Producción y texto: Silvio E. Buittoni
Con un 68,3% de los puntos que tuvo en disputa, producto de 18 victorias en 28 presentaciones, Villa San Martín volvió a armar una campaña para el elogio.
Tal como ya lo hiciera en la frustrada temporada 2019/20 -finalizada sin definición por la cuarentena producto de la pandemia del Covid-, cuando fuera el «1» del país, no solo de la Conferencia Norte, el Tricolor volvió a mostrar que es mucho, mucho más que un participante en la segunda categoría del basquetbol subcampeón mundial.
Un logro que se agiganta si se considera que lo hizo con un plantel con un muy fuerte sentido de pertenencia. Una muestra cabal de ello es que tres de sus habitualmente iniciales -Favio y Franco Vieta y Sebastián Picton- son chaqueños, el mismo origen de una o dos promesas jóvenes -como Pippen Pérez, por ejemplo- que sumaron minutos de calidad a la rotación del plantel.
Con el segundo mejor ataque de la Conferencia, el equipo dirigido por Gastón Castro, mostró varios puntos altos, como la burbuja que ganó en forma invicta en su estadio, lugar al que además, propios y extraños calificaron como una de las mejores, sino la mejor burbuja de las seis que se desarrollaron a lo largo y ancho del país.
Pero decir solo esto sería de alguna manera no valorar en su justa medida lo realizado por Villa San Martín. Es que el Tricolor, además de los rivales en cancha, tuvo el peor de todos -para todo el mundo- actualmente y es el Covid. Muchos de sus integrantes, incluidos jugadores y staff técnico, pasaron por esa muy mala experiencia y tras sortearla debieron volver al ruedo y seguir compitiendo.
Para ser justos en este sentido, fueron varios los equipos que atravesaron la «experiencia Covid».
FIGURAS
En el párrafo anterior se habló del poder ofensivo del que hizo gala Villa San Martín a lo largo de esta primera instancia.
Y el líder en ese sentido fue el polifuncional Sebastián Picton- hombre que ya conoce de ascensos más allá de que por aquí a veces no se tiene en cuenta esa condición- que cerró la fase regular con 445 puntos en 28 juegos, es decir un promedio de 15,89 tantos por juego más allá que en alguno de ellos el DT Castro prefirió darle un poco de descanso. Precisamente, Sebastián terminó con 899 minutos jugados, liderando también esa estadística.
En lo que hace a goleo, el segundo mayor romperredes del Tricolor versión Liga Argentina 2021, fue el base Martín Cabrera, quien en su regreso al club -luego de pasar incluso por la Liga Nacional (LNB)-, sumó 317 puntos.
El «podio» de goleadores lo completa Favio Vieta, con 304. Su hermano Franco, que no jugó cinco partidos por lesión, aportó 297 mientras que el estadounidense Anton Waters consiguió 289.
Pero todo el mundo sabe que hoy en día en el basquetbol no se valora el rendimiento solo por los puntos y en ese sentido la «valoración» -rubro estadístico surgido en los últimos años donde se incluye goleo, rebotes, asistencias y demás- fue dominada también por Picton, con 473. Lo escoltaron Favio Vieta, con 425 y Franco Vieta, con 348.
Los rebotes, uno de los rubros «de mayor peso», fue dominado por un perimetral, Favio Vieta, con 191 mientras que Waters capturó 159 y Picton, 147.
«Finalmente» las asistencias, otra pata importante del funcionamiento de cualquier equipo, también fue dominada por Favio Vieta, con 192, una más que las del base Martín Cabrera. Con 57, Picton completa este «podio».
Todos estos números no hacen más que ratificar algunas de las conclusiones que fueron surgiendo a medida que avanzó la temporada.
En ese sentido, hay que hablar de la «explosión» del menor de los hermanos Vieta, Favio, que irrumpió en el equipo no solo para hacerse un lugar entre los iniciales, sino también para guiar, en varias ocasiones, al equipo hacia el triunfo.
Estos números también ratificaron largamente la innegable injerencia-importancia que tiene para Villa un hombre como Picton. Él, junto a Franco Vieta, se reitera, conforman un dúo que suma y mucho para que el Tricolor haya terminado como terminó la fase regular: siendo el segundo mejor equipo del Norte.
Siri: «Estamos muy conformes»
Ricardo Manuel Siri es el presidente de Villa San Martín y él también le contó a LA VOZ DEL CHACO sus sensaciones acerca de esta otra muy buena producción del Tricolor. «Estoy muy contento, a pesar de todos los problemas que hay con todos los equipos y que es un campeonato totalmente atípico, que hayamos terminado segundos en la fase regular, estamos más que satisfechos», comenzó diciendo el presi del Tricolor.
«Ojalá Dios quiera podamos mejorar nuestro nivel de juego para los play off finales», formuló a modo de anhelo para luego agregar: «Siempre hay que agradecer; a Lotería Chaqueña sin cuyo apoyo no podemos hacer nada. A los sponsors que siempre nos apoyan, como Cetrogar, Hierros Líder, Corralón El Molino, Carsa -que se incorporó este año- Color Shop».
«También -prosiguió Siri en el agradecimiento- al Gobierno, al Instituto del Deporte Chaqueño».
«Y a los jugadores, por lo que se brindaron y van a dejar todo en la cancha para que Villa llegue lo más lejos posible», añadió en el cierre del agradecimiento el titular de Villa.
«Ojalá Dios quiera se corone lo que creíamos se podía concretar en la temporada que quedó inconclusa», cerró Ricardo Siri, el líder dirigencial de una camada de dirigentes que llegó y está haciendo historia, por gestión, en la tradicional entidad de la calle Saavedra.