La maestra rural chaqueña Gloria Cisneros fue seleccionada por segundo año consecutivo como candidata a la mejor docente del mundo por el Global Teacher Prize 2026, una distinción impulsada por la Fundación Varkey en colaboración con la Unesco. La nominación vuelve a situar a la educación rural del Chaco en el centro de la escena internacional y reconoce una trayectoria pedagógica sostenida en contextos de alta vulnerabilidad territorial y social.
La confirmación fue celebrada por el Ministerio de Educación del Chaco, encabezado por Sofía Naidenoff, quien recibió a la docente en un encuentro institucional realizado en la sede ministerial.
La instancia permitió destacar el impacto del trabajo educativo desarrollado en el paraje La Sara, jurisdicción de Taco Pozo, una zona ubicada en el corazón de El Impenetrable chaqueño.
Cisneros se desempeña en la Escuela de Educación Primaria 793 Don Carlos Arnaldo Jaime, donde cumple funciones como personal único, lo que implica asumir de manera integral la conducción pedagógica, administrativa y comunitaria de la institución.
Su selección entre los 50 finalistas del premio internacional la posiciona entre docentes de todo el mundo que han realizado aportes significativos a la educación.
El Global Teacher Prize fue creado con el objetivo de visibilizar el rol central que cumplen los educadores en la construcción de sociedades más justas e inclusivas, reconociendo prácticas innovadoras, compromiso social y resultados sostenidos en la mejora de las trayectorias escolares. El premio contempla una distinción económica de un millón de dólares destinada a fortalecer proyectos educativos.
En esta edición, Cisneros tiene la posibilidad de representar a la Argentina junto al profesor porteño Miguel Alejandro Rodríguez.
La nominación renueva las expectativas generadas el año anterior, cuando la docente chaqueña alcanzó instancias decisivas del certamen y logró una amplia valoración internacional de su trabajo pedagógico.
RESPALDO INSTITUCIONAL Y VALORACIÓN OFICIAL
La ministra de Educación, Sofía Naidenoff, expresó su reconocimiento personal a la docente y destacó el significado de la nueva nominación. «Es una alegría inmensa», manifestó, al relatar que tomó conocimiento de la noticia mientras se encontraba de viaje junto al gobernador provincial, tras recibir el aviso de la Fundación Varkey.
Naidenoff recordó el desempeño de Cisneros en la edición anterior del premio y subrayó la alta ponderación obtenida por su labor. Señaló que «no ganó por poco» y expresó su deseo de que en esta oportunidad pueda alcanzar la distinción máxima, remarcando el valor simbólico que ello tendría para la educación chaqueña.
Durante el encuentro, la ministra dialogó con la docente sobre el impacto del reconocimiento internacional y la proyección de su trabajo en el territorio.
En ese marco, alentó a Cisneros a compartir sus experiencias y prácticas pedagógicas con otras instituciones educativas, con el objetivo de favorecer la circulación de buenas prácticas en el sistema.
La reunión contó con la participación de la referente pedagógica de la Fundación Varkey, Pamela González, quien compartió las vivencias del último año y destacó cómo el primer reconocimiento internacional tuvo un efecto multiplicador en la comunidad educativa y en la visibilidad de la escuela rural.
Cisneros: «El maestro propone, la comunidad acompaña y los niños lo hacen»
La maestra Gloria Cisneros atribuyó el reconocimiento a un esfuerzo colectivo sostenido en el tiempo. «Es posible gracias a los niños, a las familias; porque cotidianamente y de manera creativa trabajan dinámicas donde muestran lo que hacen, que se caracterizan por la predisposición y el compromiso en responder a las actividades que nosotros proponemos», expresó.
En esa misma línea, destacó el vínculo entre la escuela y su entorno social al afirmar: «El maestro propone, la comunidad acompaña y los niños lo hacen». La docente remarcó que el acompañamiento familiar resulta clave para sostener procesos educativos en contextos rurales dispersos.
Cisneros agradeció el recibimiento de la ministra y de su equipo, y valoró las expresiones de apoyo institucional. «Estoy muy contenta, muy emocionada y agradecida por todas las palabras de aliento y felicitación por parte de la ministra y todo su equipo», señaló tras el encuentro.
Al referirse al alcance del premio, explicó que «el Global Teacher Prize reconoce a los mejores docentes de todo el mundo y la Fundación Varkey nos dio la posibilidad de dar a conocer nuestra historia». En ese proceso de evaluación, indicó que «tras un análisis quedamos seleccionados entre los 50 finalistas a nivel mundial».
Asimismo, describió su rol integral dentro de la escuela, donde se desempeña como directora, maestra, cuidadora, administradora y líder comunitaria, una multiplicidad de funciones que refleja las características del sistema educativo rural en zonas de difícil acceso.
DESAFÍOS TERRITORIALES E INNOVACIÓN EDUCATIVA
Cisneros relató que cada semana viaja alrededor de dos horas en motocicleta para llegar a la institución, atravesando caminos de tierra y condiciones climáticas adversas propias de El Impenetrable. Esta realidad forma parte de los desafíos cotidianos que enfrenta para garantizar el derecho a la educación de sus estudiantes.
«Soy personal único en la escuela donde trabajo, desde allí realizo todas las tareas que implican estar al frente de una institución educativa», explicó, al tiempo que destacó el desarrollo de proyectos comunitarios orientados a fortalecer las trayectorias escolares de todos los niños a su cargo.
La docente señaló que uno de los ejes centrales de su trabajo es la incorporación de herramientas tecnológicas. «Además, hemos logrado innovar la educación a través de la tecnología con varias plataformas digitales y el ingreso de la inteligencia artificial», detalló, remarcando el carácter innovador de las propuestas implementadas en un contexto rural.
Asimismo, indicó que la escuela participa de propuestas de promoción pedagógica a nivel provincial, regional y nacional, lo que permite ampliar el horizonte educativo de los estudiantes y vincularlos con experiencias más allá de su entorno inmediato.
Al describir el impacto de los proyectos, Cisneros explicó que «los diferentes proyectos que implementamos, los niños lo viven con la mayor alegría, porque los inserta en un mundo diferente al que ellos viven», y agregó que, pese a las limitaciones de servicios básicos, estas iniciativas les permiten «expandir sus conocimientos, mirar más allá del monte».
Proyectos destacados
Entre las iniciativas desarrolladas, Cisneros destacó el proyecto «La biblioteca en mi casa», mediante el cual, junto a las familias, se creó una biblioteca en cada hogar, garantizando el acceso cotidiano a libros para los estudiantes rurales. Esta propuesta fue reconocida como una de las buenas prácticas docentes a nivel nacional.
La docente también subrayó el trabajo territorial realizado para asegurar la escolarización de todos los niños de los parajes a su cargo, recorriendo uno por uno los hogares para integrarlos al sistema educativo formal, en una tarea de inclusión sostenida y personalizada.
En el plano de la gestión de recursos, Cisneros logró obtener becas para sus 15 alumnos actuales y para alrededor de 35 estudiantes más de Taco Pozo, a través de acuerdos gestionados con organizaciones no gubernamentales y donantes, ampliando así las oportunidades educativas de la comunidad.
Durante el presente año, la escuela se sumó además al programa Puño y Letra, impulsado por la Fundación Mira, que promueve el intercambio de cartas manuscritas entre estudiantes de escuelas rurales de distintas regiones del país, fortaleciendo la comunicación y el reconocimiento de las identidades locales.
Al referirse a la nominación, Cisneros afirmó: «Esta nominación es muy importante en mi carrera, es el reconocimiento a todo el trabajo silencioso que hacemos para mejorar la calidad de vida de nuestros estudiantes, es una gran satisfacción».
En caso de obtener el premio, anticipó que destinaría los fondos a garantizar el acceso al agua en la escuela y a la construcción de una residencia estudiantil que permita la continuidad de estudios terciarios de los egresados.

