La ministra de Educación, Sofía Naidenoff, explicó en diálogo con La Radio que su equipo se encuentra trabajando de manera completa, en el marco de una reunión interna destinada a revisar la planificación anual y los desafíos que aún quedan por afrontar.
Naidenoff señaló que la cartera educativa se encuentra abocada a «afianzar el año» y a preparar los próximos períodos, remarcando que cuentan con recursos para sostener el funcionamiento durante el año siguiente, aunque las demandas superan los niveles de disponibilidad.
Asimismo, reconoció que persisten solicitudes de mobiliario escolar en distintos establecimientos, aunque destacó que el Ministerio busca «mirar el vaso medio lleno» y organizar la distribución de bancos y otros insumos de acuerdo con la capacidad real de respuesta. Afirmó que «no hemos podido darles a todo lo que pidieron», pero indicó que el equipo trabaja articulando con fundaciones, otras instituciones escolares y actores comunitarios para priorizar necesidades y resolver la mayor cantidad posible de requerimientos.
Además, sostuvo que, pese a las limitaciones presupuestarias, la gestión mantiene un orden de prioridades basado en criterios de urgencia y en diagnósticos regionales. Explicó que, si bien las expectativas de la comunidad son elevadas, el equipo procura avanzar con los recursos disponibles, resaltando que «vamos tratando de trabajar entre todos» para hacer frente a las demandas estructurales del sistema educativo provincial.
Por otra parte, la ministra enfatizó que algunas soluciones llegan gracias a la colaboración externa, tanto de organizaciones sociales como de municipios que ayudan a las escuelas en problemas puntuales.
Describió que en ciertos casos son estas instituciones las que contribuyen a la reposición o mejora de instalaciones, permitiendo al Ministerio orientar sus recursos hacia situaciones de mayor gravedad o urgencia.
Frente a las consultas sobre la incapacidad de cubrir todos los pedidos de la comunidad educativa, Naidenoff señaló que la gestión procura ordenar las prioridades de manera transparente y responsable. Indicó que, en ocasiones, la población espera respuestas inmediatas, aunque aclaró que muchas de las problemáticas requieren intervenciones mayores que exceden la disponibilidad financiera inmediata, mencionando que «tendría que Papá Noel este fin de año dejarnos una bolsa tanta llena de plata» para cubrir todas las demandas acumuladas.
INFRAESTRUCTURA ESCOLAR Y EMERGENCIAS
Al referirse a la situación edilicia, la ministra confirmó que «muchas escuelas» necesitan mucho dinero, en referencia al deterioro de edificios y servicios esenciales.
Precisó que el Ministerio cuenta con un sistema de gestión de datos que permite identificar necesidades por región y actuar en función de las urgencias más extremas, puesto que las condiciones varían ampliamente entre localidades y edificios.
Naidenoff relató casos recientes que ejemplifican la complejidad de la infraestructura escolar. Informó que una comitiva oficial se dirigía a Pampa del Infierno cuando recibió la noticia del robo de cables en un jardín de Fontana, lo que dejó sin luz al establecimiento y obligó a reordenar las prioridades programadas. Señaló que hechos de este tipo obligan a «empezar de cero» y desplazar intervenciones previamente planificadas.
En otro punto, explicó que instalaciones eléctricas antiguas generan riesgos significativos, particularmente cuando se han colocado numerosos equipos nuevos, como aires acondicionados, sin adecuar los sistemas previos. Indicó que más del 70% de las escuelas presenta problemas eléctricos o funciona con cables en mal estado, lo que obliga a municipios, personal de infraestructura y equipos técnicos a intervenir constantemente
La ministra sostuvo que la reparación de techos implica obras integrales, debido a que deben retirarse materiales, revisar bases estructurales y examinar canaletas que suelen presentar problemas recurrentes. Afirmó que estas intervenciones requieren tiempo y recursos, y que la magnitud del deterioro acumulado dificulta atender la totalidad de los establecimientos con la rapidez que demanda la ciudadanía.
Fundación Valdocco
En relación con la causa vinculada a la Fundación Valdocco, la ministra explicó que la investigación judicial estaba «reservada», lo que impedía conocer las razones de la decisión del juez. Indicó que recientemente se tomaron conocimiento de los fundamentos y que se está avanzando en todos los aspectos relacionados con minoridad y familia, dado que el caso involucra a menores.
Señaló que la Justicia solicitó una inspección ocular en el lugar, la cual será realizada por el juez junto con el director de escuelas privadas, con el objetivo de verificar cuántos menores se esncuentran allí, en qué condiciones están y si cuentan con las autorizaciones correspondientes de sus padres.
Aclaró que toda esta supervisión pasa a la órbita de minoridad, puesto que el Ministerio de Educación no posee albergues para menores.
Naidenoff aseguró que el Ministerio cumple con los requerimientos que establece la Justicia, aportando la documentación necesaria y articulando con las áreas competentes para garantizar que el procedimiento se ajuste a las normas de protección de derechos de niños y adolescentes involucrados en el caso.
Cultura institucional
Naidenoff reconoció que el mayor desgaste de su función no proviene de la carga laboral, sino de las dificultades en las relaciones humanas dentro del sistema educativo. Señaló que «lo que me duele son las relaciones humanas» y expresó preocupación por la cultura institucional instalada durante años, que, según dijo, afecta la capacidad de gestión y la construcción de consensos.
La ministra manifestó que existen actitudes que entorpecen procesos administrativos o demoran decisiones necesarias. Atribuyó parte de estos problemas a una cultura arraigada en la que se espera que todo proceda únicamente del Estado, dejando de lado prácticas de colaboración y responsabilidad compartida. Indicó que esta forma de funcionamiento lleva años instalada y requiere cambios profundos.
Recordó momentos históricos que, desde su perspectiva, mostraban un Chaco con mayor esperanza y sentido de crecimiento colectivo. Expresó que «eso desapareció» y que la actual gestión enfrenta problemas estructurales como el control de escuelas de gestión social, la verificación de carreras terciarias sin títulos adecuados o la existencia de certificaciones otorgadas sin condiciones formales básicas.
Afirmó que la subsecretaría a cargo de Omar Maggio trabaja con respeto y diálogo con las instituciones, incluso cuando existen resistencias a las supervisiones y controles exigidos por el Estado. Explicó que la prioridad es restablecer estándares mínimos de calidad educativa y administrativa, pese a que en todas las áreas se trata de «un trabajo de cero», que demanda reconstruir procesos institucionales básicos.
Además, enfatizó la importancia de gestionar con datos, señalando que ningún gobernante debería concluir una gestión sin explicar qué hizo con la información recibida y cómo mejoró los indicadores educativos. Sostuvo que la falta de mantenimiento durante años plantea interrogantes sobre el uso de los recursos públicos y reclama transparencia hacia la ciudadanía.
Naidenoff afirmó que, a pesar de las dificultades, siente un fuerte compromiso con la educación y con la necesidad de sostener la esperanza en la comunidad. Expresó que, si llegara a perderla, sería preferible dejar el cargo antes que transmitir desánimo al sistema educativo, insistiendo en que la prioridad es reconstruir prácticas institucionales que permitan mejorar el funcionamiento escolar.

