El Ejecutivo provincial se constituyó ayer, como querellante en la causa del chapista Ramón Antonio Ramírez, asesinado afuera de un quiosco en Fontana. «Queremos acompañar a la familia, víctima de este hecho aberrante, que la pone en un estado de vulnerabilidad», indicó el subsecretario de Derechos Humanos del Ministerio de Gobierno, Hugo Maldonado, quien se presentó en la Fiscalía de Investigación Penal 13, a cargo de Víctor Recio, junto al equipo de abogados encabezado por los doctores Germán Dellamea y Adriana Acevedo.
Maldonado informó que la participación del Ejecutivo en la causa fue tras las instrucciones del gobernador Leandro Zdero y del ministro de Gobierno, Justicia, Trabajo y Derechos Humanos, Jorge Gómez.
«Hay pruebas suficientes para sostener la detención de las dos personas imputadas, el Estado aportará todas las pruebas que estén a su alcance para que se haga justicia», aseguró tras presentar la solicitud de querella.
El caso
Ramón Antonio Ramírez (58) era chapista de autos, y fue asesinado a tiros para robarle la moto, el domingo 1 de septiembre afuera de un quiosco ubicado en la avenida Alvear al 3000, en Fontana.
Por el hecho se encuentra detenido Ángel Damián Cabral Barrios (26), apodado Bati, con un historial criminal que acumula al menos 30 causas, y su pareja Agustina Alejandra Fernández (22).