Gustavo Martínez visitó el lugar histórico de Resistencia donde se realizó la renovación del edificio a través del programa de Esfuerzo Compartido.
Mediante la metodología de esfuerzo compartido, Resistencia colaboró con el Fogón de los Arrieros, a través de la mano de obra, para poder avanzar con trabajos de renovación de la fachada de esta casa cultural señera de la ciudad. Gustavo Martínez visitó la sede, ubicada en la calle Brown 350, donde junto a los integrantes de la comisión directiva dialogaron sobre la importancia del trabajo conjunto para el desarrollo cultural y social de la capital chaqueña.
En el lugar se realizaron labores de refacción y pintura, además de trabajos por parte de la Dirección de Paseos y Jardines para mantener en condiciones el lugar.
El Fogón de los Arrieros nació con Aldo Boglietti, como un estilo de vida, y fue creciendo hasta tomar forma y espacio en el solar de Brown 188, en 1943. Allí se nutrió, día a día, y en la tertulia de los martes («hoy, martes, café y entrada gratis’), la historia de una amistad honda, la de Aldo con los hombres de este Chaco y sus caminantes. Pero, además, pasaron figuras de la talla de Jorge Luis Borges, Nicolás Guillén, Emilio Petorutti y Raúl Soldi, e iniciadores del emplazamiento de esculturas en la vía pública de la ciudad.

Daniel Moscatelli, presidente de la Fundación Fogón de los Arrieros, agradeció el trabajo conjunto y sumó: “Son obras que pudimos realizar gracias al apoyo de Gustavo, un embellecimiento del frente que era necesario porque estaba muy deteriorado”. Contó además que la última vez que se pintó la fachada fue hace más de 10 años.
Se debe señalar que este año, el próximo 20 de agosto el Fogón cumple años y su edificio “necesitaba una remodelación, para tener en condiciones esta entidad cultural que es de todos los chaqueños”.