«Feliz, contento por un nuevo objetivo cumplido con la selección», comenzó diciendo Ángel Deldó, capitán de Los Murciélagos, la selección argentina de fútbol para ciegos.
«La verdad que haber sido campeones de esta copa tan importante en Japón es una alegría enorme. Esta es una selección que de a poco se viene renovando, con un cuerpo técnico nuevo, que lleva muy poco tiempo y que arrancó con el pie derecho», aseveró.
En declaraciones a Radio Libertad, el jugador dijo que el nuevo ciclo es una etapa clave en el desarrollo del equipo: «Intentamos plasmar en la cancha el juego que ellos nos pidieron. Por momentos salió bien, pero lo importante es que estamos trabajando de cara a lo que viene. Estos cuatro años van a ser muy importantes».
Consultado sobre su desempeño personal durante el torneo, Deldó fue claro: «Me sentí muy bien. Desde lo físico llegué muy bien. Venimos trabajando desde comienzos de año para estar a la altura.
En semifinales tuve un golpe muy fuerte en el empeine, que nos obligó a hacer estudios, pero por suerte no fue nada grave y pude jugar la final sin problemas».
El sueño dorado
Con una carrera repleta de logros, Deldó no esconde que aún hay un objetivo que lo motiva profundamente: «Lo único que me falta con esta selección es la medalla dorada, y vamos a ir a buscarla en Los Ángeles 2028. Falta bastante, pero sabemos que es un objetivo importante».
Sin embargo, el camino hacia ese sueño incluye otras metas a corto plazo: «Antes están la Copa América y el Mundial. Vamos paso a paso. Pero ojalá que cuando llegue Los Ángeles, pueda estar y llegar de la mejor manera», dijo.
«La gran motivación es seguir dejando a esta selección en lo más alto», concluyó.
