La defensa de uno de los policías imputados en la causa conocida como la de los “narcopolicías” presentó una recusación con causa contra la jueza federal Zunilda Niremperger, quien interviene en la investigación por el intento de sustracción de casi nueve kilos de cocaína durante un acto oficial de destrucción de estupefacientes realizado en diciembre en el polígono policial de Colonia Benítez.
El planteo fue formulado por los abogados Miguel Ángel Barceló y Macarena Barceló Fogar, representantes legales de Néstor Ariel Urne Canteros, uno de los siete efectivos de la Policía del Chaco que permanecen detenidos con prisión preventiva por 100 días. La defensa sostiene que existe un “temor fundado de parcialidad” por parte de la magistrada, a partir de resoluciones adoptadas tras las detenciones y de una presunta “relación virtual” de la jueza con uno de los imputados.
El hecho que originó la causa
El episodio que derivó en la investigación judicial ocurrió el 18 de diciembre pasado, durante la primera quema de drogas organizada por la Policía del Chaco. En el procedimiento se preveía la destrucción de aproximadamente 80 kilos de cocaína y unas tres toneladas de marihuana, con la presencia del juez federal Ricardo Mianovich, autoridades provinciales y jefes policiales.
Según la investigación impulsada por el fiscal federal Patricio Sabadini, durante el pesaje de uno de los cargamentos de cocaína se detectó una maniobra irregular. Dos de los efectivos habrían intentado distraer al personal judicial para sustraer parte del estupefaciente, ocultándolo en un patrullero. Al repetirse el pesaje, se constató un faltante superior al kilo, lo que derivó en una requisa inmediata del vehículo.
Como resultado, se hallaron nueve panes de cocaína con un peso total de 9,490 kilos escondidos debajo de los asientos y en mochilas, además de un “ladrillo” de yeso que habría sido utilizado para reemplazar el peso de la droga sustraída. El valor estimado del estupefaciente incautado supera los 140 mil dólares.
Los imputados y las medidas judiciales
La jueza Niremperger dictó el procesamiento de siete integrantes de la fuerza provincial por los delitos de tenencia de estupefacientes agravada y peculado. Entre los imputados se encuentran jefes y suboficiales que formaban parte de la Dirección de Consumos Problemáticos de la Policía del Chaco, área vinculada a la lucha contra el narcotráfico.
Tras el avance de la investigación, la magistrada dispuso la prisión preventiva por el plazo de 100 días para todos los involucrados, decisión que motivó el planteo de recusación presentado por la defensa de Urne Canteros.
El planteo de la defensa
En un escrito de 34 páginas al que accedió La Voz Del Chaco, los abogados cuestionan un proveído dictado el 19 de diciembre, al que califican de carente de “fundamento legal, lógico y racional”. Sostienen que la jueza habría favorecido a uno de los imputados en detrimento de los demás y que omitió ordenar medidas de prueba solicitadas por la defensa.
Según el planteo, estas actuaciones habrían afectado el principio de objetividad que debe regir el proceso penal, por lo que solicitaron el apartamiento de Niremperger de la causa. Los letrados aclararon que la recusación se formula en el marco del sistema acusatorio federal y que no implica un agravio personal, sino un cuestionamiento al desempeño procesal de la magistrada en este expediente.
Expectativa por la definición judicial
La recusación abre ahora un nuevo escenario en la causa, ya que deberá resolverse si la jueza continúa al frente de la investigación o si el expediente pasa a manos de un magistrado subrogante. Mientras tanto, los siete policías continúan detenidos y la causa sigue generando repercusión tanto en el ámbito judicial como en la fuerza de seguridad provincial.

Desde la fiscalía, en tanto, sostienen que la prueba reunida es contundente y que el intento de robo de la droga se produjo durante un procedimiento oficial y bajo la supervisión de autoridades judiciales, lo que refuerza la gravedad institucional del caso.


