Según informó la Comisaría de El Espinillo, un productor de 47 años denunció que al llegar a su campo, ubicado en el paraje San Manuel, a unos 35 kilómetros de la planta urbana, halló un potrillo sin vida, con lesiones compatibles con el ataque de un felino. En el mismo predio también fue encontrado otro potrillo con heridas en la garganta y en el anca, presuntamente provocadas por el mismo animal.
El establecimiento se encuentra cerrado perimetralmente y se dedica a la cría de ganado vacuno y equino. Ante la situación, se coordinó un operativo para arribar al lugar con las primeras luces del día, con el objetivo de realizar el acta de constatación y el registro de evidencias.
La novedad fue comunicada a la Dirección de Recursos Naturales y Áreas Protegidas del Chaco, al Parque Nacional La Fidelidad, y se prevé poner en conocimiento a la Fundación Rewilding, debido a la posible presencia del yaguareté en la región.
La situación mantiene en estado de alerta a productores de distintos parajes, mientras se aguarda la confirmación oficial tras las pericias correspondientes
Investigan la aparición
de huellas y rugidos
Durante la noche del sábado se activó un procedimiento preventivo en una zona rural bajo jurisdicción de la comisaría de El Espinillo, luego de que un vecino advirtiera sobre la posible presencia de un felino de gran porte dentro de una reserva natural del norte del Chaco. La situación fue informada a las autoridades ante el riesgo que podría implicar tanto para personas como para animales domésticos y de producción que circulan habitualmente por el lugar.
Según consta en el expediente iniciado por la Policía, el denunciante indicó que posee ganado vacuno y equino en un área protegida de unas 140 mil hectáreas y que, días atrás, escuchó gruñidos en dos oportunidades durante la noche. Posteriormente, al recorrer el campo, observó huellas de gran tamaño que, por su experiencia, no corresponderían a un puma. Ante la posibilidad de que se trate de un animal silvestre de mayor porte, solicitó la intervención de las autoridades para prevenir cualquier incidente.
Tras el aviso, personal policial mantuvo contacto telefónico con el denunciante y coordinó un encuentro en un paraje cercano, desde donde se realizó un acompañamiento hasta el área señalada. En el lugar se llevaron adelante rastrillajes, se identificaron huellas compatibles con un felino y se efectuaron tomas fotográficas, quedando todo asentado en un acta de constatación. Además, se recogieron testimonios de pobladores de la zona, quienes relataron haber escuchado rugidos durante la noche y notar comportamientos inusuales en sus animales, especialmente perros que buscaron refugio dentro de las viviendas.
La información recolectada fue puesta en conocimiento de autoridades ambientales y del área de parques, quienes remarcaron la importancia de contar con registros fotográficos claros de las huellas para su posterior análisis y determinación de la especie. También tomó intervención la Fiscalía Rural y Ambiental de General San Martín, que quedó al tanto de las actuaciones. El operativo continúa en etapa de evaluación, con el objetivo de identificar al animal y definir las medidas necesarias para resguardar tanto la biodiversidad como la seguridad de quienes habitan y transitan la zona.

