El gobernador Jorge Capitanich y la vicegobernadora Analía Rach Quiroga entregaron ayer en Juan José Castelli 40 viviendas ejecutadas a través del programa Techo Digno.
«Emociona entregar nuevas viviendas porque es el derecho que todas y todos deben tener», indicó el mandatario.
Las unidades habitacionales, que demandaron una inversión de $55 millones, fueron ejecutadas en un plazo de siete meses en los que se generaron 70 puestos de trabajo. «Cuando construimos una vivienda ponemos en marcha un proceso productivo que significa oportunidades de empleo y la activación de los diferentes sectores ligados a la construcción», remarcó Capitanich.
Estas unidades habitacionales forman parte del proceso de reconstrucción que el gobierno nacional comenzó a finales de 2019 junto a los gobiernos provinciales. «Cuando Mauricio Macri asume la presidencia argentina deja inconclusas 55 mil viviendas en toda la Argentina, de las cuales 4.492 estaban en el Chaco. El presidente Alberto Fernández está trabajando para reconstruirlas», señaló.
El jefe del Ejecutivo advirtió que resolver las demandas concretas de los pueblos es conformar un Estado cercano. «Reparar una deuda histórica es lo mejor que le puede pasar a un gobernante, cuando abren la puerta de su nuevo hogar, se abre una nueva etapa de la vida familiar», celebró.
Acompañaron el intendente Pío Sander; la ministra de Seguridad y Justicia, Gloria Zalazar; el presidente del Instituto provincial de Desarrollo Urbano y Vivienda (Ipduv), Diego Arévalo; el presidente del Instituto Provincial para la Inclusión de las Personas con Discapacidad (Iprodich), José Lorenzo; y otras autoridades.
«Garantizar derechos»
La vicegobernadora recordó que el plan Chaco 20/30 establece como prioridad el derecho al acceso a la vivienda y el acceso a un trabajo digno. «Hasta hace poco pudimos ver una foto, que era la foto que mostraba construcciones de viviendas completamente abandonadas. Esa imagen debemos tenerla presente porque marca cuáles fueron las prioridades de otro gobierno (haciendo referencia a la gestión de Mauricio Macri) que decidió mirar para otro lado, un gobierno insensible que lo caracterizó el abandono, la desidia y un fuerte centralismo», señaló.
Rach Quiroga recordó que su ciudad natal tuvo una transformación desde la primera gestión de Capitanich en 2007. «Son muchas las obras y no nos alcanzará el tiempo, pero Castelli antes padecíamos la falta de agua y así Capitanich comenzó la construcción del acueducto y tuvimos agua en cantidad y de calidad, un derecho humano fundamental postergado por tanto tiempo», remarcó y mencionó otras obras como la construcción del Hospital del Bicentenario, viviendas, pavimento, obras de energía eléctrica que mejoraron la calidad de vida de los pueblos de El Impenetrable.
El intendente Sander, en tanto, marcó la importancia de retomar la obra pública en el Chaco. «Es un hecho muy importante para nuestra localidad, la reactivación de la obra pública es fundamental para la actividad económica», explicó.
«Trabajar
por lo que falta»
Arévalo destacó que de las 40 viviendas, cuatro fueron adjudicadas a personas con discapacidad, dos para el grupo etario joven y 34 para las familias con hijas e hijos.
El funcionario informó que en la provincia aún hay 28 mil familias que están esperando sus viviendas, debido a ello explicó la importancia que todas las familias que reciben una vivienda abonen, en la medida que les sea posible, la cuota social, ya que es a través de esta que se va a llegar más rápido a las chaqueñas y chaqueños que faltan.
«Sabemos que es imprescindible que el Estado impulse el derecho a acceder a una vivienda propia, si los gobiernos no acompañan esta política es muy difícil llegar y prueba de esto es lo que sucedió en la última gestión presidencial de Macri», remarcó e informó que se trabaja en distintos puntos de la provincia de una manera acelerada con el fin de recuperar el tiempo perdido y que más familias puedan acceder a una vivienda.
Entrega de patrulleros
Ayer, el gobernador entregó también seis patrulleros, cinco para reforzar el servicio en Castelli y uno que se destinará a la comisaría de Fuerte Esperanza, además de catorce uniformes para los efectivos de la División Infantería.
Los vehículos demandaron una inversión total de $21 millones que incluyó todo el equipamiento policial (equipos lumínicos, ploteado y equipos de comunicación).