El recorrido de la marcha abarcó distintos organismos del Estado, donde se manifestaron bajo diversas consignas. Las columnas marcharon desde el campus de la Unne, por avenida Las Heras hasta 9 de Julio; para luego dirigirse al Municipio de Resistencia; al Superior Tribunal de Justicia y al Tribunal Oral Federal, para terminar en Casa de Gobierno con la lectura del documento colectivo.
En esta edición, la Multisectorial Feminista Chaco destacó «la unidad de les trabajadores por una Argentina democrática y feminista para no retroceder» como el camino de lucha.
Mediante un documento, la Mesa Multisectorial Feminista repudió las «acciones represivas sobre la protesta social» en Misión Nueva Pompeya y se quejaron de los cortes de calles de quienes se manifestaron contra la cuarentena o la expropiación de Vicentín.
Diversos carteles, diversas historias y diversos reclamos, así inició esta mañana la movilización de un importante número de mujeres que comenzó a marchar desde las 8 en inmediaciones de la Universidad Nacional del Nordeste pasando por distintos edificios de poderes del Estado.
«Las mujeres trabajadoras, indígenas y disidencias paramos y nos movilizamos en el marco del Paro Internacional por el día de la Mujer Trabajadora, para repudiar a los poderes fácticos, históricamente proscriptores de la voluntad popular, cómplices de genocidas y detractores de las conquistas del pueblo», comienza el extenso documento que la Mesa Multisectorial Feminista Chaco
Las mujeres reclamaron por los salarios, jubilaciones y asignaciones que «acrecientan las brechas de desigualdad, la angustia y bronca de las mujeres y el pueblo». «Hoy una familia tipo necesita $ 163.539 para no ser pobre y $ 72.043 para no ser indigente», resaltaron.
El documento también cuestiona al expresidente Mauricio Macri, pide una reforma judicial, llama «viciado y machista» al Poder Judicial y repudia el «intento de femicidio» contra la vicepresidente Cristina Kirchner de quien dijeron que su condena por corrupción en la causa Vialidad es una «proscripción». «En nuestro país cada 36 horas se producen femicidios, travesticidios, y crímenes de odio», denunciaron también.
«Disciplinar, en este caso con una dosis de misoginia, a quienes se atrevan a construir un modelo de conducción que abrace al pueblo y sus intereses, ha sido la tarea sistemática de las derechas en toda Latinoamérica», dijeron sobre la condena en la causa Vialidad y apuntaron contra medios de comunicación.
Sobre la protesta social exigieron al Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial «el desmantelamiento de toda doctrina represiva de las Fuerzas de Seguridad. Ya no hay lugar para las acciones represivas sobre la protesta social, sobre las demandas más elementales como la vida misma. Exigimos respuestas inmediatas, reparación urgente ante el abuso policial y la utilización del monopolio de las armas contra las poblaciones más vulneradas de nuestro país, como son las comunidades originarias y las mujeres indígenas que siguen siendo objeto de la triple discriminación y vulneración de derechos; ejemplo de esto fue lo acontecido el fin de semana en la localidad de Misión Nueva Pompeya».
Sin embargo, tomaron distancia de los «sectores políticos oportunistas antipopulares» que «cortaron calles y quemaron barbijos en contra de la cuarentena en plena pandemia mundial, poniendo en riesgo miles de vidas, o a favor de la estafadora Vicentin, y no dicen nada de la estafa millonaria contraída por Macri de 45 mil millones de dólares».
Chaco tiene la mayor asistencia en violencias
por razones de género en todo el NEA
Pasaron seis años desde el primer #8M convocado como Paro Internacional de Mujeres en el año 2017 como respuesta a la escalada de violencia contra las mujeres y las disidencias. Desde allí, año tras año, las consignas se acumularon, los reclamos crecieron, siempre guardando cierta similitud con las de los años anteriores, porque el pedido sigue siendo el mismo: basta de violencia machista en todas sus formas y expresiones.
Las estadísticas de femicidios y de denuncias por casos de violencia de género comenzaron a visibilizarse aún más. Si bien las cifras pueden parecer frías, nos permiten saber desde dónde partimos, dónde estamos parados, qué hicimos y qué resta por hacer, porque siempre resta por hacer, porque siempre se debe hacer más. «Chaco fue la provincia en la que más demandas se atendieron en todo el NEA, con un total de 3,2% del total de la región, esto equivale a que 21.468 residentes chaqueñas atravesaron una situación que las obligó a pedir ayuda»
El Sistema Integrado de Casos de Violencia por Motivos de Género (SICVG) perteneciente al Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidades de la Nación, presentó días atrás el informe estadístico 2022 con información que recopila el total de casos entre el 2013 y el 2022.
Cuenta con un total de 669.339 personas asistidas y consultas realizadas en todo el país durante el año pasado, hasta el 31 de diciembre de 2022. De este total la amplia mayoría fueron personas que recibieron asistencia (73,1%) y las restantes se comunicaron para realizar consultas al SICVG.
Chaco fue la provincia en la que más demandas se atendieron en todo el NEA, con un total de 3,2% del total de la región, esto equivale a que 21.468 residentes chaqueñas atravesaron una situación que las obligó a pedir ayuda.
Por su parte, Corrientes tiene el 1,5% que representa a menos de la mitad de las asistencias de Chaco (10.230); Misiones 2,7% (17.835) y, muy por debajo, Formosa 0,7% con 4.599 demandas.
Las tres provincias del NEA, con características sociales similares, que hacen que las necesidades también sean parecidas, incluso en materia de violencia por razones de género, ponen a Chaco a la cabeza de las políticas públicas de avance para el abordaje y asistencia de las demandas.
Si bien, se siguen reclamando perfeccionar el sistema de atención a víctimas, existe un sistema. A diferencia del resto de las provincias del NEA con escasa de la temática y escazas políticas públicas vinculadas.
La Policía sigue siendo la institución
más optada para pedir ayuda
En este mismo informe también se registraron las distintas instituciones que intervinieron en situaciones de violencia. Esto demostró que las personas continúan tomando a la policía como primer espacio de ayuda, ya que fueron prácticamente la mitad del total (49,5%) quienes acudieron a la intervención policial.
Por detrás quedaron la intervención de servicios de Justicia con el 43,7%, de centros de salud con 24,6% y de dispositivos de protección integral con el 5,2% que, si bien es la cifra más baja, refleja la demanda de la población a herramientas asistenciales y comprueba la apertura hacia nuevos canales de recepción de denuncias o consultas.
Esta asistencia estatal por violencia de género está disponible en Chaco a través de una plataforma víctimo-asistencial, que funciona realizando un abordaje integral en cada caso de violencia por razones de género reportado.
Se accede a través de una llamada a la guardia de 24 horas al (362) 4970852 o a la línea 137. Una vez tomada la denuncia se despliega una asistencia integral con trabajo articulado con los municipios, comisarías, centros de salud y áreas específicas del Ministerio de Desarrollo Social.