Integrantes del directorio de Sameep recorrieron ayer junto a intendentas e intendentes de localidades que serán beneficiadas con la obra del Segundo Acueducto, la planta potabilizadora de Barranqueras.
El objetivo de la jornada fue compartir los avances e informar acerca de la pronta puesta en marcha de la megaobra que permitirá una producción de seis millones de litros de agua por hora.
El acueducto impactará en la mejora de la calidad de vida de más de 500 mil chaqueñas y chaqueños de 26 localidades, quienes tendrán garantizado el acceso al agua potable y saneamiento.
«La obra presenta un avance del 90% de ejecución en el primer módulo y esperamos hacer las pruebas de distribución en Charata el mes que viene, así poder tener agua provista sobre fines de septiembre o inicio de octubre», indicó el presidente de Sameep, Leonardo Aguzín.
De la recorrida participaron los intendentes Judith Gómez (de Los Frentones), Glenda Seifert (de Pampa del Infierno) y Raúl Maldonado (de Concepción del Bermejo).
«Es la obra más importante de la provincia por su magnitud e impacto, termina de configurar el mapa de producción de agua potable, con un fuerte impacto para el interior y el Gran Resistencia», sostuvo el titular de Sameep.
Aguzín recordó que en el centro y sudoeste chaqueño están emplazadas localidades que nunca han contado agua de calidad a través de un acueducto entre ellas Charata, Pinedo, Las Breñas y Napenay, «donde la obra marcará un antes y después» y además «estabilizará la producción y distribución en grandes ciudades como Villa Ángela y Sáenz Peña».
«Esta obra tiene tres partes fundamentales, por un lado está la toma del agua que está muy cercana al puente Chaco-Corrientes, luego vienen quince kilómetros de cañerías hasta la Planta Potabilizadora y finalmente la distribución del agua hacia las localidades de Sáenz Peña y las situadas en el centro-oeste, con 512 kilómetros de cañería», indicó.
Acompañaron la recorrida los vocales Raúl Acosta y Fabián Ríos; el gerente de Planificación Ricardo Requena; y el jefe de Zona II, Omar Chávez.
Ríos dijo ayer que «el segundo acueducto es una obra trascendental muy esperada que transformará la vida de miles de chaqueñas y chaqueños que nunca tuvieron agua potable».
«No solo estamos cerca de brindar agua, algo tan vital, sino que también sienta las bases para el desarrollo y crecimiento y la posibilidad que empresas se radiquen en estas localidades y generen empleo», agregó.
«Una solución definitiva para
el interior»
Maldonado, por su parte, valoró la invitación para conocer la infraestructura y señaló que esta obra será la solución definitiva para el interior del Chaco.
«Actualmente en la localidad solo tenemos una planta de ósmosis inversa, esto cambiará la calidad de vida de miles de habitantes, cualquier empresa para radicarse lo mínimo que pide es agua y luz, contar con esta obra culminada será auspicioso para el sector productivo y para el desarrollo y progreso de la localidad», expresó el intendente.
Seifert, por su parte, manifestó que en la localidad no hay agua potable, solo perforaciones, por lo que una vez culminado el acueducto el impacto será grandísimo en todo sentido.
«Porque el agua potable brindará una mejor calidad de vida y permitirá la instalación de industrias que otorgarán crecimiento y empleo para la zona», sostuvo la jefa comunal de Pampa del Infierno.
La semana pasada, los integrantes del directorio de Sameep en compañía del ministro Santiago Pérez Pons (de Planificación, Economía e Infraestructura) habían recorrido la planta junto a intendentes de localidades del sudoeste.