La institución fue perdiendo ingresos, especialmente durante la pandemia. Hoy su comunidad apela a la solidaridad de personas e instituciones para sostenerse.
Para cubrir los gastos mínimos de funcionamiento, la biblioteca popular Bernardino Rivadavia debe reunir unos $20 mil cada mes. Entonces su comunidad convocó a 20 vecinos de Resistencia o a firmas comerciales que pudieran donar $1.000 cada uno.
Por medio de un comunicado, desde la institución solicita ayuda a la comunidad al ser «la última biblioteca popular que se mantiene en funcionamiento en la capital de la provincia».
«Fundada el 28 de agosto de 1909, la biblioteca popular Bernardino Rivadavia es una de las poquísimas -si no la única- sobrevivientes que responden a la característica de instituciones ‘constituidas por una asociación de particulares’, como define la Ley Nacional 914, de 1870, por la que se crea la Comisión Nacional Protectora de Bibliotecas Populares (Conabip)», afirma el escrito.
Por tratarse de una ONG -una asociación civil sin fines de lucro-, se sostiene con los recursos que aportan sus socios y entidades interesadas en la educación y en el fomento de la cultura de sus conciudadanos. Porque una biblioteca popular es una institución autónoma, que no depende del Estado; aunque puede recibir apoyo estatal -y de hecho esto ocurre-, garantizado y controlado por abundante legislación emanada de casi todas las provincias argentinas e incluso de numerosos municipios del interior del país.
Desde la entidad afirman que «las circunstancias sanitarias actuales han tenido un impacto muy crítico en el desenvolvimiento financiero de la biblioteca, que -por un lado- ha dejado de recibir de Lotería Chaqueña, desde noviembre de 2019, el pago de la publicidad que realiza la biblioteca con el cartel colocado en su frente, en Pellegrini 80. Por otro, están interrumpidas las actividades de los cursos y talleres que representaban algunos ingresos regulares importantes».
Los gastos mensuales mínimos de funcionamiento ascienden aproximadamente a $20 mil. En síntesis, la biblioteca popular Bernardino Rivadavia necesita contar con al menos 20 vecinos o firmas comerciales dispuestos a invertir mensualmente un monto de aproximadamente $1.000, para afrontar las erogaciones imprescindibles.
La biblioteca está gestionada por una comisión directiva cuyos integrantes y colaboradores cumplen funciones en forma absolutamente ad-honorem.
«Esperamos ese necesario apoyo. Es imprescindible para la comunidad porque, además de ser un centro de lectura, esta biblioteca ha funcionado siempre como centro cultural y como sede para numerosas instituciones afines que carecen de local propio», apelan.
Con una gestión autónoma sus integrantes y colaboradores la mantienen en funcionamiento de manera ad honorem. Sin embargo, los salarios del personal y gastos de mantenimiento de las instalaciones se solventaban con una cuota solidaria que abonaban socios y tres instituciones: Lotería Chaqueña, Casinos Gala y la Mutual del Personal del Banco del Chaco.
ULTIMAS NOTICIAS
- Actividades turísticas, culturales y religiosas para Semana Santa en Chaco, la agenda
- “Festival de pases a planta, cayó el concurso de Capitanich”, dicen desde el Gobierno
- Trabajaba arriba de un techo y se electrocutó, Bomberos lo ayudó
- «Sinceramiento que apaga»: aumentos del 104% para usuarios medios y casi del 180% para el sector comercial
- Entró a un gimnasio, pero para robar
- Jueves Santo: a las 20 es la misa de la cena del señor
- Más operativos viales por el fin de semana extra largo
- La recesión golpea con todo: feroz caída de la coparticipación en el Chaco