La Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci), encabezada por el fiscal general Horacio Azzolin, presentó su informe de gestión correspondiente a 2024, en el que se evidencia un aumento interanual del 21,1% en la cantidad de reportes por delitos informáticos.
Según el documento oficial, durante el período comprendido entre enero y diciembre se recibieron un total de 34.468 denuncias, cifra que consolida la tendencia ascendente observada desde los primeros años de la pandemia de Covid-19 y refleja la creciente sofisticación de las maniobras delictivas en el ámbito digital.
El informe detalla que los delitos informáticos más frecuentes continúan siendo el fraude en línea con criptoactivos y estafas piramidales, la usurpación de identidad en cuentas de WhatsApp, el acceso ilegítimo a cuentas bancarias y billeteras virtuales, el phishing y el acoso mediante mensajes extorsivos.
La Ufeci remarca que el aumento de los reportes no solo refleja una mayor actividad delictiva, sino también una mayor conciencia ciudadana sobre la necesidad de denunciar.
Se observa que la tendencia de crecimiento se inició durante la pandemia: mientras que entre abril de 2019 y marzo de 2020 se registraron 2.581 reportes, en el período de enero a diciembre de 2021 la cifra ascendió a 22.364. En 2022 se alcanzaron 32.395 casos y en 2023 se registraron 28.456, evidenciando fluctuaciones que responden a distintos factores sociales y tecnológicos.
El informe anual de la Ufeci también establece un panorama comparativo que permite dimensionar la evolución de las amenazas digitales.
FRAUDES EN LÍNEA Y MODALIDADES DE ESTAFAS
El documento oficial precisa que la modalidad de «fraude en línea» fue la más reportada durante 2024, con 21.729 casos, representando el 63% del total. Le siguen la «usurpación de identidad» con 4.637 reportes (13,5%), «acceso ilegítimo» con 2.877 (8,3%), phishing con 1.563 (4,5%) y «acoso» con 1.458 denuncias (4,2%). Las restantes modalidades constituyen un 6,4% del total y no presentan cifras representativas por separado.
Dentro de los fraudes en línea, el 56% corresponde a operaciones de compra-venta de bienes o servicios por internet, un 18% a fraudes en plataformas de homebanking, un 10% a esquemas de Ponzi o estafas piramidales, y un 16% restante a otras variantes.
El informe subraya un aumento de los fraudes asociados a plataformas de inversión y ofertas de trabajo, en los que las víctimas son atraídas por la posibilidad de obtener beneficios económicos superiores a las tasas de mercado.
A través de redes sociales, WhatsApp o Telegram, se ofrecen supuestas inversiones en plataformas de prestigio, solicitando transferencias de dinero a billeteras virtuales y la incorporación de nuevos clientes, consolidando un esquema de confianza que termina en pérdidas financieras.
El informe destaca también los fraudes vinculados a ofertas de alquileres temporarios y reservas turísticas, con 488 reportes durante 2024.
El 51% de estos casos se concentró en el primer trimestre, coincidiendo con el período de vacaciones de verano, lo que evidencia un patrón estacional que podría repetirse en la temporada estival 2025, según las proyecciones de la Ufeci.
ACCESOS ILEGÍTIMOS Y SEGURIDAD DIGITAL
El relevamiento incluye 2.877 reportes de accesos ilegítimos a cuentas digitales. Del total, el 30% correspondió a ingresos no autorizados a cuentas de WhatsApp, el 26% a billeteras de Mercado Pago, el 20% a otras plataformas, el 15% a Facebook, el 4% a Gmail, el 3% a Instagram y el 2% a Hotmail.
Los accesos ilegítimos a WhatsApp suelen involucrar llamadas fraudulentas solicitando códigos de activación. Al remitir estos códigos, la víctima pierde el control de la cuenta, permitiendo que los delincuentes contacten a sus conocidos y soliciten transferencias de dinero mediante distintos artilugios.
PHISHING Y EXTORSIONES
Durante 2024, la Ufeci recibió 5.145 reportes de phishing mediante correos electrónicos simulando trámites diversos.
Si bien en años anteriores predominaban correos dirigidos a bancos, en 2024 se incrementaron los casos vinculados a organismos públicos o entes estatales, reflejando la adaptación de los delincuentes a nuevos contextos de interacción digital.
Se registraron 774 casos de extorsión, incluyendo 109 reportes donde las víctimas eran informadas de la instalación de software espía en sus dispositivos. Los mensajes extorsivos señalaban la supuesta grabación de contenido íntimo, exigiendo pagos en criptoactivos para evitar la divulgación, lo que evidencia el uso creciente de técnicas de intimidación digital.
El ransomware también mostró un incremento, con 26 reportes durante el año, un aumento del 20% respecto a 2022 y 2023. Este tipo de ataque implica la instalación de programas que encriptan información, solicitando rescates en criptoactivos.
Los objetivos incluyen empresas, organismos estatales y entidades financieras, subrayando la relevancia económica y estratégica de estos delitos.

