Más de 70 instituciones deportivas ya forman parte del programa que garantizará el acceso al deporte a miles de niños, niñas y adolescentes del Chaco. Representantes de dos fundaciones anotadas cuentan su situación y el impacto que podría llegar a tener la implementación del programa.
El Ministerio de Desarrollo Social recuerda que hasta el 20 de mayo estarán abiertas las inscripciones para clubes deportivos de la provincia. Más de 70 instituciones ya forman parte del programa que garantizará el acceso al deporte a miles de hijos e hijas de titulares de Renta Mínima Progresiva.
La tarifa social deportiva consiste en una inversión que destina el Ministerio de Desarrollo Social para que los chicos y chicas de la provincia de 5 a 18 años accedan a practicar deportes en los clubes de sus barrios y localidades. El monto de 800 pesos mensuales que abona la cartera por cada niño inscripto va directo a los clubes, con el fin de que estos puedan refaccionar sus instalaciones y servicios, así como pagar a sus profesores e incorporar personal.
“Nuestro objetivo es que los niños y niñas de la provincia accedan a practicar deportes y que tengan momentos de esparcimiento para garantizar sus infancias felices”, aseguró la ministra de Desarrollo Social, Pia Chiacchio Cavana. También explicó que los clubes son aliados indispensables para que los chicos se puedan formar en espacios seguros y alejados de los peligros de la calle, como del consumo problemático de sustancias o el embarazo en la adolescencia.
En esta primera etapa el Ministerio de Desarrollo Social y el Instituto del Deporte Chaqueño elaborarán un registro único de los establecimientos inscriptos y las actividades que prestarán. Los clubes podrán registrarse a través del correo [email protected], o en la sede del Instituto del Deporte Chaqueño.
Una vez finalizado ese período, se hará público el registro para que los beneficiarios y beneficiarias de Renta Mínima Progresiva puedan acceder a las ofertas de los clubes e inscribir a sus hijos e hijas brindado sus datos a Desarrollo Social para certificar la prestación del servicio deportivo. Los clubes proveerán mensualmente de una nómina de inscriptos para que el ministerio realice el pago de la tarifa social deportiva.
Testimonio de algunos clubes que ya se sumaron
El Ministerio Desarrollo Social se comunicó con dos referentes de clubes barriales de la provincia para charlar sobre la situación de sus instituciones y el impacto que podría tener la tarifa social deportiva en el mejoramiento de los espacios de contención de niños y niñas.
Verónica Portillo es referente de la Fundación Sporting de Barranqueras, ubicada en la avenida Edison al 4300. En diálogo con la cartera social contó que la institución se creó hace 12 años por una necesidad de que los niños y niñas de la zona contaran con un lugar para actividades recreativas que los alejara de la calle.
La Fundación Sporting es un potrero de barrio que actualmente tiene una cancha de fútbol 9 y un pequeño salón utilizado como cocina y depósito. Al club asisten aproximadamente 90 niños de 4 a 17 años para practicar fútbol, hockey y voley, además de recibir una merienda al finalizar sus entrenamientos.
Portillo comentó que desde la fundación también se realiza una liga infantil gratuita para tratar de contener a los niños que asisten a los diferentes clubes barriales de la zona, a los que no cobra cuota ni inscripción. “La idea es mantener a los niños haciendo esta linda acción que es jugar al fútbol”, explicó la referente.
Además, la institución brinda otras actividades para las familias como talleres de peluquería y repostería, dados por personas capacitadas, y una maratón solidaria anual para reunir útiles escolares para los niños y niñas que asisten a la institución.
La referente de la Fundación Sporting aseguró que la implementación de la tarifa social deportiva tendrá un gran significado porque permitirá que las instituciones que no cobran una cuota social puedan crecer de forma institucional y en infraestructura para mejorar sus servicios. En su caso, esperan que la inversión les permita hacer los baños, vestuarios y el cercamiento de los predios.
“Nosotros estamos sobre la avenida Edison que es muy transitada y los niños sin darse cuenta salen corriendo detrás de la pelota, lo que significa un riesgo para ellos y para nosotros como institución”, comentó Portillo. Agregó que creen que la tarifa social va a beneficiar de una manera favorable a la institución permitiéndoles construir un espacio más seguro para los chicos.
Otra de las instituciones adherentes es la Fundación Conservar Raíces, una organización ubicada en la Ruta 11 al 1009, que el año pasado obtuvo su personería jurídica luego de una breve interrupción de sus actividades producto de la pandemia. Según comentó Rodolfo Godoy, uno de sus responsables, actualmente son entre 40 y 50 las personas que acuden a las actividades que presta el club, y que se siguen sumando cada vez más personas.
Para los niños, niñas y adolescentes la fundación tiene para practicar fútbol, voley y hockey, mientras que para las familias y adultos brinda actividades aeróbicas, como zumba y gimnasia funcional. Godoy explicó que el predio donde desempeñan estas prestaciones es alquilado y contiene una cancha de fútbol 11 y dos de fútbol 5.
“Como es una zona de muy bajos recursos es imposible cobrar una cuota mínima a las personas que asisten al club”, explicó el referente. Además añadió que les cuesta suplir los gastos “porque además de pagar el alquiler, debemos mantener en condiciones el lugar y las canchas, más los gastos administrativos”. Otro gasto significativo de la fundación es la compra de materiales para los talleres de pintura o dibujo que se realizan con una periodicidad de quince días para la recreación de los chicos y chicas que asisten al lugar.
El referente de la Fundación Conservando Raíces expresó que la implementación de la tarifa social deportiva ayudará al club para afrontar sus gastos y como incentivo para las instituciones deportivas que, como en su caso, recién están comenzando.