Hindú Club y Villa San Martín,los clásicos rivales del basquetbol local volverán a verse las caras hoy desdelas 21.30 en lo que será el cuarto juego de la serie final que define alcampeón del «Apertura 2025 de la primera división de la Asociación deBasquetbol de Resistencia (ABR).Como se sabe, ambos ya se midieron hasta aquí entres ocasiones en el marco d ésta serie pactada al mejor de cinco, con dosvictorias para el Tricolor y una para el Verde. Precisamente, la definición del primer torneodel año de la ABR comenzó con dos triunfos de los de la calle Saavedra. Precisamente allí, el ganador de la Fase regular mantuvo su invicto comenzandoesta serie final con un claro triunfo por 80-63. Días después, en el mismoescenario, el tricolor repitió victoria imponiéndose en suplementario por 79-74tras igualar los cuarenta reglamentarios en 66.Finalmente, el pasado viernes, la serie setrasladó -respetando el dibujo de 2/2/1 de la serie- al estadio donde hoyvolverán a verse las caras. Y allí, la victoria quedó en manos de Hindú -por unajustado 71/69- que de ésta manera no solo se mantuvo con vida, sino que ademáscortó el invicto que hasta allí ostentaba el tricolor.
LOS PROTAGONISTAS
Sin dudas que ésta final del «Apertura 2025» de la primera de la ABR puso frente a frente a los dosmejores equipos del certamen. Villa, por su lado, llegó a ésta instancia en base a un juego colectivo donde se nutrió de sus locales en un principio paraluego sumarle a dos de sus recientes «Liga Argentina» -Favio Vieta y JoaquínMarcón para buscar con aún más ahínco el título que el año pasado se le escapó-literalmente- de las manos después de estar 2-0 arriba en la final. Pero el Tricolor mostró que es mucho más que sus «Liga Argentina» ya que hasta su llegada los que mantuvieron a los de la calle Saavedra decididamente en el rol protagónico fueron, entre otros, los experimentados Alejo Toledo, Bruno Alvarez y Pablo Brocal amén de Rodrigo Guisasola. Junto a ellos, la sangre joven de Camisasca, Páez o Encinas, entre otros, alargaron el plantel para que así pudiese desplegar su filosofía de juego de mucha intensidad.
En la vereda de enfrente, mientras, Hindúmostraba inicialmente una cara bastante irregular, incluso por debajo de lo quese puede esperar dado su plantel. Así, el Verde -con una dolorosa derrota ante Regatas en su propia casa incluida-, finalizó la Fase Regular en el tercer lugar. Tras ello, Hindú mostró un notable crecimiento que comenzó a vislumbrarse en cuartos ante Sarmiento -al que barrió 2/0- y se ratificó luego en semis, donde también barrió, ahora a Regatas.
Pero en el inicio de la serie final, volvieronlos fantasmas y entonces pareció que la serie podía definirse rápido. Ello fuerápidamente desmentido por los dirigidos por Cequeira en el segundo chico de lafinal cuando llevaron hasta un suplementario al hasta allí aun invicto Villa.Finalmente, el pasado viernes, en su colmado estadio, Hindú volvió a darmuestras de su potencial y ganó -si bien ajustadamente, pero lo hizo- paraforzar el juego que se desarrollará nuevamente en su estadio esta noche. Para lograrlo se asentó en una descomunal tareade un Maglier que hasta entonces había tenido escasa participación. Pero elpolifuncional no estuvo solo, porque sobretodo en ésta parte definitoria deltorneo, Santiago Barreto mostró porqué se lo trajo para jugar ya la LigaFederal. Con Maxi Barrios y Alvaro Ghidini mostrando lo que pueden aportardesde el perímetro, amén de la experiencia de Mauro Coronel y todo lo que sabesumar Lucas Coronel -crucial para «secar» al goleador del primer chico de éstaserie en el segundo, Favio Vieta-, Hindú se potencia más con lo que traen desdeel banco Hoferek o Santiago Rath. Así, con todos estos nombresy antecedentes lo que se puede esperar para esta noche es que Verdes yTricolores vuelvan a entregar un juego de alto vuelo, sino en lotécnico-táctico, al menos en lo emotivo.
