El duelo entre Rosario Central y Estudiantes en el Gigante de Arroyito tomó un matiz polémico. Obligado por la Liga Profesional a realizar un pasillo de honor al «Canalla» por su reciente título de Liga 2025 (otorgado por tabla anual), el plantel de Eduardo Domínguez se formó y luego, de forma simbólica, se dio vuelta para protestar de espaldas.
La polémica desatada en el fútbol argentino por la coronación de Rosario Central como campeón de la Liga 2025, un título otorgado de manera intempestiva basándose en la tabla anual, tuvo su clímax de protesta en la cancha.
Previo al encuentro entre el «Canalla» y Estudiantes de La Plata, el plantel dirigido por Eduardo Domínguez protagonizó un irónico y simbólico gesto de desacuerdo, al realizar el pasillo de campeón dándole la espalda a los jugadores del equipo local.
El Desacuerdo Institucional del “Pincha”
El gesto del plantel se alineó con la postura institucional de Estudiantes, que fue el único equipo en revelar públicamente que la decisión de otorgar el título a Rosario Central no fue sometida a votación durante la reunión del Comité Ejecutivo de la Liga Profesional.
A pesar de la controversia, y en cumplimiento de la normativa, la Liga Profesional comunicó que el conjunto platense debía realizar el tradicional pasillo de honor.
Sin embargo, el equipo de Domínguez transformó la obligación en protesta. Los futbolistas de Estudiantes se formaron en dos filas y, justo antes de que los campeones ingresaran al campo de juego, se dieron vuelta en conjunto, realizando el homenaje de espaldas y dejando en claro su total desacuerdo con la legitimidad de la coronación.
La imagen se viralizó de inmediato, marcando un hito en la historia de las protestas silenciosas y confirmando la alta temperatura política y deportiva que envuelve al fútbol argentino.

