Por el asesinato de un hombre, un joven denunció a su tío como presunto homicida.
El domingo se encontró un cadáver en Lote 24, La Matanza, en Quitilipi y la investigación policial permitió identificar a dos sospechosos, uno de 19 y otro de 33 años.
El más joven declaró y señaló que presenció cómo su propio tío cometió el hecho, aportando información clave para esclarecer el crimen.
Las autoridades secuestraron una motocicleta, una bicicleta, una mochila y un par de zapatillas con posibles manchas de sangre.
El fiscal en turno ordenó allanamientos y continúa con las tareas investigativas para esclarecer completamente lo ocurrido.
La víctima fatal fue identificada como Aniceto Saravia.
La comisaría de El Tacuruzal alertó a las autoridades, lo que desencadenó un amplio despliegue policial en la zona para esclarecer lo sucedido.
La fiscalía N° 3, a cargo de Marcelo Fabián Soto, ordenó la presencia de peritos del Gabinete Científico del Poder Judicial y el móvil tanatológico para el traslado del cuerpo.
El trabajo conjunto de las diferentes divisiones policiales, incluyendo la Comisaría de Quitilipi, la de El Tacuruzal y la División de Investigaciones Complejas de Sáenz Peña, fue fundamental para el rápido esclarecimiento del caso.
A través de las tareas de investigación, los agentes consiguieron material fílmico de un almacén cercano al lugar del hecho. Las imágenes mostraron a la víctima comprando mercaderías el sábado por la tarde, y poco después, se observó a dos hombres en una moto 110cc sin carenado, que se dirigieron en la misma dirección que Saravia.
La policía, tras un arduo trabajo de campo, logró identificar a los dos sospechosos de la filmación: Leonardo Javier O., de 19 años, y Oscar O., de 33.
La rápida acción policial permitió la localización del joven Leonardo, quien, de manera espontánea, confesó haber sido testigo del crimen. El muchacho relató que su tío Oscar fue quien habría cometido el homicidio, y que él se retiró del lugar asustado por lo que presenció. Con esta información crucial, los agentes fueron en busca de este.
Pocos minutos después, los agentes lograron la aprehensión de Oscar, quien fue encontrado con una bicicleta y una mochila negra. A partir de las declaraciones de su sobrino y de la evidencia recolectada, el fiscal en turno ordenó la detención formal del sospechoso y solicitó una orden de allanamiento para su domicilio con el fin de secuestrar el arma homicida. Además, se incautó la motocicleta en la que se movilizaban y un par de zapatillas suyas, que presentaban lo que serían manchas rojizas con apariencia de sangre.
El caso, que conmocionó a los vecinos de Quitilipi, fue resuelto en un tiempo récord gracias al trabajo articulado de las fuerzas de seguridad y la Justicia. La detención de Oscar y el secuestro de los elementos clave, como el calzado y la motocicleta, son pasos fundamentales para avanzar en la investigación y determinar las circunstancias exactas en las que ocurrió el homicidio de Aniseto Saravia. La investigación continúa en curso para recabar más pruebas y que el autor del crimen responda ante la Justicia por sus actos.
