El Gobierno argentino confirmó que el presidente Javier Milei viajará a Roma para participar en la ceremonia de inicio del pontificado del nuevo papa León XIV. Así lo anunció este jueves el vocero presidencial Manuel Adorni, poco después de la fumata blanca que marcó la elección del sucesor del papa Francisco.
«El Presidente Javier Milei asistirá a la Solemne Caeremonia de Inauguración del Pontificado de Su Santidad León XIV en representación de la República Argentina», informó Adorni a través de su cuenta personal en la red social X.
La fecha exacta de la ceremonia aún no fue divulgada por el Vaticano, aunque se estima que tendrá lugar entre tres y cinco días hábiles después de la elección papal, de acuerdo con los protocolos habituales.
Este será el segundo viaje reciente de Milei al Vaticano. Pocos días antes, el mandatario participó del funeral de Francisco, el papa argentino fallecido tras más de una década de pontificado.
La presencia de Milei en ambos eventos refleja un gesto institucional hacia la Iglesia Católica y su nuevo liderazgo, más allá de diferencias ideológicas manifestadas por el Presidente en el pasado.
León XIV, nacido como Robert Prevost en Chicago, fue elegido como el nuevo papa luego de dos días de Cónclave. Su elección marcó un hecho inédito: es el primer pontífice estadounidense en la historia de la Iglesia Católica.
Prevost había desempeñado tareas pastorales en Perú durante más de dos décadas antes de ser llamado a funciones de mayor jerarquía en el Vaticano.
Su trayectoria incluye una fuerte impronta en labores sociales y una defensa activa de los sectores más vulnerables, valores que han sido destacados por numerosos líderes internacionales.
La elección de León XIV ocurre en un contexto mundial de tensiones geopolíticas, migraciones masivas y crisis humanitarias. Diversos jefes de Estado y de Gobierno han expresado su esperanza de que el nuevo papa pueda convertirse en un puente para el diálogo y la reconciliación.
REACCIONES INTERNACIONALES
La elección de León XIV fue celebrada por mandatarios de distintas regiones del mundo. Entre los primeros en pronunciarse estuvieron los expresidentes estadounidenses Donald Trump y Barack Obama.
Trump calificó la elección como «un gran honor para nuestro país», mientras que Obama saludó el origen de León XIV en Chicago y le deseó éxito en su pontificado.
Joe Biden, también oriundo de Illinois y católico practicante, expresó: «Habemus papam. Que Dios bendiga al papa León XIV de Illinois».
Desde América Latina, la presidenta de Perú, Dina Boluarte, recordó las décadas de servicio del nuevo papa en ese país y su compromiso con los más pobres.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, celebró las raíces latinas del pontífice y expresó su deseo de que sea «un líder para los pueblos migrantes del mundo».
Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de Brasil, pidió que León XIV continúe el legado de Francisco en favor de la justicia social y la diversidad.
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno español, manifestó su esperanza de que el nuevo papa fortalezca el diálogo y los derechos humanos.
Los Reyes de España también hicieron llegar sus felicitaciones y destacaron el mensaje de paz que acompaña a la figura del nuevo líder religioso.
Giorgia Meloni, primera ministra de Italia, subrayó la «fraternidad y responsabilidad» de sus primeras palabras como pontífice.
El presidente francés Emmanuel Macron consideró el acontecimiento como «un momento histórico» para la Iglesia.
En Europa del Este, Andrzej Duda, presidente de Polonia, ofreció su colaboración en la promoción de valores compartidos de paz y libertad.