que permite albergar tanto obras permanentes como muestras itinerantes de gran escala. El diseño tomó como modelo de referencia al Museo Malba de Buenos Aires, tanto en su funcionalidad como en la disposición de sus espacios.
La planta baja del edificio se abre a la Plaza Vera e integra dos locales gastronómicos: un bar con expansión al espacio público y un restaurante ubicado en el cuarto piso. Desde el acceso principal sobre la calle 9 de Julio, se ingresa a un espacio de triple altura que alberga una escalera escultórica y un balcón interno, concebido como núcleo articulador para exposiciones, encuentros y actividades performáticas.
Los niveles superiores contemplan una versatilidad de usos que van desde la contemplación artística hasta la interacción social. La incorporación de un montacargas de gran porte, con ingreso directo desde el pasaje Agustín González, garantiza la manipulación segura de obras de gran formato. Además, se sumaron dos ascensores que aseguran accesibilidad plena en todo el recorrido.
TECNOLOGÍA, SOSTENIBILIDAD Y VALOR URBANO
La dimensión tecnológica fue clave en la reconfiguración del museo. Se prevé incorporar un sistema de supresión de incendios mediante gas FM200, que protege las obras sin utilizar agua, además de un sistema integral de detección con sensores ópticos, térmicos y de humo. Estos mecanismos se gestionan a través de un Building Management System (BMS) que regula temperatura, humedad y otros parámetros críticos para la conservación del patrimonio artístico.
El proyecto busca obtener la certificación Leed (Leadership in Energy and Environmental Design), uno de los estándares internacionales más exigentes en arquitectura sustentable. En esta línea, se reacondicionaron las ventanas originales con doble vidriado hermético (DVH) para mejorar la eficiencia térmica y acústica. Las columnas metálicas fueron tratadas con pintura intumescente, prolongando su resistencia al fuego.
En lo estructural, se agregó un núcleo central de hormigón para escaleras y ascensores, perfectamente integrado con la lógica compositiva del edificio original.
Los materiales elegidos, como mármoles travertinos y terminaciones afines a los 50, consolidan una identidad estética que respeta la herencia sin resignar contemporaneidad.
Inserción urbana y valorización del entorno
El nuevo Macc no solo se posiciona como un espacio de resguardo y proyección del arte contemporáneo, sino también como un hito urbano destinado a revitalizar el tejido histórico de Corrientes. Su ubicación estratégica y su apertura al espacio público consolidan una relación directa con la ciudad y su comunidad.
Su inserción refuerza la articulación con instituciones centenarias como el Teatro Vera y otros museos del centro correntino, todos construidos a comienzos del siglo XX. Esta confluencia de arquitectura patrimonial y diseño contemporáneo dinamiza la escena cultural local, promoviendo la circulación de nuevos públicos y el desarrollo de actividades que trascienden lo museístico.
El proyecto, impulsado por el gobierno de la provincia y estimulado por la Asociación de Amigos del museo Ñande MAC, presidida por el artista Luis Niveiro, es resultado de una visión de Estado que entiende la cultura como política pública.
El museo no solo albergará arte, sino que generará ciudadanía, conocimiento y pertenencia.
Ñande MAC
El Museo de Arte Contemporáneo de Corrientes (Macc) integra por ley y decreto reglamentario el Instituto de Cultura de Corrientes dependiente del Gobierno de Corrientes desde 2019, creado sobre las bases forjadas por un formidable esfuerzo por el arte y la cultura de Corrientes y del norte argentino encabezado por el maestro en artes visuales, curador y coleccionista, Luis Niveiro, con cuyo acervo personal, a través de la Colección Luis Niveiro, se ha dado vida a su acervo fundacional a fines de 2017.
El Macc nació institucionalmente el 5 de diciembre de 2019 por decreto 3583 del gobernador Gustavo Valdés, con el cual el Poder Ejecutivo de Corrientes selló su origen dentro de la estructura orgánica del Instituto de Cultura de Corrientes.
El Museo de Arte Contemporáneo de Corrientes, concebido a través del proyecto Ñande MAC, fue presentado oficialmente por el maestro Luis Niveiro, junto al Instituto de Cultura de Corrientes a fines de 2017 con un singular acervo constituido en torno a un generosísimo aporte de obras de grandes maestros de artes visuales argentinos, americanos y europeos, algunas de las cuales ya han sido donadas al Estado de Corrientes, y desde entonces, continúa creciendo.
Hoy, luego de haber recorrido como propuesta abierta desde el afecto al desarrollo federal del arte y de la cultura en el nordeste argentino, con el aporte de numerosísimos grandes maestros en artes contemporáneas radicados en toda América, Europa, Asia, y el norte de África, y vínculos sólidos con instituciones dedicadas al arte y a la cultura en Argentina y en el exterior del país, el acervo fundacional del Museo de Arte Contemporáneo de Corrientes Ñande MAC reúne más de 500 obras de todas las disciplinas del arte.