El fiscal Bogado realiza su alegato final en el juicio. Durante la decimosegunda audiencia en la 22632/2023-1 «Sena, César Mario Alejandro y otros s/ femicidio», declararon los dos últimos testigos ofrecidos por la defensa: el policía José Díaz y el perito Rubén Garat.

De esta manera hubo 49 declaraciones en la etapa de producción de la prueba: 29 de la acusación y 20 de las defensas. Luego cinco imputados declararon ante el jurado. Fueron: Emerenciano Sena, Fabiana González, Griselda Reinoso, Gustavo Melgarejo y Marcela Acuña.
En una jornada clave del juicio por jurados por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, el fiscal Martín Bogado, integrante del Equipo Fiscal Especial, pidió al jurado popular declarar culpables a los siete acusados. En su alegato, sostuvo que el crimen fue “premeditado” y ejecutado dentro de la casa de los Sena. “A Cecilia la mataron, eso no es política, eso es un femicidio”, afirmó.
Pasadas las 9:20, Bogado inició su exposición asegurando que Cecilia “creía que iba a ser feliz con César Sena” y que “lamentablemente se cruzó con las personas equivocadas”. En su reconstrucción, el fiscal presentó el caso como “un rompecabezas” en el que cada prueba encaja para revelar un plan que —dijo— fue ideado por Marcela Acuña y Emerenciano Sena, con la participación directa de su hijo César.
“El viaje nunca existió”
Según el fiscal, el crimen comenzó con una trampa: un falso viaje. “La manipularon con una falsa herencia, le ofrecieron dinero y montaron un viaje inexistente, que funcionaría como coartada del crimen”, detalló.
El 2 de junio de 2023, Cecilia fue vista por última vez. Las cámaras registraron su recorrido: desde la casa de la abuela de César, al café Gato Negro, luego al motel Ruta 69 y finalmente a la vivienda de Santa María de Oro, donde —según la acusación— fue asesinada.
“Emerenciano y Marcela salieron antes de que la pareja ingresara. Allí César mató a Cecilia en una de las habitaciones. Ella se defendió; tenía rasguños en el cuerpo”, dijo Bogado.
La coartada y el encubrimiento
El fiscal relató que César salió de la casa a las 10:45 y regresó al mediodía para “continuar con la segunda parte del plan”: borrar pruebas y simular normalidad. En esa secuencia, se produjeron mensajes y audios clave entre Marcela, Emerenciano y los colaboradores.
A las 16, una mujer que trabajaba planchando llegó al domicilio y vio a Marcela “rara”. Escuchó una frase que el fiscal calificó como reveladora: “Lo mismo de siempre”. “Fue la única persona en esa casa que no sabía que había un cuerpo”, afirmó.
Las cámaras de seguridad —explicó Bogado— muestran la camioneta en la que trasladaron el cuerpo envuelto en bolsas hacia Campo Rossi, donde fue quemado a 250 metros de la vivienda de los caseros. Las antenas telefónicas confirmaron la presencia de César y Obregón en la zona.
Esa noche, los imputados quemaron la valija, los teléfonos y pertenencias de la joven. “En todos los lugares, Cecilia dejó su rastro”, enfatizó el fiscal.
“Explíquenme dónde terminó Cecilia”
En uno de los tramos más impactantes del alegato, Bogado citó una frase que César habría dicho tiempo atrás:
“Cuando querían deshacerse de alguien, le inventaban un viaje y terminaba en la chanchería.”
Y lanzó una pregunta al jurado:
“Explíquenme entonces, ¿dónde terminó Cecilia?”
“Eso no es política, es femicidio”
El fiscal cuestionó con dureza la estrategia de defensa de Marcela Acuña, quien intentó enmarcar el caso como una persecución política.
“¿Vieron una madre desesperada por cuidar a su hijo? Marcela dijo que esto era político. A Cecilia la mataron, eso no es política, eso es un femicidio”, sostuvo.
También apuntó contra Emerenciano Sena:
“Sabía lo que había pasado. Si Obregón estaba involucrado, era porque lo había mandado su jefe.”
Ante los cuestionamientos por la falta de autopsia, respondió:
“Es obvio que no hay autopsia si dejaron solo polvo y cenizas. El certificado de defunción llegará cuando termine este juicio.”
El pedido final
En su cierre, Bogado pidió al jurado declarar:
- Culpable a César Sena por homicidio agravado por el vínculo y por femicidio.
- Culpables a Marcela Acuña y Emerenciano Sena como partícipes necesarios.
- Y culpables a Fabiana González, Gustavo Obregón, Griselda Reinoso y Gustavo Melgarejo por encubrimiento agravado.
“A Cecilia la mataron. Eso no es política, es femicidio. Y la justicia debe decirlo con todas las letras”, concluyó.

