Ricardo Urturi, responsable del Órgano de Control Institucional, se refirió este viernes al caso de los siete efectivos policiales involucrados en el robo de nueve kilos de cocaína que debían ser incinerados durante un operativo oficial de destrucción de estupefacientes realizado en Colonia Benítez. «Todos los detenidos pertenecen al área de Consumos Problemáticos».
Urturi explicó que la maniobra irregular fue descubierta mientras el procedimiento estaba finalizando. «Fue el secretario del Juzgado Federal quien advirtió una irregularidad en la forma en que se estaba realizando el proceso posterior al pesaje de la droga y ante esa situación se ordenó de inmediato la intervención de fuerzas federales, entre ellas Gendarmería Nacional, para verificar lo ocurrido», detalló.
Posteriormente, se detectó que parte de la droga había sido apartada del circuito formal, presuntamente para evitar su quema y que los involucrados eran siete efectivos que llamativamente integraban el área de Consumos Problemáticos, una dependencia que trabaja directamente con problemáticas vinculadas al consumo de sustancias.
El operativo incluía la destrucción de más de tres toneladas de marihuana y unos 80 kilos de cocaína, lo que dimensiona la magnitud del procedimiento y la gravedad institucional del presunto desvío.
POLICÍAS DE ALTOS RANGOS INVOLUCRADOS
Por su parte, el jefe de la Policía del Chaco, Fernando Romero, confirmó que entre los implicados hay tres policías de alto rango: un comisario, un subcomisario y un oficial principal, además de cuatro suboficiales.
Asimismo, indicó que la causa quedó en manos de la Justicia Federal y que la investigación es llevada adelante por la Gendarmería Nacional. De manera inmediata, los efectivos involucrados fueron apartados de sus cargos y el Órgano de Control Institucional dispuso la apertura de un sumario administrativo, junto con la suspensión de haberes.
Romero reconoció la gravedad institucional del episodio y sostuvo que el hecho “afecta el ánimo y, sobre todo, el prestigio de la institución”, al tiempo que advirtió sobre el impacto en la relación con el sistema judicial. “Volvimos a foja cero; todo lo que se trabajó en estos dos años se ve seriamente comprometido. La Justicia Federal ya no nos va a ver con la misma confianza, y la Justicia ordinaria tampoco”, expresó.

