En la décima jornada del juicio por jurados por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, declararon peritos y testigos ofrecidos por la defensa, aunque sus testimonios terminaron aportando datos que refuerzan los vínculos personales y de poder dentro del clan Sena.


La audiencia comenzó con la declaración de Anahí Marina Ginarte, antropóloga forense del Instituto de Medicina Forense de Córdoba e integrante del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF). La especialista participó en el estudio de los restos óseos hallados en Campo Rossi, y explicó que los fragmentos estaban en un estado total de calcinación, lo que impidió obtener ADN o determinar el sexo de la persona.
“No es fácil quemar un cuerpo y dejarlo en un estado de calcinación. Hay una intencionalidad de mantener ese estado”, afirmó Ginarte, quien agregó que para lograr una combustión de ese tipo “el cuerpo debe ser sometido al calor durante más de tres horas al aire libre”.









La hermana de Obregón confirmó el cambio de celular tras el crimen
Luego declaró Anabelia Obregón, hermana de Gustavo Obregón, imputado por encubrimiento agravado, quien relató que su hermano se desempeñaba como chofer de César Sena desde su niñez y que también era “mano derecha” de Emerenciano Sena.
La testigo aportó fotografías y recordó que Marcela Acuña y Emerenciano Sena son padrinos de bautismo del hijo menor de su hermano y su cuñada, Fabiana González.
Durante su declaración, reveló que el 5 de junio, pocos días después del crimen, su hermano le pidió a su madre que le comprara un nuevo teléfono celular porque “se le había roto la pantalla”.

“Después me llamó y me pidió que lo entregue a la Policía, porque lo necesitaban para la investigación”, explicó.

“Fabiana era una empleada de absoluta confianza”
Anabelia también definió la relación entre Fabiana González y Marcela Acuña como “de extrema confianza”, y precisó que González tenía las llaves de la casa de Santa María de Oro, lugar donde fue vista por última vez Cecilia Strzyzowski.
Otra testigo, identificada como R. L., contó que trabajó como profesora de costura en el exbarrio Emerenciano y que las órdenes dentro del movimiento “bajaban de Marcela Acuña a través de Fabiana González”.
“Era un trabajo exigente. Teníamos que ir a actos y marchas. Si alguien se acercaba demasiado a Fabiana, Marcela lo daba de baja sin aviso”, relató la mujer.









Un perito habló de “ritual de magia negra”
El tercer testigo fue un perito del Gabinete Científico del Poder Judicial, identificado como D. E. B., especialista en accidentología, balística e incendios. Propuesto por la defensa de Gustavo Melgarejo, el profesional afirmó que el imputado “se mostró colaborativo” durante los allanamientos en Campo Rossi, y que no halló ropa con olor a humo ni hollín en su domicilio.
Sin embargo, sorprendió al sostener que, según su interpretación, “la quemazón en el río Tragadero era un ritual de magia negra”.
Indicó además que el lugar tenía una vegetación muy densa y que la quema era reciente, aunque no pudo precisar el momento ni los elementos incinerados.


Acuña volvió a denunciar amenazas desde el penal
En paralelo al desarrollo del juicio, trascendió una nueva denuncia de Marcela Acuña, acusada como partícipe necesaria del femicidio. Desde la Unidad Penitenciaria N°1 de Mujeres de Resistencia, manifestó temer por su vida y pidió ser trasladada, tras un incidente en el que resultaron lesionadas cinco agentes penitenciarias.
En una comunicación telefónica con su hermana, Acuña denunció hostigamiento y persecución dentro del penal, e incluso lanzó graves acusaciones sobre el funcionamiento interno de la unidad.
“Están generando un ambiente para que me pase cualquier cosa”, advirtió.


Testimonios que no ayudan a la defensa
Los primeros testigos presentados por la defensa lejos estuvieron de mejorar la situación de los imputados. Por el contrario, reforzaron los lazos familiares, laborales y jerárquicos dentro del clan Sena, mostrando una estructura cerrada con roles definidos y fuerte dependencia entre sus integrantes.
El juicio continúa este martes con nuevas declaraciones, mientras el jurado popular avanza hacia las instancias finales del proceso que busca esclarecer el crimen de Cecilia Strzyzowski.
Fotos: Osvaldo Ramírez

