Los peritajes confirmaron que la joven chaqueña murió por ahorcamiento y presentaba lesiones en distintas partes del cuerpo. El único acusado, Jesús Salvatierra, continúa internado tras intentar quitarse la vida.
La autopsia practicada al cuerpo de Gabriela Arací Barrios (20), la joven de 20 años encontrada sin vida en Avia Terai, confirmó que la causa de muerte fue asfixia manual.
Los estudios forenses también revelaron que presentaba numerosos golpes en diferentes partes del cuerpo, lo que refuerza la hipótesis de un ataque violento antes del fallecimiento.
El hallazgo del cuerpo se produjo en un pozo negro ubicado en la vivienda de Jesús Salvatierra, quien permanece detenido como principal sospechoso del crimen. La investigación sostiene que el hecho ocurrió en la casa del acusado y que, tras el asesinato, el cuerpo habría sido ocultado en ese lugar.
Los médicos forenses constataron lesiones compatibles con golpes en el rostro, especialmente en la zona cercana a la nariz, además de otras marcas en el torso y extremidades. Las autoridades intentan determinar si estas heridas se produjeron durante la agresión o en el momento en que el cuerpo fue arrojado al pozo.
El fiscal que interviene en la causa aguarda la evolución médica de Salvatierra, quien intentó quitarse la vida mientras permanecía bajo custodia policial. Una vez que reciba el alta hospitalaria, se prevé que sea llamado a declarar por el crimen que conmocionó a toda la localidad.
La comunidad de Avia Terai continúa consternada por el caso, mientras los investigadores avanzan en la recolección de pruebas y testimonios para esclarecer lo sucedido. Con este hecho, el Chaco suma nueve femicidios en lo que va del año, un número que mantiene en alerta a las autoridades judiciales y de seguridad.
