El cinematográfico caso del narco que atropelló a un gendarme, le agregó más letras a la historia al comprobarse que llevaba casi 90 kilos de cocaína, oculta en bancos de cemento.
Pero eso no es todo. Una mujer fue la que lo arrestó, tras un intento de fuga dentro de una universidad, donde hubo hasta disparos de armas de fuego.
EL CASO
Tras un operativo conjunto entre la División Drogas Peligrosas Sáenz Peña, Policía Caminera y Gendarmería Nacional, este peligroso narco terminó su huida siendo reducido por una mujer, en el interior de la Universidad Nacional del Chaco Austral (Uncaus), donde los empleados vivieron momentos de tensión tras una balacera a metros de allí.
Horas antes, el delincuente había chocado a un gendarme en un retén de control de Gendarmería en ruta nacional 16 a la altura de Monte Quemado, publicó el portal Periodismo 365.
Ya en Presidencia Roque Sáenz Peña, el sujeto protagonizó un enfrentamiento armado con efectivos policiales para luego ingresar corriendo a la universidad por una de las garitas de seguridad.
La camioneta con droga quedó estacionada en la parte trasera de un galpón ubicado a muy pocos metros de la Uncaus. Todo ocurrió en plena calle 12, a la luz del día y en horario donde es alto el tránsito de personas.
El narco habría descartado un arma de fuego en la vereda lateral de la universidad. Por el momento hay un solo detenido, un vehículo incautado y se secuestraron poco más de 90 kilos de cocaína valuada en $2 mil millones ($22 millones el kilo en el centro del Chaco, de acuerdo a valoraciones de fuerzas federales).
El delincuente fue trasladado al Escuadrón I de Gendarmería Nacional.
Al respecto, fuentes policiales consultadas por Periodismo365, fueron informando del hecho hasta altas horas de la noche del viernes, donde finalmente se confirmó el total de cocaína incautada aunque por el momento se desconoce quién sería el destinatario del cargamento.
Se remarca que Sáenz Peña, por su ubicación estratégica, forma parte de la ruta caliente de la cocaína boliviana (o peruana) y las incautaciones de la sustancia se realizan cada vez más seguidas y en mayores cantidades.
Se aclara que Bolivia es el tercer productor mundial de cocaína y no está lejos de la geografía chaqueña.

