Los primeros seis aviones de combate F-16 adquiridos por la Argentina arribaron a la ciudad de Río Cuarto, en Córdoba, marcando un avance clave en el proceso de modernización de las capacidades aéreas del país. La llegada forma parte del acuerdo firmado con Estados Unidos, que incluyó respaldo político, autorización de transferencia de aeronaves desde Dinamarca y financiamiento para la operación.

La ceremonia oficial contó con la presencia del presidente Javier Milei, el ministro de Defensa Luis Petri, el embajador estadounidense Peter Lamelas y autoridades de la Fuerza Aérea de ambos países. El paquete de adquisición, valuado en 560 millones de dólares, contempla no solo las aeronaves, sino también entrenamiento, mantenimiento y asistencia técnica a largo plazo. Como parte del acuerdo, Estados Unidos aportó 40 millones de dólares en Financiamiento Militar Extranjero para el pago inicial, mientras que el resto será asumido por el Estado argentino.

Los aviones operarán inicialmente en la base de Río Cuarto y posteriormente serán trasladados a su ubicación definitiva en Tandil, provincia de Buenos Aires. El plan prevé la llegada de seis aeronaves por año hasta completar las 24 unidades programadas para diciembre de 2028. Con esta incorporación, Argentina busca fortalecer su defensa aérea y avanzar en la interoperabilidad con fuerzas aliadas en el marco de una cooperación bilateral de largo plazo.

