«La universidad tiene un papel central en los procesos de producción para el desarrollo en el marco de la nueva globalización», afirmó el economista, docente, doctor en Ciencias Sociales y ex ministro de Desarrollo Productivo de la Nación, Matías Kulfas, en la conferencia magistral que dio el pasado lunes 3, en la sede central que tiene la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional del Nordeste (Unne), en el campus de Resistencia.
El economista disertó ante un auditorio en el Aula Pyme del Centro Pyme (Pequeña y Mediana Empresa) de Ciencias Económicas, en el marco de una nueva jornada una vista institucional que incluyó reuniones de trabajo orientadas a intercambiar experiencias, fortalecer redes académicas y explorar acciones conjuntas entre la facultad, el Instituto de Políticas para el Desarrollo Regional (Ipoder) y la Universidad Nacional de San Martín (Unsam).
Kulfas fue recibido por la decana Moira Carrió, a quien acompañaron las autoridades de Ciencias Económicas. La máxima responsable de la casa de altos estudios enseñó al economista la facultad, sus distintos aspectos institucionales y la sede edilicia; además fue quien lo presentó al momento de la conferencia.
«Las universidades permiten entrenar las cabezas de los estudiantes para afrontar los nuevos desafíos, para el cambio. Este es el punto central. Además de formar, las universidades entrenan a las cabezas para afrontar los cambios», insistió.
«Estamos viviendo un momento donde afrontar estos nuevos desafíos no van a poder ser afrontados sin educación. Hay que ponerle una ficha muy fuerte a la educación. Es clave», consideró Kulfas.
Sinergia conocimiento-producción
«Estamos en un contexto donde la empresa tal como la conocemos empieza a modificarse, atrás quedan las estructuras con relaciones piramidales, y es tiempo de redes. Redes de funcionamiento entre diferentes emprendedores, compartiendo informaciones, y la Inteligencia Artificial (IA) como sustento generando nuevas ideas de negocios», explicó Kulfas.
«El contexto actual nos lleva a pensar ante desafíos y encararlos colectivamente. Es clave la presencia de la política pública para orientar y estimular los cambios productivos que se van sucediendo», destacó el economista.
«La universidad tiene un papel central ante este proceso del desarrollo productivo en la nueva globalización. Tanto por la formación educativa, que significa enseñar a pensar, y, por otra parte, la investigación, el desarrollo y la transferencia de tecnología al mundo productivo», consideró el ex ministro nacional.
«Algo clave en esta etapa es que la Universidad tiene que trabajar estrechamente en la investigación con las empresas, con los emprendedores, para poder, entre ambas visiones, estructura lo nuevo», reflexionó.
«Los países que más avanzaron son aquellos en los cuales se vincularon estas dos esferas que son universidad y empresas-producción-emprendedores. Esta sinergia es importante en este nuevo tiempo», sostuvo y agregó: «El éxito puede estar en alcanzar la armonización entre la innovación tecnológica, la utilización de los recursos naturales y la necesidad del trabajo humano».
NEA en contexto
En esta nueva globalización, con distintos desafíos por delante, el Nordeste Argentino (NEA) «tiene un potencial que está intacto». Para Kulfas, «este estatus está muy marcado por los recursos naturales que tiene la región, las capacidades tecnológicas que dispone, las universidades públicas con sus aportes importantes».
«Uno desafío enorme en la región es la de crear una base empresaria más sólida. Uno mira las estadísticas de empresarialidad hay en el NEA, probablemente, dos o tres veces menos cantidad de empresas cada mil habitantes que el gran Buenos Aires.
Hay que trabajar en que muchos jóvenes universitarios puedan transformarse en emprendedores. Aquí es importante la Universidad, cumpliendo un doble rol, formando profesionales y también incubadoras de pequeños emprendedores tecnológicos», indicó.
IA y geopolítica
«Tenemos un escenario internacional muy cambiante, donde se están produciendo modificaciones a nivel tecnológicos con el auge de la robótica y la Inteligencia Artificial (IA), la digitalización, pero por sobre todas las cosas la competencia geopolítica con un gran ascenso de China y los Estados Unidos reaccionando ahora con una estrategia muy eruptiva respecto al avance chino», describió Kulfas.
«Es un contexto que implican desafíos muy grandes en todos los países del mundo, especialmente Argentina con tantos recursos naturales, con procesos en marcha de industrialización y en tecnología», diagnosticó. «La Argentina tiene algunos problemas.
Uno, es el contexto muy desafiante donde tiene que plantearse cómo insertarse, cómo producir en este mundo tan cambiante y cómo aceptar los desafíos tecnológicos», explicó.
«Acá tenemos una agenda muy signada por el corto plazo, ya que somos lamentablemente un país que no tenemos resueltos muchos problemas que otros estados vecinos sí tienen.
Pese a que, por suerte, bajó mucho tenemos una inflación todavía muy alta y que sigue siendo importante. Nos falta un sendero de estabilidad, estamos cada seis meses con problemas cambiarios, donde faltan dólares», finalizó.

