El piloto chaqueño Stéfano Polini (20) se ha convertido en una de las máximas promesas del automovilismo nacional. Con una carrera que comenzó de muy niño (9) en el karting y que hoy lo encuentra disputando simultáneamente la Fórmula 2 Argentina y la Fórmula 3 Metropolitana, el joven nacido en Coronel Du Graty transita uno de los momentos más determinantes de su trayectoria.
En pleno cierre de temporada, llega a las últimas fechas con chances concretas de coronarse campeón en ambas categorías.
«La verdad que venimos teniendo un año fantástico», afirmó Polini en diálogo con LA VOZ DEL CHACO. «Este año decidimos hacer dos categorías y fue muy importante para mí en lo deportivo. Tuvimos buenos resultados, estamos con muy buenos equipos y eso marca una diferencia enorme».
Un año bisagra:
el salto deportivo de 2024
Competir de manera simultánea en dos de las categorías de fórmula más exigentes del país no es habitual en un piloto tan joven. Pero para Polini fue un desafío asumido con seriedad desde el inicio de temporada.
«Este año estoy haciendo Fórmula 2 Argentina y Fórmula 3 Metropolitana. Son las dos categorías más importantes de fórmula que hay en el país», señala. Ambas definiciones llegan en un lapso de siete días: el 7 de diciembre en F2 y el 14 en F3, ambas en el Autódromo Roberto Mouras de La Plata.
Pese a su juventud, habló con la madurez de quien entiende perfectamente el momento que atraviesa. «Con ambas llegamos con chances de ser campeones; eso es muy importante para mí y para los equipos que me abrieron las puertas», destaca.
En F2 compite con Martínez Competición, bajo la dirección de Mauro Martínez; mientras que en F3 lo hace bajo la estructura de Satorra Competición, encabezada por Gabriel Satorra, una referencia histórica de la categoría.
El año de Polini incluye logros contundentes: dos victorias en Fórmula 2 y tres triunfos en Fórmula 3. Un rendimiento que lo posiciona entre los protagonistas más sólidos de 2024. «Estamos muy conformes. Tal vez no llegamos con la firmeza en puntos que nos hubiera gustado, pero dimos pelea en todas las carreras y eso me deja muy tranquilo», expresó.
Simulador, gimnasio y entrenamiento mental
A simple vista, muchos imaginan que un piloto se prepara solamente arriba del auto. Polini explicó que la realidad es muy distinta.
«A diferencia de otros deportes, en el automovilismo no podés ir tres veces por semana al autódromo a entrenar; es imposible por los costos», detalla. Para compensar esa imposibilidad, los pilotos profesionales se apoyan cada vez más en la tecnología.
«Entrenamos muchísimo con simuladores, que son juegos muy realistas que simulan exactamente lo que hace un auto de carreras con las pistas argentinas. Nos sirven para estudiar frenadas, curvas y referencias. Es fundamental para llegar preparados a cada fecha», indica.
La preparación física es otro de los pilares: gimnasio, resistencia cardiovascular, fuerza de brazos y una alimentación estricta. «El calor y el desgaste físico son tremendos arriba del auto. Si no estás bien preparado, lo pagás en la pista», afirma.
Pero uno de los aspectos menos visibles -aunque para él determinante- es el entrenamiento mental. «Trabajo con un psicólogo deportivo. Lo psicológico es clave. Te permite mantener la concentración, manejar la presión y corregir errores. A veces, una carrera se gana en la cabeza».
Automovilismo: potencial, apoyo del público y puntos a mejorar
Consultado sobre la realidad del automovilismo en la provincia, Polini ofrece una mirada honesta y constructiva.
«A nivel de pilotos, el automovilismo chaqueño es muy bueno. Hay muchos corredores que fueron a competir afuera y lo hicieron muy bien. El talento está», subraya.
Sin embargo, advierte que aún hay aspectos que deben corregirse. «Escucho muchos pilotos decir que hay problemas con los comisarios deportivos. Y también se nota que faltan autos o fechas. Algo está fallando en la organización», señala.
El acompañamiento del público, en cambio, es uno de los grandes valores de la provincia. «En Charata y Sáenz Peña se ve muchísimo público. Somos muy fierreros en el Chaco. El autódromo explota cuando hay carreras».
Para el joven piloto, el desafío es lograr que la dirigencia acompañe ese entusiasmo. «Los pilotos tienen que estar conformes con las reglas y con quienes toman decisiones. Ese es el corazón del automovilismo. Si eso falla, todo se complica».
La recta final:
dos definiciones
en el Mouras
A pocos días de las dos últimas competencias de la temporada, Polini ya tiene la mente puesta en La Plata. Conocer el circuito le da una ventaja natural, pero sabe que nada está asegurado.
«Ya corrimos muchas fechas allá con la Fórmula 3, así que tengo buenas referencias. Lo importante es que nos tocó un buen motor en el sorteo, porque en Fórmula 2 se sortean cada tres carreras y eso influye muchísimo», explicó.
El trabajo de puesta a punto también será clave. «Tenemos que esperar que el motor funcione bien y ajustar el chasis si hace falta. Pero todos mis rivales están muy fuertes; no hay margen para errores», dijo.
Un piloto que
ya es referencia
Con su humildad característica, Polini evitó colocarse en el lugar de «promesa», pero su presente lo confirma como uno de los talentos más firmes del automovilismo argentino. Competitivo, disciplinado, formado y con una estructura sólida detrás, se encuentra ante dos fines de semana decisivos.
«Vamos a dejar todo. Ojalá podamos cerrar este año de la mejor manera posible. Si no se da, igual me quedo con un año increíble, lleno de aprendizajes y de resultados muy importantes», afirma con convicción.
A su corta edad, ya demostró que el camino del sacrificio, la constancia y el talento puede abrir puertas inesperadas. Y aunque para él el futuro aún sea incierto, para el automovilismo chaqueño el mensaje es claro: Stéfano Polini ya es uno de los suyos que compite entre los grandes.
Sueños y proyecciones
Consultado sobre qué espera del cierre de 2024, respondió con absoluta claridad: «El objetivo principal era salir campeones. Las probabilidades son bajas, pero mientras la matemática nos dé, vamos a pelear hasta el final».
Y sobre 2025, reconoce que aún no tiene definido su futuro. La combinación entre estudio universitario y dos categorías nacionales fue extremadamente demandante. «Es muy difícil combinar una carrera universitaria con dos categorías. El año que viene tengo que evaluar qué opciones hay y, sobre todo, el presupuesto, que está muy complicado», aseveró.
Agradeció, una y otra vez, a quienes lo acompañan. «Tengo un gran apoyo de mis sponsors, del Instituto del Deporte Chaqueño (IDCH), del gobierno del Chaco y de mi familia. Todos ponen un granito de arena para que yo pueda estar arriba del auto», finalizó.

