Se registraron más de 500 personas en cada uno de los tres locales bailables habilitados para abrir sus puertas en la Termal con un total de 300 personas.
“Lamentamos ser noticia por fiestas en tres locales bailables de la ciudad”, dijeron los referentes de Padres en Ruta Sáenz Peña este lunes. De los locales se retiró un medidor de luz y la Policía labró actas de infracción “por excederse en el público que se había acordado previamente”, agregaron.
Además, precisaron que tampoco se respetaron las normas de bioseguridad básicas, “por videos viralizados y que hemos viralizado donde se puede observar nulo distanciamiento y barbijo, además de compartir el envase con bebida”.
Desde la agrupación esperan que “las sanciones sean severas, ésta es la única concientización que entienden”, aseguran.
Del otro lado, uno de los propietarios de los locales bailables inspeccionados se quejó del accionar policial y municipal y señaló, a modo de descargo, que “se acciona contra los trabajadores y contribuyentes en vez de ir a las fiestas clandestinas que son los eventos que hay que castigar. Nosotros sólo tratamos de seguir después de tanto tiempo, para poder saldar deudas inmensas acumuladas, por la ineficiencia de nuestros gobernantes que se lavan las manos y aplican políticas de castigo al que trabaja y produce”, se quejó.
Se trata de un “atropello a nuestros derechos”, asegura el propietario de Timotea, German Aiquel. “Los controles se realizaron en los locales bailables, pero nadie habla del descontrol en la avenida 33, en las fiestas clandestinas, esto es molestar al que trabaja”, y reiteró su enojo porque el sector debido a la pandemia hace más de un año y medio está sin poder trabajar.