Por Silvio Buittoni
San Martín de Corrientes venció el lunes por la noche a Regatas por 79-67 con una clara muestra de superioridad que se extendió a lo largo de los 40 minutos del partido.
Con un juego de equipo sólido, el Rojinegro, no dejó dudas y con ventajas de hasta 16 se llevó el segundo punto de la serie de Reclasificación -octavos de final- que protagoniza con el Fantasma.
Méndez, con 19 puntos -incluidos 4 triples- fue el goleador del cotejo desarrollado ante otro imponente marco de público en el «estadio de los sueños». En el local, Jaime cerró su casillero con 15.
La serie ahora se traslada al Fortín Rojinegro mañana.
ROJINEGRO DESDE
EL VAMOS
La paridad esperada para semejante compromiso solo se dio en el primer cuarto más allá que ya allí San Martín llegó a tener una ventaja de 5 liderado por Grun (15) y Garello (7), este viniendo desde el banco. Pero apareció -por única vez, ya que luego se sentó y no regresó al rectángulo de juego- Aguirre (3) y así el 17-17 iguales de esos primeros diez dejaban abierta la posibilidad a la tan esperada lucha.
Pero en el segundo, en el Rojinegro emergió Méndez (19, 14 acá!) y con puntos de todos los colores y mucha solvencia -traducida en alguna asistencia- llevó a que San Martín se escapara hasta por 15: 40/25. Una ráfaga de Jaime (15, 7 en este período) y Thomas (13, 7 aquí), más alguna bomba oportuna, hicieron que el primer tiempo se cerrase con solo 44-39 a favor de la visita.
Esa levantada del local en el cierre del segundo cuarto, fue una alerta para Sanma, que volvió del descanso largo con la misma intensidad mostrada en gran parte del primer tiempo; así con muy buena defensa y las apariciones decisivas de Grun (8 acá) y Hunt (9, 7 aquí), fue construyendo la ventaja que luego sería la máxima: 61-45.
Todo ello ante un Regatas perdido cuya mejor definición bien pueden ser los pobres 10 puntos que consiguió en este cuarto. En el último parcial, Regatas -con su «segunda unidad»- volvió a mostrar cierta reacción y abrió un 5-0 que lo acercó un poco.
Pero Sanma encontró en Botta (7, incluido un hermoso «ganchito» estilo años 70), lo necesario para mantener la ventaja en la decena de puntos.
El Remero, lejos de entregarse, siguió buscando y con varias bombas -2 de Gramajo (10)-, intentó acercarse pero enfrente estaba un San Martín dispuesto a no soltar la presa y entonces el 79-67 se selló mucho antes de la chicharra final, ya que el local tuvo tres malas selecciones de tiro y permitió un «enésimo» rebote ofensivo que lo condenó.
El Riachuelo de Corbalán y Vieta se puso match point
Riachuelo, el Eterno, se llevó un gran triunfo 98-85 ante Unión de Santa Fe y puso la serie 2-0 a favor. Los goleadores del partido fueron Reginald Becton y Juan Pablo Corbalán, ambos con 19 puntos.
Riachuelo arrancó arriba en el marcador con Reginald Becton haciéndose fuerte en ataque. El norteamericano tomó gran protagonismo en la primera mitad para que el Eterno se vaya al descanso largo 50-41 arriba.
Los dirigidos por Sebastián González supieron mantener la ventaja, y además repitieron -durante tres cuartos- el mismo goleo de Unión que en el partido pasado, logrando así que no aumente el score.
Lo mejor del Tatengue pasó por Morrison (22 puntos) y Bombino (18), pero Maximiliano Seigorman no pudo encontrarle la vuelta al partido junto a sus dirigidos, y de esta manera cayó en su segunda oportunidad.
En la segunda mitad fue Juan Pablo Corbalán quien brilló en el conjunto local, y también alcanzó los 19 puntos junto a Becton. Además, los tiros de tres puntos de Krayem y Aguerre, que sentenciaron el partido 98-85.
En el ganador, también fue de la partida, saliendo en el quinteto inicial, el otro chaqueño recientemente llegado a La Rioja, Franco Vieta, quien colaboró con 2 puntos en los casi 15 minutos que estuvo en cancha.
Ahora la serie se traslada a Santa fe, donde mañana se jugará el tercer punto a partir de las 20.30.