El senador nacional criticó con dureza la reciente reunión de la Cámara alta, donde se aprobaron leyes sin tratamiento en comisiones ni debate previo. Advirtió que se ha perdido la normalidad institucional y reclamó por mayor transparencia y participación legislativa. Diferenció los proyectos que generan nuevos gastos de aquellos que solo redistribuyen fondos existentes. También cuestionó el impacto de un posible veto presidencial y pidió recuperar el diálogo político para enfrentar los problemas reales del país.
El senador nacional por el Chaco, Víctor Zimmermann, criticó con firmeza la sesión del Senado realizada el jueves.
En declaraciones a Radio Libertad, expresó su preocupación por la forma en que se aprobaron leyes relevantes sin tratamiento previo en comisiones. Entre los proyectos sancionados figuran la reactivación de la moratoria jubilatoria y la declaración de emergencia en discapacidad. «Perdimos la normalidad institucional», sostuvo.
Zimmermann aseguró que no hubo un trabajo legislativo serio antes de llevar las iniciativas al recinto.
Según explicó, los senadores se enteraron de los temas a tratar en el momento mismo de la sesión, sin contar con dictámenes previos ni debates técnicos que permitan comprender el impacto real de las leyes. «El problema no es el contenido, sino la forma», enfatizó.
El legislador manifestó que ingresó al Congreso desde temprano y que no tenía información sobre el temario. Esta falta de previsibilidad, indicó, refleja un deterioro en el funcionamiento democrático del Parlamento. «Nos enteramos en el momento, sin trabajo previo ni dictámenes sólidos», agregó.
DENUNCIA Irregularidades EN EL PROCESO
Zimmermann, integrante desde hace cinco años de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, afirmó que no fue convocado a participar del análisis de los proyectos. «No se discutió ni se explicó nada. ¿Cómo se va a aplicar la emergencia en discapacidad? ¿Cuánto va a costar? ¿Quién la va a ejecutar? Nadie lo dijo», planteó.
Desde su perspectiva, el rol de las comisiones ha sido desvirtuado, lo cual socava la calidad institucional. «Las comisiones están para algo. Pero si ahora solo juntás número, te autoconvocás y votás lo que querés… entonces no tiene sentido el proceso legislativo», expresó.
Además, cuestionó el «mecanismo exprés» con que se avanzó en la aprobación de leyes sensibles para la ciudadanía.
Asimismo, señaló que sin evaluación técnica ni participación de especialistas, las normas pierden eficacia y se convierten en instrumentos vacíos.
FONDOS PROVINCIALES Y CRÍTICA A LOS NUEVOS GASTOS
En otro tramo de su intervención, el senador estableció una diferencia entre los proyectos que implican creación de gasto público y aquellos que reorganizan la distribución de recursos ya existentes.
En ese marco, respaldó las propuestas impulsadas por gobernadores que modifican el reparto del impuesto a los combustibles y del impuesto al cheque.
«Eso no genera nuevo gasto, solo cambia la forma de distribuir fondos que ya existen. Es un enfoque totalmente distinto», explicó. En su opinión, estas iniciativas tienen un impacto fiscal neutro y buscan mayor equidad en el federalismo financiero, sin comprometer las finanzas nacionales.
Zimmermann remarcó que debe distinguirse entre decisiones que tienen un costo fiscal concreto y aquellas que corrigen asimetrías en la coparticipación.
De esta forma, se manifestó a favor de una discusión ordenada sobre cómo se asignan los recursos entre Nación y provincias.
EL VETO PRESIDENCIAL COMO SALIDA PARCIAL
Consultado sobre un eventual veto del Poder Ejecutivo a las leyes recientemente sancionadas, Zimmermann reconoció que se trata de una facultad constitucional, pero sostuvo que no resuelve el problema de fondo. «¿Qué se logró con todo esto? ¿Dónde está el beneficio para la gente?», se preguntó.
A su entender, las discusiones apresuradas derivaron en un clima de tensión institucional que no produjo soluciones reales. «Lo único que hubo fueron discursos cruzados, movilizaciones y caos. Y al final, nada concreto», afirmó.
Llamado al diálogo y a la normalidad democrática
En el tramo final de sus declaraciones, Zimmermann hizo un llamado a restablecer las formas democráticas y promover acuerdos políticos duraderos. «Yo no creo que destruyendo al otro me vaya a ir bien. Eso ya lo vivimos», reflexionó.
El senador remarcó la necesidad de recuperar una hoja de ruta común que permita hacer frente a los problemas estructurales del país.
Según afirmó, la confrontación constante no produce beneficios concretos y termina por debilitar la confianza ciudadana en las instituciones.
Zimmermann concluyó con un mensaje orientado a la ciudadanía: «Ojalá volvamos a la normalidad, porque los chaqueños y los argentinos necesitan soluciones, no escándalos».