El ministro de Hacienda y Finanzas del Chaco, Alejandro Abraham, entrevistado por Radio Natagalá, detalló la situación financiera de la provincia en el cierre de 2025.
Asimismo, explicó debido al contexto económico nacional complejo, los recursos provinciales no se incrementaron en la misma proporción, lo que generó tensiones financieras. «Se hizo un gran sacrificio para poder incrementar los sueldos en un momento en lo cual la inflación era abismal», remarcó.
Además, recordó que los incrementos salariales desde enero de 2024 alcanzaron un 260% para docentes y 180% para la masa general, mientras que los recursos crecieron alrededor del 6,5%. Este desfase, explicó, obligó a recurrir a mecanismos de financiamiento extraordinarios para mantener la operatividad del Estado.
Abraham subrayó que la actividad económica aún no presenta signos de reactivación sostenida y que el equilibrio fiscal nacional genera restricciones sobre la circulación de dinero en el mercado.
Por otra parte, recalcó que el escenario provincial se ve marcado por la necesidad de conciliar la cobertura de gastos salariales y el sostenimiento de servicios esenciales. «Hoy lo que hace es en una inflación mucho más baja, y en donde, si no hay una reactivación de la economía que pueda compensar esos recursos, genera esta necesidad permanente de recurrir al anticipo de coparticipación, a la asistencia del banco», explicó.
El ministro remarcó que los desafíos incluyen además la gestión de la deuda previsional. Abraham indicó que desde octubre se cerró un acuerdo con la Nación para transferir $40 mil millones en 12 cuotas, destinados a cubrir el déficit previsional provincial.
Sin embargo, recordó que la cifra es insuficiente frente a las necesidades actuales y requiere seguimiento detallado y conciliaciones pendientes desde ejercicios anteriores. «Hay conciliaciones pendientes de 2018, entonces evidentemente no se fueron haciendo esas conciliaciones», indicó.
El funcionario explicó que la estimación de deuda que mantiene la Nación con la provincia asciende a $160 mil millones, cifra sujeta a ajustes mediante auditorías y conciliaciones con la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).
En tanto que detalló que existen diferencias de criterios entre la Provincia y la Nación respecto de la edad de jubilación y el cálculo del monto a reconocer, destacando la importancia de establecer un esquema de actualización conforme al sistema previsional.
PROYECCIONES Y PLANIFICACIÓN FISCAL
Abraham adelantó que la provincia trabaja en proyecciones para 2026, en coordinación con programas nacionales orientados a brindar liquidez. Señaló que la evolución de la masa salarial dependerá del comportamiento de los recursos coparticipables y que aún no se definió un esquema concreto de incrementos. «Tenemos que ser conscientes de que dependemos de la coparticipación de impuestos.
Entonces, bueno, hay que ver cómo evolucionan esos recursos y, en la medida en que vayan evolucionando favorablemente, sin duda que hay margen», precisó.
En relación con el Presupuesto 2026, el ministro explicó que por primera vez se considera un incremento salarial basado en variables macroeconómicas proyectadas, lo que permite ajustar la masa salarial de manera más coherente con la inflación.
Anteriormente, señaló, los presupuestos solo contemplaban la masa devengada en los últimos meses del año y se proyectaban sin incorporar posibles variaciones salariales. Abraham enfatizó que esta nueva metodología responde a la necesidad de anticipar los efectos de la inflación y la disponibilidad de recursos.
En cuanto al cierre del ejercicio fiscal 2025, Abraham indicó que la provincia recibió $120 mil millones de Nación en marzo, de los cuales se abonaron seis cuotas. Estas transferencias, explicó, se enmarcan en un esquema de compensaciones y financiamiento que permite afrontar los compromisos salariales y operativos del Estado provincial.
La gestión de estos fondos incluye además la transferencia proporcional a los municipios y la administración de los recursos de cada ministerio para garantizar su funcionamiento.
Financiamiento y gestión de la deuda
El ministro abordó también la refinanciación de deuda provincial, enfatizando que se actuó con el objetivo de garantizar la continuidad del servicio público.
Abraham explicó que los compromisos financieros previos exigían recurrir a anticipos de coparticipación y asistencia bancaria, y que estas decisiones se tomaron considerando la cobertura de necesidades esenciales de los chaqueños. «No se requiere capital político para hacer la refinanciación de la deuda. La refinanciación no había plazos posibles porque estábamos con el vencimiento encima», sostuvo.
El funcionario señaló que la gestión previa dejó pendientes diversas obligaciones financieras y carencias en recursos, incluyendo medicamentos y depósitos abandonados.
Además, afirmó que las decisiones adoptadas buscaban cubrir estos vacíos y proteger a la población frente a la falta de prestaciones, y destacó que la priorización se hizo pensando en los ciudadanos.
Relaciones institucionales
En el marco de la aprobación legislativa del Fondo de Alta Complejidad y otros proyectos, Abraham evitó emitir calificativos sobre exfuncionarios que cuestionaron la gestión actual. «Yo no uso de adjetivos de calificador. Me parece que ir a esa chicana ya no tiene sentido.
Él cumple su rol de legislador, ya fue ministro, hoy no lo es», expresó.
El ministro subrayó que la atención debe centrarse en los problemas estructurales y no en debates políticos estériles.
En relación con críticas sindicales sobre desfasajes salariales, Abraham recordó que los incrementos otorgados en 2024 y 2025 superaron la inflación anual.
Explicó que los recursos necesarios para cumplir con estos aumentos provinieron de financiamiento extraordinario y que la planificación respondía a la necesidad de sostener la economía provincial y garantizar la cobertura de servicios esenciales.
Administración
del sistema de salud
La administración provincial enfrenta desafíos importantes en la cobertura sanitaria, especialmente en prestaciones de alto costo.
Abraham destacó que el Fondo de Alta Complejidad (FAC) aprobado recientemente por la Legislatura provincial busca dar respuesta a esta demanda creciente. «Es un sistema solidario de cobertura de salud en donde la demanda cada vez es mayor y los recursos son limitados», indicó.
El ministro explicó que la planificación de prestaciones de salud requiere diferir algunas atenciones en el tiempo para administrar de manera eficiente los recursos. Señaló que ciertas patologías requieren atención inmediata, mientras que otras pueden programarse sin afectar la calidad del servicio.
«Un sistema de salud funciona en un esquema de planificación de necesidades, en donde los recursos tenés que ir administrándolos y difiriendo prestaciones en el tiempo», precisó.
Por otra parte, aclaró que los fondos aprobados ayudan principalmente a cubrir medicamentos de alto costo y tratamientos urgentes, aunque no alcanzan a cubrir de manera absoluta toda la demanda. Citó estudios que señalan que un 15% de la población consume el 85% de los recursos, destacando la concentración de necesidades en casos complejos y la importancia de un sistema solidario para garantizar cobertura.