El ministro de Seguridad del Chaco, Hugo Matkovich, expresó su postura respecto a la lucha contra el narcotráfico durante una entrevista en el programa «El radar», emitido por InfoDRadio 106.3 FM, con la conducción del periodista Facundo Sagardoy.
En ese contexto, sostuvo: «Queremos instalar una lucha sin cuartel contra el narcotráfico, con todos los poderes del Estado involucrados».
Matkovich remarcó que su propuesta se enmarca en el debate actual sobre la seguridad en las provincias del Nordeste Argentino, en un escenario cada vez más tensionado por la presión del crimen organizado en las zonas de frontera ubicadas al noroeste del país.
Asimismo, insistió en la necesidad de coordinar esfuerzos entre jurisdicciones provinciales y nacionales para enfrentar de forma integral el tráfico ilegal de drogas.
POSIBLE DESPLAZAMIENTO DEL CRIMEN
Consideró que la región del Noreste Argentino permanece vulnerable frente a los desplazamientos de las bandas criminales, especialmente cuando se intensifican los controles en otras zonas del país.
En ese sentido, señaló: «Si se sigue implementando el plan Güemes con mucha fuerza en el Norte Argentino y se presiona a las bandas en la zona del Noroeste y la Triple Frontera, nos queda esta parte un poco desguarnecida».
El ministro expresó su preocupación por la actividad del narcotráfico en zonas específicas como Ituzaingó, Itatí, El Cerrito y áreas limítrofes de Formosa, lugares identificados como pasos clave para el ingreso de drogas al país.
En su análisis, el titular de la cartera de Seguridad del Chaco, advirtió que sin una presencia efectiva del Estado en esos territorios, las organizaciones criminales continuarán explotando rutas alternativas para el contrabando.
En esa línea, Matkovich señaló que ha solicitado formalmente a la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, que se refuercen los operativos de control en la región chaqueña.
Según indicó, se trata de una cuestión estratégica para «resguardar la soberanía y la integridad territorial» de la Argentina.
Afirmó que «el trabajo hay que hacerlo de manera regional» y subrayó la importancia de la cooperación entre provincias y con las fuerzas federales.
Entre las acciones propuestas, el ministro destacó la instalación de nuevas unidades de Gendarmería Nacional y la posible intervención del Ejército Argentino en zonas críticas como El Cerrito y La Leonesa.
Autonomía regional y coordinación federal
El ministro de Seguridad, Hugo Matkovich, se definió como un «defensor de las autonomías regionales» y remarcó que la seguridad no puede ser abordada de forma fragmentada.
El titular de la cartera de Seguridad del Chaco enfatizó que los desafíos vinculados al narcotráfico requieren una estrategia articulada, que contemple tanto los recursos federales como la experiencia y conocimiento local.
«Cada uno defiende lo suyo, y no puede ser que nosotros estemos mirando cuando tenemos una fuerza preparada para resguardar la frontera», expresó.
El ministro sostuvo que el problema del narcotráfico debe ser entendido también como una cuestión de geopolítica interna, ya que el reacomodamiento de los controles en distintas partes del país impacta directamente en los corredores de ingreso de sustancias ilegales. «La droga va a seguir entrando desde Ituzaingó, Itatí, El Cerrito, Formosa…», alertó.
En ese contexto, reiteró su preocupación por los vacíos de control estatal que podrían ser aprovechados no solo por bandas delictivas, sino también por fuerzas armadas extranjeras que, según dijo, han interferido con las actividades de pescadores argentinos en zonas de frontera.
«Eso hay que cortar», subrayó, en alusión a eventuales conflictos por la soberanía fluvial y la seguridad en áreas limítrofes.
Matkovich recalcó que la seguridad territorial no solo implica combatir el narcotráfico, sino también prevenir situaciones de tensión con otros países vecinos.
En este punto, propuso que las fuerzas armadas argentinas puedan tener un rol más activo en el cuidado de la frontera, siempre bajo coordinación del poder civil.
Asimismo, resaltó la importancia de actuar con firmeza para impedir que «pequeñas bandas» se instalen en el territorio y avancen sobre comunidades locales. Afirmó que «los argentinos merecen vivir con seguridad» y que «no puede haber zonas liberadas ni territorios donde el Estado esté ausente».
El ministro consideró que las provincias del noreste deben ser parte activa del diseño de políticas de seguridad y prevención, evitando que las decisiones se tomen únicamente desde los centros urbanos más grandes del país.
«Tenemos que instalar un modelo regional de seguridad, adaptado a nuestras realidades geográficas y sociales», concluyó.
Finalmente, sostuvo que el fortalecimiento de la presencia estatal en la frontera permitirá también una mayor protección de los recursos naturales, las rutas fluviales y la actividad productiva local. Destacó que «el objetivo es resguardar lo nuestro» y «construir una seguridad con sentido federal».