El gobernador Leandro Zdero fue uno de los tres mandatarios provinciales presentes en la inauguración, convocada por el ministro del Interior, Lisandro Catalán.
La reunión se realizó en un contexto marcado por la derrota electoral de La Libertad Avanza en Buenos Aires, un escenario que refuerza la necesidad de consolidar vínculos institucionales y garantizar la ejecución de políticas coordinadas.
Zdero llegó temprano y aprovechó la oportunidad para reunirse con Eduardo Lule Menem, un encuentro que generó comentarios dentro del oficialismo y que permitió al mandatario chaqueño participar directamente de la agenda nacional junto a funcionarios de Nación. Esta actividad refuerza la posición de Chaco dentro de la estrategia de articulación territorial que promueve el Ejecutivo.
La Mesa Federal fue organizada por el gobierno nacional como un espacio de diálogo con las provincias para coordinar políticas y recursos, y su primera convocatoria incluyó exclusivamente a gobernadores aliados con acuerdos electorales de La Libertad Avanza.
Los otros mandatarios presentes fueron Alfredo Cornejo (Mendoza) y Rogelio Frigerio (Entre Ríos), mientras que la reunión contó además con la participación de Luis Caputo, ministro de Economía; y Guillermo Francos, jefe de Gabinete, responsables de la coordinación de los temas provinciales.
La convocatoria se llevó adelante en un momento de crisis política, luego de la derrota de LLA en Buenos Aires, donde el peronismo los superó por casi 15 puntos, situación que obligó al Gobierno a priorizar la atención a gobernadores que podrían garantizar una comunicación fluida y efectiva entre Nación y provincias.
DIÁLOGO CON NACIÓN: RECLAMOS Y PETICIONES
El primer pedido de los gobernadores fue que el Ejecutivo no vetara la ley de Aportes del Tesoro Nacional (ATN), aprobada por los 24 distritos y por amplia mayoría en el Congreso.
Frente a este planteo, la Casa Rosada confirmó que el presidente Javier Milei vetará la normativa, al igual que lo ha hecho anteriormente con leyes de financiamiento universitario y la emergencia pediátrica.
En este marco, los mandatarios solicitaron un diálogo directo con Milei, dejando de lado intermediarios que carezcan de poder de decisión. «No importa que cambien los nombres, si no tiene poder de decisión, no nos sirve», manifestaron en forma conjunta diversas administraciones provinciales, subrayando la necesidad de interlocutores con capacidad real de decisión.
Lisandro Catalán se comprometió a mantener un diálogo directo con los gobernadores, con el propósito de establecer un canal formal de coordinación que asegure la implementación efectiva de políticas nacionales en las provincias.
En paralelo, Caputo fue señalado como interlocutor relevante para destrabar créditos y pagos pendientes, incluidos proyectos de infraestructura y financiamiento internacional, tareas que resultan críticas para garantizar la continuidad de obras en diversos distritos.
Los gobernadores enfatizaron que es necesario cumplir los compromisos asumidos previamente antes de avanzar en nuevas negociaciones, estableciendo un equilibrio entre la voluntad política y la capacidad de ejecución por parte de Nación.
Alianzas electorales
y presencia provincial
Zdero y sus pares mantienen acuerdos electorales con La Libertad Avanza en sus provincias, situación que condicionó la convocatoria y determinó la presencia de ciertos mandatarios en la Mesa Federal.
En Buenos Aires, la derrota de LLA evidencia la necesidad de reforzar la coordinación territorial como mecanismo de contención y consolidación de la gestión nacional.
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba), Jorge Macri aceptó participar en el acuerdo electoral articulado por Mauricio Macri, aunque con reservas respecto de la relación con La Libertad Avanza. La convocatoria a gobernadores aliados permitió al Ejecutivo asegurar la presencia de líderes capaces de garantizar la comunicación efectiva entre Nación y provincias, consolidando así los canales de coordinación territorial.
El gobernador, al ser el primero en llegar, simbolizó la relevancia del Chaco dentro de esta estrategia de coordinación nacional.
No obstante, el encuentro con Menem generó comentarios internos, ya que algunos sectores del oficialismo cuestionaron la participación del dirigente en la Mesa Federal, reflejando las tensiones propias de la organización de la agenda política.
Reclamos concretos de las provincias
En el mismo encuentro, el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, destacó la necesidad de cumplir acuerdos previos, y advirtió: «Es muy difícil restablecer la confianza cuando alguien pone mucha buena voluntad, pero no tiene el poder para materializar lo que se plantea en las reuniones».
Aclaró, además: «Es muy difícil sentarnos nuevamente con el jefe de Gabinete o con el ministro del Interior si no están habilitados», subrayando la importancia de interlocutores con poder real de decisión.
Por su parte, el gobernador de San Juan, Marcelo Orrego, indicó que asistirá en caso de ser convocado formalmente. En sus declaraciones afirmó: «Deseo que al gobierno nacional le vaya bien, porque eso significa que a los argentinos y sanjuaninos nos vaya bien».
Asimismo, señaló que su participación tendría como objetivo «plantear, con firmeza y decisión, la importancia de construir y consolidar un modelo de país que potencie los sectores productivos, la inversión y el empleo privado en la provincia y en la Argentina».
En conjunto, los mandatarios presentes enfatizaron que la coordinación entre Nación y provincias requiere claridad en los criterios de distribución de fondos y el cumplimiento efectivo de los compromisos previamente asumidos, elementos considerados fundamentales para garantizar la continuidad de proyectos estratégicos y la estabilidad institucional.
Coordinación y funciones de la Mesa Federal
La Mesa Federal tiene como función principal coordinar la ejecución de obras públicas, el financiamiento de proyectos y la distribución de transferencias presupuestarias entre Nación y provincias. En este marco, Zdero actuará como referente provincial, asegurando que las prioridades del Chaco estén presentes en las decisiones nacionales y sirviendo como enlace confiable con la administración central.
El ministro Lisandro Catalán tendrá a su cargo la mediación entre las demandas provinciales y la línea de acción del presidente Milei, mientras que la participación de Luis Caputo y Guillermo Francos permitirá gestionar directamente cuestiones financieras y administrativas relevantes para los gobernadores.
Durante la jornada, los mandatarios coincidieron en la importancia de materializar acuerdos previos antes de avanzar en nuevas negociaciones, enfatizando que la Mesa Federal debe consolidarse como un mecanismo efectivo de cooperación, capaz de traducir los compromisos políticos en resultados concretos para los ciudadanos.
El Ejecutivo nacional deberá demostrar capacidad de decisión y continuidad en la gestión, de modo que la Mesa Federal funcione como un espacio efectivo de articulación entre Nación y provincias, garantizando que las políticas públicas se implementen de manera eficiente y que los compromisos asumidos se cumplan en los plazos establecidos.