El plan Sáenz Peña Sustentable y Circular volvió a remarcar la importancia del uso adecuado de las composteras comunitarias instaladas en distintos puntos de la ciudad, en el marco de una política municipal que busca fortalecer la gestión integral de residuos y promover hábitos responsables en la población.
La iniciativa forma parte de un programa más amplio que procura disminuir la cantidad de desechos enviados al relleno sanitario y avanzar hacia un esquema de economía circular con participación activa de vecinos y comercios.
La coordinadora del plan, Cecilia Cipolini, explicó que desde hace tiempo se viene trabajando en un proceso sostenido de sensibilización dirigido principalmente a los comerciantes del microcentro, quienes fueron convocados a sumarse mediante la instalación de composteras comunitarias en zonas estratégicas.
Según detalló, esta acción se complementa con una serie de capacitaciones y recomendaciones destinadas a ordenar el tratamiento de los residuos orgánicos generados por las actividades comerciales diarias.
Cipolini señaló que «hace tiempo venimos concientizando a los comerciantes del centro instalando composteras comunitarias, como en este caso en avenida 1 entre 12 y 10, para que aquellos que se adhirieron a este plan, puedan volcar sus productos desechables».
La referente municipal remarcó que estas instalaciones tienen una función específica y que su uso adecuado es fundamental para evitar prácticas que perjudiquen el proceso de compostaje y comprometan la calidad del material generado.
En esa misma línea, la responsable del plan aclaró que «el tema que debemos aclarar es que la compostera es para gestionar residuos orgánicos y evitar bolsas de plástico para no contaminar».
Con este señalamiento, subrayó que uno de los principales problemas detectados en los últimos meses es el depósito de materiales ajenos al proceso de compostaje, como bolsas y elementos no biodegradables, lo que dificulta el funcionamiento y altera los objetivos previstos por el programa.
La coordinadora reconoció que, pese a los avances logrados con la adhesión de numerosos comercios, todavía persisten malentendidos en cuanto al uso correcto de las composteras, especialmente en lo relacionado con la separación previa de residuos. Explicó que se verificaron situaciones en las que se colocaron elementos plásticos u otros materiales que no corresponden al circuito orgánico, lo cual genera inconvenientes operativos y retrasa el proceso de generación de abono.
Sobre este punto, Cipolini fue categórica al afirmar que «la idea es generar abono y las bolsas impiden eso. Es importante que el vecino se haga cargo de sus propios residuos y la compostera no es para eso ni tampoco el espacio público, para eso hay días en el que pasa el recolector».
De esta manera, recordó que cada tipo de residuo cuenta con un circuito específico y que el espacio público no debe utilizarse como punto de disposición final.
PARTICIPACIÓN CIUDADANA Y RESPONSABILIDAD COMPARTIDA
El plan Sáenz Peña Sustentable y Circular sostiene como uno de sus ejes centrales la autogestión de residuos domiciliarios por parte de los vecinos, bajo el principio de responsabilidad compartida entre población y municipio.
Este enfoque se sustenta en la normativa vigente que obliga a cumplir con la separación de residuos y a participar activamente de los programas de reciclaje disponibles en la ciudad.
Cipolini recordó que «el objetivo del plan es que los vecinos puedan autogestionar todos los residuos, podemos y debemos trabajar todos juntos, ya que por ordenanza estamos obligados en separar los residuos, participar del reciclaje. Mucha gente entendió la importancia real de gestionar los residuos».
Con esta declaración, puso de relieve que una parte significativa de la población ya adoptó nuevas prácticas y se compromete con el proceso.
Manejo adecuado de orgánicos
Dentro de la estructura del plan, los residuos orgánicos ocupan un rol central debido a su volumen y a su potencial para transformarse en abono a través del compostaje.
La Municipalidad informó que, además de las composteras comunitarias, los vecinos pueden gestionar su propio dispositivo doméstico, lo que contribuye a reducir significativamente la carga de basura que ingresa al sistema de recolección tradicional.
Quienes deseen iniciarse en el compostaje pueden acercarse al Centro Cultural Municipal (CCM), donde personal especializado se encuentra disponible para brindar asesoramiento sobre métodos, materiales aptos y condiciones necesarias para obtener un compost de calidad.
Este acompañamiento busca garantizar que el proceso se realice correctamente y que los vecinos adquieran herramientas para sostener la práctica a largo plazo.
El asesoramiento incluye explicaciones sobre qué residuos pueden compostarse -principalmente restos vegetales, residuos de cocina y hojas secas- y cuáles deben descartarse por otras vías.
Desde el municipio se enfatiza que el éxito del compostaje depende de la selección adecuada de materiales y del mantenimiento periódico del dispositivo, evitando la inclusión de plásticos, metales o elementos contaminantes.
Además, se recordó que el compostaje contribuye a disminuir la cantidad de residuos orgánicos enviados al vertedero, reducir olores y mejorar la calidad del suelo en huertas y jardines urbanos.
La generación de abono natural constituye uno de los pilares del enfoque circular promovido por el plan, al transformar los desechos biodegradables en un recurso útil dentro de la comunidad.
Por último, la Municipalidad reiteró que la correcta utilización de los dispositivos de compostaje, tanto comunitarios como domiciliarios, es esencial para sostener los objetivos del plan Sáenz Peña Sustentable y Circular.
Asimismo, enfatizó que el compromiso ciudadano es determinante para fortalecer un modelo de gestión que prioriza la sustentabilidad, reduce el impacto ambiental y promueve hábitos responsables en cada etapa del proceso.

