El subsecretario de Coordinación Económica del Ministerio de Hacienda y Finanzas del Chaco, Guillermo Agüero, brindó en diálogo con La Radio un extenso informe sobre la situación financiera de la provincia.
Aseguró que al asumir la nueva gestión, se encontraron con «una caja incendiada» y una deuda estructural de gran magnitud.
Según explicó, uno de los principales pasivos heredados fue un bono internacional emitido en 2016 por 250 millones de dólares, cuya finalidad fue cubrir sentencias judiciales relacionadas con salarios. «Nosotros cuestionamos desde el primer momento esa emisión porque entendimos que bien se podía haber arreglado con un acuerdo de pago sin comprometer deudas internacionales», remarcó Agüero.
El funcionario detalló que esa deuda fue reestructurada con vencimientos semestrales que se concentran entre 2024 y 2028. «Durante toda nuestra gestión tendremos que pagar cada seis meses 40 millones de dólares solo por esta deuda», indicó.
Al monto mencionado se suman otros compromisos, como los contraídos con el Fondo Fiduciario para el Desarrollo Provincial, que ascendían a $90 mil millones. «Nos dejaron enormes deudas en salud, con obras paralizadas y con certificados sin redeterminar», agregó.
POLÍTICA FISCAL Y REORDENAMIENTO
Frente a esta situación, Agüero afirmó que el gobernador Leandro Zdero instruyó desde el primer momento un «estricto orden en el manejo de las cuentas públicas» y la consigna de «no gastar más de lo que ingresa».
En este marco, el gobierno chaqueño cumplió con los primeros tres vencimientos del bono internacional y se prepara para afrontar el cuarto pago en agosto. «Esto lo estamos logrando con una seria responsabilidad, cuidando cada centavo porque son recursos de todos los chaqueños», subrayó.
El subsecretario destacó también que se han saldado deudas con empresas constructoras y que se reactivaron obras paralizadas. «Vamos pagando, vamos retomando las obras en un enorme esfuerzo», puntualizó.
A su vez, Agüero mencionó que la provincia logró reducir la carga tributaria. «Hemos bajado Ingresos Brutos del 3,5% al 3,2% a partir de julio y al 2,9% desde enero de 2026», señaló. También se aplicaron rebajas en tributos a la producción primaria y en sellos.
RELACIÓN CON NACIÓN Y OBRAS ESTRATÉGICAS
Una de las claves para mantener la sostenibilidad fiscal, según Agüero, es la articulación con el gobierno nacional. «Estamos trabajando en un marco de acuerdos de razonabilidad y compartimos algunas premisas fundamentales», explicó.
Entre los avances concretos, mencionó la obra del segundo acueducto, cuya culminación estará financiada en un 100% por la Nación. «Va a resolver el problema de más de 600.000 chaqueños y beneficiará a más de 40 localidades», afirmó.
También se refirió a gestiones viales como las rutas 11, 16, 89 y 95, con el objetivo de mejorar la conectividad y el desarrollo logístico. «Se está trabajando ya en varios tramos clave», sostuvo.
En cuanto a seguridad jurídica, Agüero indicó que la provincia ha recuperado el control institucional. «Nadie te usurpa tu tierra, nadie te corta una calle, nadie te corta una ruta», destacó.
Políticas sociales y prioridades de gestión
En su diagnóstico, Agüero remarcó que el Chaco sufre problemas estructurales profundos como pobreza, informalidad laboral, y deficiencias en salud, educación y servicios.
Destacó el rol del Ministerio de Educación en la asistencia a los comedores escolares. «Se está trabajando como no se ha hecho nunca con los chicos y los comedores para garantizar alimentación y crecimiento sano», afirmó.
Según Agüero, este tipo de acciones se pueden sostener gracias a un «uso responsable y austero» de los recursos. «Cuidamos cada peso de los chaqueños para destinarlo a los servicios esenciales», indicó.
También enfatizó la importancia de no caer en default. «Caer en default genera más pobreza, más marginalidad, y una mancha que cuesta revertir», explicó.
Herencia, transparencia
y compromisos
El funcionario insistió en que los compromisos asumidos se están cumpliendo, incluso los heredados. «Honrar la palabra y la seriedad de una provincia es fundamental para recuperar confianza», afirmó.
Con respecto a la gestión anterior, fue crítico del uso de fondos públicos. «Cada peso que entraba iba a estructuras clientelares, hoy investigadas por la Justicia», denunció.
Agüero manifestó que la administración actual busca cambiar la matriz económica del Chaco. «No hay que mentir más a la sociedad, hay que transformar la realidad con responsabilidad», sentenció.
En ese sentido, consideró que el sector público está sobredimensionado y que «se transformó en un subsidio al desempleo». Apostó a crear condiciones para el desarrollo del sector privado.
Visión de futuro y cierre
Al cierre de su intervención, Agüero afirmó: «Estamos dispuestos a torcer el rumbo de la historia». Reconoció que la provincia enfrenta un contexto complejo, pero insistió en que «la visión, el liderazgo y la mística del gobernador Zdero nos impulsa a salir adelante».
Resaltó que el reconocimiento nacional a la gestión chaqueña se basa en el «orden y la transparencia». Sostuvo que el consenso es el camino elegido por la provincia para resolver sus problemas estructurales.
Finalmente, destacó que «es posible gestionar en un marco de responsabilidad, sin promesas vacías ni ficciones numéricas», y que el objetivo final es «garantizar la prestación de los servicios esenciales para 1 millón de chaqueños».