Hoy tendrá lugar la Tercera Marcha Federal Universitaria, en defensa de la educación pública y en rechazo al veto presidencial a la Ley de Presupuesto Universitario, que contará con la participación de diversos sectores como los profesionales médicos y jubilados.
Las movilizaciones tendrán lugar en Resistencia y Corrientes, con epicentro en dos convocatorias simultáneas.
En la capital chaqueña, los manifestantes se concentrarán desde las 17 en la plaza Belgrano, frente a la UTN, mientras que en Corrientes la marcha partirá desde el parque Cambacuá y concluirá frente al rectorado de la Unne.
«Estamos un poco a contrarreloj, pero salimos a invitar y a poder explicar el sentido de esta tercera marcha», señaló la secretaria general de la Federación Universitaria del Nordeste (Fune), Agostina Cerrano, al confirmar la organización.
Cerrano explicó que la movilización en Resistencia incluirá un paso simbólico por el hospital pediátrico Avelino Castelán, en coincidencia con el debate parlamentario sobre la emergencia pediátrica.
«La idea fue conectar con los trabajadores de la salud, residentes y pacientes que vienen en lucha hace meses, y concluir todos juntos en el campus de la Unne en avenida Las Heras al 700», adelantó.
Una marcha amplia y multisectorial
La dirigente estudiantil aseguró que la convocatoria «no es contra Milei ni contra nadie en particular, sino por todos y todas» y agregó: «La universidad pública es uno de los grandes sistemas que hacen grande a nuestro país. Este mensaje en las calles es más para los legisladores, para que acompañen, revaliden la ley y rechacen el veto».
Cerrano también destacó que la marcha sumará a otros sectores sociales: «Se nos juntó con los miércoles de jubilados, entonces ellos también se sumaron. La expectativa es poder replicar la masividad de las dos primeras marchas».
Reclamos y objetivos
El rector de la Unne, Omar Larroza, advirtió sobre las consecuencias del veto al presupuesto universitario. «Admiten que en términos salariales hay un retraso del 42%, pero no se ofreció una solución clara», indicó y recordó que el propio Ejecutivo nacional reconoció la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores universitarios.
Larroza remarcó que el proyecto vetado «preveía incrementos necesarios para ajustar al menos los gastos en servicios básicos, y ni siquiera eso fue atendido».
Por ello, expresó su expectativa de que el Congreso revierta la medida: «Ojalá que en algún momento se constituya el quórum y los dos tercios para tratar de ratificar la ley».
Becas recortadas y abandono
La titular de la Fune advirtió que los recortes en becas de bienestar estudiantil ya golpean de lleno en la vida de los jóvenes. «Tuvimos recorte de todas las becas de bienestar estudiantil. No son grandes montos, pero significan poder comer en el comedor, acceder al deporte o comprar material de estudio», explicó.
A su vez, reveló una situación que definió como «desesperante»: «Estamos viviendo un vaciamiento en las aulas. Ya tenemos un montón de docentes que renunciaron y de estudiantes que no pudieron seguir cursando porque no alcanzan a sostener los gastos de transporte y materiales.
Compañeros que empezaron el año ya no están cursando el segundo cuatrimestre».
Un escenario político muy tenso
Desde el rectorado, Larroza subrayó la complejidad del momento institucional. «Nosotros estamos en alerta constante porque es una amenaza importante», advirtió. Además, pidió que las medidas de fuerza no se conviertan en un freno académico: «Cualquier convocatoria, queremos que sea con los alumnos en las aulas».
Al mismo tiempo, el rector planteó la necesidad de inteligencia política: «La segunda estrategia es seguir insistiendo en los planos de negociación, aunque hasta ahora las puertas están cerradas» y describió la coyuntura como un escenario «muy tenso» en el que se requiere «actuar con inteligencia y estrategia».
Expectativa
para hoy
La convocatoria de hoy busca convertirse en una nueva demostración nacional a favor de la educación pública, tras dos marchas multitudinarias realizadas en meses anteriores.
Con banderas, pancartas y consignas, el movimiento estudiantil y los gremios universitarios esperan repetir la masividad que en abril y junio ya había desbordado plazas y calles en todo el país.
«Nosotros luchamos por todo: por mejores aulas, becas, salarios dignos y condiciones edilicias. La universidad pública es de todos y la defendemos entre todos», reafirmó Cerrano.
Antecedentes
Desde fines de 2023, las universidades nacionales argentinas vienen advirtiendo que están funcionando con presupuestos prorrogados, lo que implica que los montos asignados no se actualizaron conforme a la inflación, lo que generó pérdidas reales en su capacidad de funcionamiento.
En concreto, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) afirmó que el presupuesto no había sido aprobado para varios años y que eso hacía que las universidades dependieran de recursos que ya estaban desfasados ante los costos de los servicios básicos, salarios y becas estudiantiles.
Se estimó que el poder adquisitivo de los salarios de docentes y personal no docente cayó de forma significativa -entre 30% y 40%-, producto de que los aumentos otorgados estaban muy por debajo de la inflación acumulada.
Las instituciones denuncian que ya se han postergado obras, infraestructura y mantenimiento edilicio; becas y programas de bienestar estudiantil también están seriamente afectados.